La Fiscalía General de Justicia del Estado de Nuevo León aseguró este miércoles que el presunto secuestro de un grupo de 50 migrantes llevado a cabo por hombres armados que interceptaron el autobús en el que viajaban, ocurrió en el vecino estado de San Luis Potosí. Lo que ha enfrentado a las fiscalías de ambas regiones.
Desde que el martes que fue dada a conocer la información de que el autobús se había salido de su ruta, mientras se desplazaba de San Luis Potosí a Nuevo León, las fiscalías de ambos estados no han reconocido que los sucesos hayan ocurrido en su territorio y por el contrario lo adjudican en la entidad vecina.
Este miércoles, el encargado del despacho de la Fiscalía de Nuevo León, Pedro Arce, declaró a medios que en el estado «solamente se realizó el hallazgo de la unidad en la cual viajaban los 50 migrantes y dos choferes», además de brindar apoyo a 9 migrantes que escaparon de los captores y que fueron hallados en una carretera.
«Se reportó el hallazgo de un autobús que al parecer está vinculado con la desaparición de unos migrantes, que hasta el momento se tiene indicado que sucedió en el estado de San Luis Potosí», señaló Arce.
Incluso aseguró que la denuncia por el robo de la unidad se interpuso en San Luis Potosí y será entregada allá, una vez que así lo determine el Ministerio Público y Servicios Periciales de la Fiscalía de Nuevo León.
El encargado del despacho de la Fiscalía compartió que el GPS de la unidad de pasajeros confirma que los sucesos ocurrieron en San Luis Potosí.
«Cerca del municipio de Cedral (San Luis Potosí) sale de su ruta original y estuvo detenido 30, 40 minutos», explicó y dijo posteriormente, el vehículo fue encontrado en el municipio de Galeana, Nuevo León.
La noche del martes, la Fiscalía General de Justicia de San Luis Potosí sostuvo que la privación ilegal de la libertad de los 50 migrantes sucedió en el estado de Nuevo León.
En México, una de las formas que usan los migrantes para buscar alcanzar la frontera con Estados Unidos es la renta de autobuses de pasajeros, pero son fácil presa de presuntos miembros del crimen organizado en su trayecto.
Arce confirmó que del grupo de 50 migrantes secuestrados, nueve, siete venezolanos y dos hondureños, lograron escapar de sus captores y se les brindó ayuda en Nuevo León luego de que fueron ubicados en el municipio de Doctor Arroyo, en los límites entre Nuevo León y San Luis Potosí.
Este miércoles, en su conferencia diaria, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que se está atendiendo el secuestro de los 50 migrantes en la carretera federal 57, en Matehuala, San Luis Potosí.
Para ello señaló que la Guardia Nacional puso en marcha un operativo y dijo que posiblemente estos hechos estén vinculados al secuestro de 121 migrantes, a inicios de abril, ocurrido en la misma región.
Los hechos ocurren cuando miles de migrantes intentan llegar a la frontera norte de México luego de que hace una semana, Estados Unidos dejó de aplicar el Título 42, que permitía expulsar de inmediato a migrantes ilegales con el pretexto de la covid-19.
Pero instauró otras restricciones a las solicitudes de asilo en la frontera y comenzó a deportar mediante otra normativa conocida como Título 8 que sí permite a los migrantes pedir asilo al llegar a la frontera, pero tienen que cumplir varios requisitos, entre ellos haberlo solicitado en los países por donde han pasado o de lo contrario pueden ser deportados rápidamente.
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