WASHINGTON— El 28 de agosto, el Departamento del Tesoro publicó una guía largamente esperada por las empresas sobre cómo implementar el plan de alivio de impuestos sobre la nómina del presidente Donald Trump .
Trump firmó una orden ejecutiva el 8 de agosto que pospuso la recaudación de impuestos sobre la nómina de los empleados pagados desde el 1 de septiembre hasta fin de año.
El aviso de tres páginas del IRS aclara que la exención de impuestos sobre la nómina se aplica solo a los salarios por debajo del umbral quincenal de USD 4000. También hace que los empleadores sean los principales responsables de pagar los impuestos diferidos el próximo año.
La buena noticia para los empleadores es que solo deben prestar atención a los 4000 dólares por período de pago, según Pete Isberg, vicepresidente de relaciones gubernamentales de la empresa de procesamiento de nóminas ADP.
“Ese es el único umbral. Eso hace que sea mucho más fácil para los empleadores calcular y determinar quién es elegible”, dijo Isberg a The Epoch Times.
La parte más sorprendente de la guía, según los expertos en impuestos, es que los empleadores son responsables de reembolsar los montos diferidos, mientras que muchos esperaban que los empleados los pagaran con su declaración de impuestos anual del formulario 1040 del IRS.
“Los empleadores tienen la carga de acumular y contabilizar los montos diferidos y luego, a partir de enero, de manera uniforme durante un período de cuatro meses, retener esos impuestos y pagarlos al IRS”, según Isberg.
La implementación plantea algunas preguntas para las empresas y los empleados.
“¿Qué pasa si los empleados dejan su trabajo? Podrían aplazar algunos impuestos en septiembre y octubre y luego podrían dejar o cambiar de trabajo. ¿Tiene el empleador la oportunidad de cobrar esos impuestos diferidos antes de que la persona se vaya?», preguntó Isberg.
La tasa impositiva actual del Seguro Social es del 12.4 por ciento, dividida equitativamente entre empleadores y empleados, hasta el máximo imponible de USD 137,700. La Ley CARES promulgada en marzo permitió a las empresas diferir la parte del empleador de los impuestos sobre la nómina desde el 27 de marzo de 2020 hasta fin de año.
Con el fin de proporcionar algún alivio temporal a los trabajadores, la orden ejecutiva de Trump permite que las empresas difieran la obligación del empleado de pagar los impuestos del 6.2 por ciento. Sin embargo, la implementación sería opcional para las empresas.
El programa también podría ser opcional para los empleados, según Isberg, pero eso no se aborda en la guía.
“Suponiendo que el empleador quiera dar a los empleados la opción de aplazar o no aplazar —lo cual probablemente harán— ¿cómo se administra eso? Esa es una pregunta que en realidad debe plantear a 100 millones de trabajadores en los próximos días».
Explicar a los empleados, mantener registros y administrar todo esto será una gran carga de trabajo para los empleadores, agregó.
Los trabajadores obtendrán un aumento salarial neto del 6.2 por ciento de septiembre a diciembre si sus empleadores optan por el aplazamiento del impuesto sobre la nómina.
El próximo año, de enero a abril, sin embargo, será exactamente lo contrario.
“Comenzarán a pagar sus impuestos del Seguro Social de 2021 también en enero, por lo que es casi como si tuvieran una deducción doble para los impuestos del Seguro Social en los primeros cuatro meses de 2021”, dijo Isberg.
Trump dijo anteriormente que esperaba que el Congreso aprobara una legislación que perdonara esos impuestos diferidos. Si bien la administración puede retrasar la recaudación de impuestos, solo el Congreso puede perdonar esos impuestos de forma permanente.
No está claro si el Congreso lo aprobará. Ni la ley republicana HEALS ni la Ley HEROES de los demócratas, que se están negociando actualmente, incluyen un recorte de impuestos sobre la nómina.
Los grupos empresariales instan al Congreso y a la administración Trump a trabajar juntos para proporcionar una desgravación fiscal permanente a los empleados.
«Si esto fuera una suspensión del impuesto sobre la nómina para que los empleados no se vieran obligados a devolverlo más tarde, la implementación sería menos desafiante», afirmaron asociaciones empresariales lideradas por la Cámara de Comercio de Estados Unidos en una carta el 18 de agosto.
«Pero bajo un simple aplazamiento, los empleados estarían atrapados con una gran factura de impuestos en 2021».
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