Mientras una huelga potencialmente paralizante se cierne sobre la industria automotriz heredada, el multimillonario Elon Musk ha apuntado al poderoso United Auto Workers (UAW), el sindicato que representa a los trabajadores en huelga, para promover lo que él afirma son mejores condiciones de trabajo en su propia compañía automotriz, Tesla.
«Las fábricas de Tesla y SpaceX tienen un gran ambiente. Animamos a tocar música y a divertirse. Es muy importante que la gente tenga ganas de venir a trabajar». Musk dijo en un post del 14 de septiembre en X: «Pagamos más que la UAW btw, pero las expectativas de rendimiento también son más altas.»
El presidente de United Auto Workers, Shawn Fain, respondió el domingo en el programa «Face the Nation» de la CBS, afirmando que los trabajadores de empresas como Tesla «están rascando para salir adelante para que los codiciosos directores ejecutivos y los codiciosos como Elon Musk puedan construir más cohetes».
El debate sobre quién gana más sueldo depende de cómo se midan los ingresos, según los expertos financieros. Los trabajadores de Tesla ganan unos 45 dólares la hora en salarios y prestaciones, mientras que los empleados representados por la UAW en las empresas automovilísticas heredadas ganan de media entre 64 y 67 dólares la hora, según Reuters. Sin embargo, Musk afirma que las opciones sobre acciones para empleados que ofrece Tesla hacen que sus trabajadores de fábrica estén entre los mejor remunerados del sector, y afirma que «bastantes» trabajadores de línea se han hecho «millonarios a lo largo de los años gracias a las concesiones de acciones de la empresa.»
Mike Shedlock, analista de inversiones y bloguero económico en MishTalk, dijo a The Epoch Times que, si bien Musk tiene razón al afirmar que sus empleados han cobrado más, su declaración también era engañosa en el contexto de los posibles beneficios futuros.
«Musk solo paga más a sus empleados si se pueden considerar las opciones sobre acciones como retribución, pero las opciones sobre acciones no deberían considerarse retribución, ya que el rendimiento pasado no es necesariamente indicativo de los pagos futuros», dijo Shedlock. «Es poco probable, pero las empresas quiebran y cuando eso ocurre esas opciones se reducen a cero. Sin embargo, en los últimos cinco años es cierto que sus empleados en Tesla han cobrado más.»
La disputa entre la UAW y Tesla, contraria a los sindicatos, ambos competidores en el mercado de los vehículos eléctricos, lleva varios años fraguándose. Las tensiones parecían haber aumentado en los últimos años con la administración pro-laboral del presidente Joe Biden, que parecía formar una alianza con los fabricantes de automóviles de Detroit liderados por los sindicatos, mientras que a menudo rehuía a Tesla, que representa el 60 por ciento de todas las nuevas ventas de vehículos eléctricos en los Estados Unidos, según InsideEVs.
En 2021, la Administración celebró una cumbre sobre vehículos eléctricos e invitó a ejecutivos de General Motors, Ford y Stellantis, matriz de Chrysler, conocidos colectivamente como los Tres Grandes, al jardín de la Casa Blanca, pero desairó a Musk. Cuando se le preguntó si el hecho de que Tesla no estuviera sindicada era la razón por la que no se había invitado al propietario del mayor fabricante de vehículos eléctricos, la entonces secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, respondió: «Bueno, estos son los tres mayores empleadores del sindicato United Auto Workers, así que dejaré que saquen sus propias conclusiones.»
En enero de 2022, en respuesta a otro desaire percibido, esta vez durante el Estado de la Unión del presidente Biden, Musk llamó al presidente «marioneta húmeda [de calcetín] con forma humana«. Musk afirmaría más tarde que Biden «ha ignorado a Tesla en todo momento y ha declarado falsamente al público que GM lidera la industria del coche eléctrico.»
Los expertos financieros creen que el empresario espera que sus comentarios animen a los líderes sindicales a continuar la huelga y, de paso, perjudiquen a su incipiente competencia.
«Musk es un genio. Se está burlando de la UAW y lo está haciendo bien», dijo Shedlock. «En la medida en que pueda contribuir a una huelga más larga, o a mayores concesiones por parte de los fabricantes de automóviles, solo se está ayudando a sí mismo».
Más de 13.000 empleados de las Tres Grandes abandonaron el trabajo en la medianoche del jueves al viernes después de que la dirección rechazara sus demandas de una semana laboral de cuatro días y un aumento salarial del 46 por ciento. La huelga coordinada entre los negociadores de la UAW y los representantes de los fabricantes de automóviles de Detroit se ha convertido en una de las acciones sindicales de mayor repercusión en el país en décadas y se produce en un momento en que la afiliación a los sindicatos, en descenso desde hace décadas, sigue alcanzando nuevos mínimos.
Además, el paro laboral de la UAW supondría un enorme obstáculo para los fabricantes de automóviles de Detroit, con un coste de entre 400 y 500 millones de dólares por semana de producción, justo cuando se están preparando con la esperanza de desafiar a la Tesla de Musk.
La UAW y los fabricantes de automóviles reanudaron las negociaciones el lunes, cuando la huelga entraba en su cuarto día. Sin embargo, cuanto más se prolongue la huelga y más daño imponga a la industria automovilística heredada, más beneficiará a Musk y Tesla.
«Ahora mismo, Elon Musk es el único que produce vehículos eléctricos y, si se sale con la suya, lo mantendrá así el mayor tiempo posible», afirma Shedlock.
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