El Servicio Meteorológico Nacional advirtió el 15 de septiembre que el suroeste de Luisiana se enfrenta a un «alto riesgo» de inundaciones repentinas debido a la depresión tropical Nicholas.
Este tipo de advertencias de «alto riesgo», el más grave y severo, rara vez se emite en Estados Unidos.
Las lluvias de la tormenta se desplazarán sobre la zona el miércoles y se espera que los chubascos produzcan altas tasas de precipitación y totales de lluvia significativos de alrededor de 5 a 10 pulgadas, y es posible que se produzcan cantidades localmente mayores, dijo el Centro Nacional de Huracanes (NHC) el miércoles por la mañana.
Algunas de las localidades que se espera que experimenten inundaciones repentinas incluyen Ville Platte, Marksville, Bunkie, Mamou, Glenmora, Cheneyville, Turkey Creek, Cottonport, Pine Prairie, Mansura, Lecompte, Hessmer, Evergreen, Bayou Chicot, Chicot State Park, Indian Lake, Whiteville, Echo, Reddell y Poland.
«Dé la vuelta, no se ahogue cuando se encuentre con carreteras inundadas. La mayoría de las muertes por inundación se producen en vehículos. Sea especialmente cauteloso por la noche, cuando es más difícil reconocer los peligros de las inundaciones», advirtió la agencia.
El martes, el NHC advirtió que se esperan inundaciones fluviales de menores a aisladas en partes de la costa superior del Golfo de Texas y en el sur de Luisiana y Misisipi.
«Es posible que se produzcan impactos de inundaciones repentinas con peligro de muerte, especialmente en las zonas urbanas, en todas estas regiones», dijo el NHC.
Agregó que eran posibles totales de tormenta aislados de 20 pulgadas desde el sur de Luisiana hasta el extremo occidental del Panhandle de Florida.
También se esperan inundaciones repentinas «con peligro de muerte» en otras partes del sur profundo, dijo el NHC en el boletín del martes.
Amplias zonas del sur de Luisiana siguen lidiando con las secuelas del huracán Ida, y decenas de miles de personas siguen sin electricidad. El número de muertos en Luisiana por el huracán Ida asciende a 26, después de que las autoridades sanitarias informaran la semana pasada de otras 11 muertes en Nueva Orleans.
El lunes, el presidente Joe Biden aprobó la solicitud del gobernador John Bel Edwards y emitió una declaración de emergencia federal para la tormenta tropical Nicholas, lo que permite a Luisiana movilizar los recursos federales que el estado ya tiene en marcha, así como solicitar recursos adicionales si son necesarios.
En estos momentos también se mantiene una alerta por inundaciones repentinas en Nueva Orleans, donde se espera que Avondale, Marrero, Metairie, Harvey, Timberlane, Belle Chasse, Chalmette, East New Orleans, Hahnville, Jefferson, Gretna, Harahan, Westwego, Bridge City, Elmwood, River Ridge, Waggaman, Estelle y Woodmere sufran inundaciones repentinas.
Nicholas tocó tierra como huracán de categoría 1 el lunes en Texas, pero se degradó a tormenta tropical durante la madrugada del martes.
Con información de Reuters.
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