El Departamento de Justicia (DOJ, por sus siglas en inglés) demandó al proveedor de viviendas Southwest Key Programs Inc. por acusaciones de que la organización sin ánimo de lucro con sede en Texas «incurrió en un patrón» de abusos sexuales y acoso a niños migrantes no acompañados durante años, en violación de la Ley de Vivienda Justa.
La demanda se presentó el 17 de julio ante la corte de Distrito de EE. UU. para el Distrito Oeste de Texas.
En ella figura Southwest Key Programs Inc. como único demandado.
Según el DOJ, desde al menos 2015 hasta 2023, los empleados de Southwest Key presuntamente sometieron a los niños migrantes no acompañados a su cuidado a «abuso sexual, acoso y mala conducta repetidos e inoportunos y a un ambiente de vivienda hostil».
Esto incluyó «abuso sexual grave y violación, solicitud de actos sexuales, solicitud de fotos de desnudos, súplicas de relaciones sexualmente inapropiadas, comentarios y gestos sexuales, miradas lascivas y tocamientos inapropiados», alega el DOJ en su demanda.
En algunos casos, los empleados de Southwest Key presuntamente «amenazaban a los niños para que mantuvieran su silencio», afirma la demanda.
«Al acosar a estos niños, estos empleados de Southwest Key explotaron las vulnerabilidades de los niños, las barreras lingüísticas y la distancia de la familia y los seres queridos», alega el DOJ.
Southwest Key, a pesar de ser consciente de estos «daños graves y generalizados», no tomó las medidas adecuadas para proteger a los niños a su cargo y no siguió los requisitos federales para prevenir, detectar y denunciar los abusos, incluido el acoso sexual, alega el departamento.
El proveedor de cuidados también «disuadió» a los niños de revelar casos de acoso sexual, infringiendo los requisitos federales, alegó el DOJ.
Las acciones de la organización sin ánimo de lucro «constituyen una pauta o práctica de discriminación en materia de vivienda en base al sexo en violación de la Ley de Vivienda Justa», alega el Departamento.
Abusivo, deshumanizante e ilegal
«El acoso sexual de niños en centros de acogida, donde un niño debería estar seguro y protegido, es abusivo, deshumanizante e ilegal», afirmó en un comunicado la fiscal general adjunta Kristen Clarke, de la División de Derechos Civiles del Departamento de Justicia. «El abuso sexual de menores es una crisis que no podemos ignorar ni hacer la vista gorda».
La Sra. Clarke dijo que la demanda del DOJ no solo busca alivio para los niños que han sufrido presuntos abusos a manos de los empleados de Southwest Key Programs, sino que también busca «reformas significativas» para garantizar que ningún niño en estos refugios vuelva a ser objeto de abuso sexual.
En una declaración enviada por correo electrónico a The Epoch Times, la portavoz de Southwest Key, Anais Biera Miraclea, dijo que el objetivo principal del proveedor de alojamiento es la «seguridad, salud y bienestar de cada uno de los niños y jóvenes que cuidamos».
Southwest Key está revisando la queja, que «no presenta la imagen exacta de la atención y el compromiso que nuestros empleados brindan a los jóvenes y niños», dijo.
«Estamos en constante comunicación y seguimos colaborando estrechamente con la Oficina de Reasentamiento de Refugiados (ORR), como lo hemos hecho durante las últimas dos décadas para garantizar que los niños y jóvenes confiados a nuestro cuidado estén seguros con nosotros durante su corta estancia en Southwest Key», declaró la Sra. Miraclea.
Southwest Key Programs Inc. es una de las mayores organizaciones sin ánimo de lucro dirigidas por latinos en Estados Unidos, según su sitio web oficial, donde se describe a sí misma como un «socio integral en la respuesta estadounidense a la crisis migratoria en nuestra frontera sur».
La organización proporciona alojamiento a los menores inmigrantes no acompañados menores de 18 años que llegan a la frontera terrestre sur de Estados Unidos sin padre, madre o tutor.
Southwest Key recibió miles de millones en subvenciones federales
Según el DOJ, Southwest Key cuenta actualmente con 29 albergues para niños migrantes —17 en Texas, 10 en Arizona y dos en California— con capacidad para 6350 niños.
El refugio más grande de la empresa en Brownsville, Texas, se encuentra en un Walmart reconvertido y tiene capacidad para 1200.
En su demanda, el DOJ señaló que Southwest Key recibe subvenciones de la Oficina de Reasentamiento de Refugiados (ORR) del Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS) de EE. UU. para proporcionar alojamiento y otros cuidados a los niños no acompañados en sus diversos refugios.
El DOJ dijo que entre los años fiscales 2015 y 2023, Southwest Key recibió más de tres mil millones de dólares en financiación del HHS.
Como receptor de fondos federales, Southwest Key «es responsable de garantizar que gestionará la atención de sus albergues de forma no discriminatoria, y dio garantías contractuales expresas de que cumpliría todos los estatutos federales relativos a la no discriminación, incluida la Ley de Vivienda Justa», dice la demanda.
El DOJ solicita una cantidad no especificada en concepto de daños y perjuicios monetarios, una sanción civil para «reivindicar el interés público» y que el tribunal prohíba a Southwest Key toda discriminación futura. También pide al tribunal que garantice que Southwest Key tome las medidas adecuadas para evitar este tipo de acoso en el futuro.
El DOJ solicita un juicio con jurado en el asunto.
Con información de The Associated Press.
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