EN DETALLE: Trump domina primeros apoyos en Partido Republicano aventajando a DeSantis 72 a 5

El expresidente Donald Trump se ha adelantado rápidamente en la competencia por los apoyos, y mucho, como diría él.

Algunos seguidores del gobernador de Florida, Ron DeSantis, temen que por no haber declarado aún su candidatura hasta el 3 de mayo haya perjudicado sus posibilidades. Muchos creen que DeSantis habría entrado en la contienda antes si no fuera por la ley de renunciar para postularse de Florida, que los legisladores han trabajado para ajustar, probablemente para dar cabida a una candidatura presidencial de DeSantis.

Mientras tanto, Trump ha engullido apoyos como un Pac-Man político, incluso en el estado natal de DeSantis.

Hasta el 1 de mayo, Trump contaba con 11 congresistas de Florida a su favor, entre ellos los republicanos Matt Gaetz, Greg Steube y la estrella en ascenso Byron Donalds, uno de los dos únicos republicanos negros en la Cámara de Representantes.

Por el contrario, DeSantis sólo consiguió al representante Laurel Lee (R-Brandon).

Hasta ahora, 49 miembros de la Cámara —alrededor de una cuarta parte del total republicano— han anunciado su apoyo a Trump, según BallotPedia.org.

También en la columna de Trump hay 10 senadores estadounidenses, además de los gobernadores de Virginia Occidental y Carolina del Sur. Hasta ahora, DeSantis sigue sin obtener puntos en esas dos categorías.

Si DeSantis declara como se espera, estará librando un difícil, pero no imposible, juego de ponerse al día.

Poder predictivo

Estos conteos son importantes porque los apoyos «han demostrado ser bastante predictivos de quién gana las contiendas presidenciales», dicen los gurús políticos de FiveThirtyEight.com.

Desde 1972, los apoyos han superado a las encuestas políticas como predictores precisos de los candidatos presidenciales, dice el sitio, cuyo nombre deriva del total de votos del colegio electoral de EE. UU., 538.

Según los datos, Trump tiene actualmente un total de 72 apoyos, DeSantis tiene 5, y tanto el ex vicepresidente Mike Pence y como la exembajadora ante la ONU Nikki Haley tienen ambos 1.

Según el sistema de puntuación exclusivo de FiveThirtyEight, que da más peso a los apoyos destacados, Trump acumulaba 244 puntos de apoyo hasta el 1 de mayo. El siguiente aspirante más cercano, DeSantis, le seguía de lejos con sólo 13 puntos.

Aun así, DeSantis y los demás candidatos tienen muchos partidarios no comprometidos a los que cortejar. A finales de abril, el análisis de FiveThirtyEight sólo había asignado el 11% de todos los puntos de apoyo posibles.

Dado que Trump es el favorito en las encuestas nacionales, 2024 podrían ser «las primeras primarias presidenciales republicanas sin candidatos desde 2000» en las que el líder en las encuestas previas a Iowa y el líder en apoyos «sean el mismo», según FiveThirtyEight.

Esta vez, Trump está consiguiendo apoyos de alto nivel mucho antes que durante su primera campaña presidencial. No tuvo ningún apoyo del Congreso ni de los gobernadores hasta después de haber ganado tres primarias estatales, señaló FiveThirtyEight. Esos apoyos llegaron en febrero de 2016, solo nueve meses antes de las elecciones presidenciales; ahora faltan unos 18 meses para las elecciones de 2024.

Aparte de los apoyos y las encuestas, el dinero, el impulso y los mensajes pueden ser más importantes. Y tampoco puede descartarse el poder de ser un líder en el cargo, un factor en ambos bandos durante la campaña presidencial de 2024.

El ciclo de 2024 es «complicado»

El analista político no partidista Nathan Gonzales, editor de InsideElections.com, señala que el presidente Joe Biden ejerce el poder de estar en el cargo. Pero, en efecto, también lo tiene Trump.
Como bicampeón del Partido Republicano, Trump sigue siendo el líder de facto de los republicanos.

«Una de las complicaciones de este ciclo es que Biden y Trump están eclipsando la carrera de una forma que mantiene a mucha gente al margen», afirma Gonzales. «Normalmente, tendríamos muchos más candidatos en el lado republicano que ahora».

Hasta ahora, seis republicanos destacados han declarado su candidatura presidencial, pero pocos han obtenido el respaldo de la élite.

Por lo tanto, el campo de juego está desequilibrado, inclinado a favor de Biden en el lado demócrata y a favor de Trump en el lado republicano, dijo Gonzales.

Otro factor: Gonzales dijo que Trump también tiene una presencia «enorme». Su seriedad ha permanecido inquebrantable, incluso ante su acusación penal sin precedentes.

Y aunque los «nunca-Trump» francos intentan sabotearlo, Trump cuenta con el apoyo de hordas de «siempre-Trump», una base conservadora ferozmente leal que los candidatos del Partido Republicano no pueden permitirse alienar.

Es por eso que los políticos republicanos que son tibios con Trump o son secretamente anti-Trump pueden no querer salir y respaldar a un oponente suyo, dijo Gonzales. «No quieren enfadar a Trump y perder la oportunidad de ganar sus partidarios», dijo.

Algunos apoyos «en el punto de mira»

Carol Swain, exprofesora de política en las universidades de Vanderbilt y Princeton, está de acuerdo en que algunos patrocinadores se están demorando por esa razón.

«Los que apoyaron a DeSantis antes de tiempo, pueden encontrarse en el punto de mira y acosados por haberlo apoyado antes que a Donald Trump», dijo a The Epoch Times.

También cree que no es prudente apoyar antes de tiempo porque, con muchos meses por delante en una contienda política, las campañas de desprestigio y otros acontecimientos impredecibles pueden intervenir y dañar gravemente la reputación de algunos candidatos y sus posibilidades de victoria.

«He visto situaciones en las que la gente da su apoyo demasiado pronto», dice. «Han apoyado a un candidato a la Cámara de Representantes o al Senado, y se sabía poco de esa persona, y luego, más tarde, sobre todo hacia el final de la campaña, sale a la luz mucha información negativa».

Una vez que se ha respaldado a un candidato, «no es fácil deshacer el respaldo, decir: ‘Me he equivocado’… están como bloqueados», afirma Swain.

A pesar de ese riesgo, a los candidatos les encantan los apoyos tempranos. «Desde el punto de vista del candidato, si quieres mostrar impulso, quieres poder presentar una larga lista de apoyos de alto perfil», dijo.

Según Gonzales, los apoyos tempranos pueden dar a un candidato una ventaja decisiva.

«Algunos de los apoyos podrían ser un ‘efecto de tendencia popular’, en el que los políticos quieren estar en el bando ganador; quieren apoyar al candidato ganador y, como candidato, ganar impulso», dijo Gonzales. «Si parece que van a ganar, entonces probablemente ganen apoyos».

Debido a que DeSantis no está o ha estado en el cargo, «no puede darse el lujo de esperar demasiado» antes de anunciar su candidatura, dijo Gonzales. «Tiene que establecer un contraste con Trump, y tiene que construir su base de apoyo. Eso se puede hacer con mucho dinero, y el gobernador parece capaz de recaudar una cantidad considerable».

Swain señala que «el dinero suele seguir a los apoyos… si la gente que los apoya está comprometida hasta el punto de salir a recaudar dinero».

Por otro lado, Swain afirma que sus dos candidaturas fallidas a la alcaldía de Nashville (Tennessee) le enseñaron que a veces el dinero puede preceder a los apoyos.

«Me dijeron que los apoyos se pueden comprar», dijo. «Mi apoyo no se puede comprar, pero hay gente cuyo apoyo tiene un precio. Y nunca se sabe qué apoyos tienen precio».

Eso es la parte sucia de la política, dijo Swain. «Creo que hay un lado de la política que es lo suficientemente corrupto como para que, si te inclinas en esa dirección, puedas convertir, ya sabes, cualquier influencia en beneficio».

DeSantis «desleal»

Swain y Gonzales dijeron que creen que Trump cometió un error al atacar demasiado a DeSantis.

Trump ha tachado repetidamente a DeSantis de ingrato. Trump ha dicho que la campaña inicial de DeSantis para gobernador estaba muerta en 2018. Pero DeSantis supuestamente le rogó por un respaldo.

El respaldo de Trump ayudó a impulsar a DeSantis a la victoria, una afirmación que Trump ha repetido muchas veces en los últimos meses. Trump dice que sería desleal que DeSantis se convirtiera en su oponente político.

Ese mensaje parece funcionar bien con la base de Trump, dijo Gonzales.

Pero el respaldo de Trump no fue el todo para DeSantis. Durante su primera campaña para gobernador, DeSantis siguió apareciendo en Fox News, lo que lo benefició con esa audiencia televisiva de mayoría republicana, dijo Gonzales.

Y, a riesgo de generar controversia, Gonzales opinó que el reciente mensaje de Trump sobre este punto está un poco fuera de lugar.

«Trump llegó al poder con un mensaje populista, intentando ser la voz de la gente que sentía que ya no tenía voz. El mensaje actual de Trump tiene más que ver con él y la deslealtad y con quién le hace mal», dijo Gonzales. «Soy escéptico de que Trump regrese a la Casa Blanca con un mensaje de ‘Ron DeSantis me fue desleal’. Eso simplemente no se siente como un mensaje ganador de gran alcance».

Por otro lado, la demora de DeSantis en anunciar su candidatura puede estar perjudicándolo con los respaldos, dijo Gonzales, y agregó: «Necesita ser percibido como haciéndolo lo suficientemente bien en las encuestas para que la gente tome el riesgo que implica ponerse detrás de él».

Esperar y ver

Swain considera que su apoyo es «poca cosa» para cualquier candidato. Pero dijo que mucha gente en sus círculos ha vuelto a apoyar rápidamente a Trump. «No he apoyado a nadie», dijo. «Siento que es muy importante para mí permanecer como observadora, el mayor tiempo posible, como observadora independiente».

«Hay cosas que me gustan de Trump. Lo apoyé en 2016 y en 2020. Y hay muchas cosas que me gustan de DeSantis», dijo Swain.

Pero le da que pensar que «gran parte de la campaña del expresidente Trump hasta ahora solo se ha centrado en atacar a DeSantis en lugar de a Joe Biden».

El mensaje de Trump sí pareció alejarse de DeSantis durante su último discurso de campaña. Cuando el expresidente habló en New Hampshire el 27 de abril, atacó una y otra vez a Biden, que acababa de anunciar su candidatura a la reelección dos días antes. Con rumores de que DeSantis podría anunciar su candidatura en cualquier momento, ese momento podría influir en cómo Trump maneja su próximo discurso, fijado para el 13 de mayo en Des Moines, Iowa, un estado codiciado debido a sus asambleas primarias anticipadas.

Cambio de bando

Si DeSantis se anuncia pronto, como se presume, Gonzales duda que algún apoyo o simpatizante de Trump cambie inmediatamente de lealtad hacia el gobernador de Florida.

«Es posible que DeSantis esté manteniendo una serie de apoyos en privado que dará a conocer con un anuncio público de campaña», dijo. «Pero no esperaría que ese número inicial iguale los respaldos públicos que Trump ha cosechado hasta ahora».

Al mismo tiempo, dijo Gonzales, «podría haber gente esperando a que DeSantis entre oficialmente en la contienda» antes de prometer su apoyo.

Pero Gonzales también cree que «hay un gran número de posibles partidarios, políticos que son reacios al riesgo y no planean involucrarse hasta que haya un claro nominado».

Muchos políticos también están probablemente esperando «a que algunos de los casos legales de Trump se desarrollen más» antes de poner su influencia política en juego, dijo Gonzales.

Además de enfrentarse a una acusación penal en Nueva York, Trump está inmerso en una demanda civil por un presunto delito sexual. También se enfrenta a investigaciones por documentos clasificados incautados en su casa de Mar-a-Lago, en Florida, y por supuesta interferencia electoral en Georgia.

Trump se ha presentado a sí mismo como víctima de una cacería de brujas política, un mensaje que parece estar calando entre sus posibles votantes. Sus números en las encuestas han ido en aumento desde su imputación el 4 de abril.

Si Trump mantiene su popularidad en el partido, un político que respalde a DeSantis o a otro oponente «puede recibir algunas críticas de los votantes de las primarias por no apoyar a Trump», dijo Gonzales.

Posible impacto

Que los respaldos puedan ser auténticos puntos de inflexión depende en gran medida de la prominencia del endosante, el número de candidatos que compiten y otros factores, dijo Gonzales.

«Los apoyos no importan hasta que importan», afirma. «Por ejemplo, el respaldo de Trump sí importó en algunas elecciones clave al Senado».

En las elecciones al Senado de Ohio de 2022, «J.D. Vance probablemente iba a terminar tercero en las primarias; estaba abarrotado», dijo. «Pero Trump lo apoyó y eso impulsó a Vance».

Vance había sido crítico con Trump, pero dijo que había cambiado algunas de sus opiniones sobre el expresidente.

En el lado demócrata, el representante Jim Clyburn (D-S.C.) «claramente impulsó a Biden en un momento en que Biden necesitaba impulso» en las elecciones de 2020, dijo Gonzales.

«Son ejemplos de alto perfil de apoyos que importan en un mar de apoyos que no han tenido ningún impacto», dijo.

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