El presidente Joe Biden y la vicepresidenta Kamala Harris pronunciaron discursos en la recepción del 27 de febrero por el Mes de la Historia Negra, en los que trataron de posicionarse como defensores de la historia estadounidense en medio del furor nacional por la teoría crítica de la raza (TCR).
«Seamos claros: como nación, no construiremos un futuro mejor para Estados Unidos intentando borrar su pasado», dijo Harris.
«Este mes, y durante todo el año, debemos reconocer el arco completo de la historia de nuestra nación».
«No podemos limitarnos a aprender lo que queremos saber. Aprendemos lo que debemos saber. Tenemos que aprenderlo todo: lo bueno, lo malo, la verdad», dijo Biden.
Sus comentarios se producen mientras estadounidenses de todos los orígenes intercambian opiniones sobre la historia y la relevancia actual de la raza en el país.
Un informe interno del 23 de febrero, publicado en exclusiva para The Epoch Times, reveló que la Universidad de Florida ha ocultado el alcance de sus programas sobre diversidad, equidad e inclusión (DEI), que engloba la teoría crítica de la raza.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, emprendió acciones para limitar la TCR en las aulas, citando sus enseñanzas discriminatorias en el aula, a través de medidas que incluyen la «Ley Stop WOKE» de abril de 2022.
DeSantis organizó su propia recepción del Mes de la Historia Negra hace apenas unos días.
A finales de 2020, el expresidente Donald J. Trump firmó una orden ejecutiva que apuntaba a la ideología basada en la raza en los entrenamientos de diversidad en el lugar de trabajo.
Biden revirtió esa orden ejecutiva tan pronto como entró en la Casa Blanca.
Mientras tanto, el actor de Hollywood Bryan Cranston dijo en una entrevista en CNN el 26 de febrero que la teoría crítica de la raza es «imperativa» para las aulas.
Promueve la búsqueda de la «equidad» y las juezas negras
Durante décadas, los votantes negros estadounidenses han apoyado mayoritariamente a los demócratas.
Tanto Biden como Harris esbozaron algunos de los resultados de ese apoyo, entre otras cosas mediante su enfoque en la «equidad» en lugar de la «igualdad».
Aunque el término es vago, «equidad» se traduce generalmente en una mayor igualdad de resultados en lugar de igualdad de oportunidades.
Harris habló de la necesidad de abordar no la desigualdad, sino las «inequidades».
Biden, por su parte, dijo que los dos últimos años de su administración han marcado «avances para sentar las bases de una economía más fuerte, más resistente y más equitativa».
La equidad, añadió, está «en el centro de todo lo que hacemos».
Biden señaló que estaba utilizando su poder presidencial para dar más contratos federales a personas que no son blancas.
«Para 2025, vamos a aumentar al 15 por ciento de cada contrato que adjudique como presidente de Estados Unidos irá a parar a pequeñas empresas de negros y morenos», dijo.
«Para ofrecer una justicia igualitaria ante la ley, estamos construyendo un tribunal federal con jueces que reflejen a toda América, liderados por Ketanji Brown Jackson», dijo Biden.
Señaló que había prometido explícitamente hacer de una mujer negra su primera candidata a la Corte Suprema y hacer de una mujer negra su vicepresidenta.
El 3 de febrero, Jeremy Carl, investigador del Instituto Claremont, un centro de estudios conservador, posteó en Twitter un análisis en el que señalaba que Biden había designado a 22 mujeres negras y a 5 hombres blancos para la judicatura federal, cifras muy desproporcionadas en relación con sus porcentajes en la población total de EE. UU. y con las altas puntuaciones en el Examen de Admisión a la Facultad de Derecho (LSAT, por sus siglas en inglés).
«Los hombres blancos fueron el 27 [por ciento] de los votantes de Biden y probablemente la mayoría que proporcionó la financiación de Biden; sin embargo, están casi ausentes del liderazgo. NINGUNO de los veinticinco puestos del gabinete de Biden está ocupado por alguien de raza blanca protestante», señaló Carl en el mismo hilo.
«Hemos nombrado a más mujeres negras para los tribunales del circuito federal que todos los demás presidentes de la historia juntos», dijo Biden, atribuyendo al senador Dick Durbin (D-Ill.) su contribución a ese logro racial.
Biden elogió a su propio equipo como «la administración más diversa de la historia».
«El desempleo negro está cerca de mínimos históricos», dijo también.
El desempleo negro alcanzó un mínimo histórico bajo el mandato del expresidente Donald Trump.
En un intercambio de palabras con la multitud, Biden señaló al líder de la minoría en la Cámara de Representantes, Hakeem Jeffries (D-N.Y.), el primer líder negro del partido en la historia de Estados Unidos, así como a los presidentes de los «Nueve Divinos», una organización de fraternidades y hermandades históricamente negras.
«Puede que sea un chico blanco, pero no soy estúpido. Sé dónde está el poder», bromeó en referencia a los «Nueve Divinos».
«Tenemos que seguir adelante; aún no hemos terminado», dijo Biden, pidiendo a los miembros del público que «recordaran» a sus comunidades por qué deben seguir apoyando a su administración.
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