El 18 de diciembre, la Agencia de Protección del Medio Ambiente (EPA) aceptó dos peticiones de California para prohibir la venta de vehículos nuevos de gasolina en el estado de aquí a 2035, con el fin de aplicar normas más estrictas sobre emisiones de vehículos.
Las exenciones legales de la EPA permiten a California y a más de una docena de estados que siguen sus normas de emisiones de vehículos establecer reglas más estrictas que las adoptadas a principios de este año por el gobierno federal, que no exigía la venta de vehículos eléctricos (VE).
En su revisión, la EPA dijo que los opositores a las exenciones no demostraron suficientemente que la norma que exigía la venta de VE o una medida aparte sobre los vehículos pesados fuera incompatible con la Ley federal de Aire Limpio.
«California tiene desde hace tiempo autoridad para solicitar exenciones a la EPA para proteger a sus residentes de la peligrosa contaminación atmosférica procedente de fuentes móviles como automóviles y camiones», dijo en un comunicado el administrador de la EPA, Michael Regan. «Las acciones de hoy continúan con el compromiso de la EPA de asociarse con los estados para reducir las emisiones y actuar contra la amenaza del cambio climático».
También se espera que el presidente electo Donald Trump revierta las exenciones —que representan alguna de las políticas climáticas más radicales en la historia de Estados Unidos— después que asuma el cargo el próximo mes. Trump rescindió previamente la autoridad de emisiones de California en 2019, pero la EPA del presidente Joe Biden restauró la autoridad tres años después.
«California impuso las regulaciones automovilísticas más ridículas de todo el mundo, con mandatos para pasar a automóviles totalmente eléctricos», dijo Trump en la convención del Partido Republicano de California en septiembre.
En Michigan, un par de días antes, al hablar sobre los mandatos de los automóviles eléctricos, dijo que los eliminaría el primer día de su presidencia.
Se espera que el Estado Dorado se resista a los esfuerzos de Trump, sentando potencialmente las bases para una batalla legal en curso entre California y la nueva administración.
«California lidera desde hace tiempo la nación en políticas climáticas pioneras e innovación», dijo en un comunicado en octubre el gobernador de California, Gavin Newsom, un demócrata que sugirió que la prohibición marca el comienzo del fin del motor de combustión interna. «Esos esfuerzos continuarán en los próximos años».
La EPA, a través de la Ley de Aire Limpio de 1970, permite desde hace décadas a California promulgar normas de aire limpio más estrictas que las establecidas por el gobierno federal mediante una exención legal, ya que el estado tiene uno de los aires más contaminados del país. Según la ley federal, otros estados pueden adoptar normas similares a las de California en determinadas condiciones.
Esa exención puede utilizarse para combatir los contaminantes tóxicos causantes del smog, como el ozono, el dióxido de nitrógeno y el hollín, que pueden provocar enfermedades pulmonares y asma. Las autoridades estatales también utilizan la exención para combatir gases de efecto invernadero como el dióxido de carbono, que muchos climatólogos relacionan con los cambios climáticos. Los automóviles y otros medios de transporte que utilizan motores de combustión interna son una gran fuente de emisiones de dióxido de carbono en Estados Unidos, con más del 28 por ciento de todas las emisiones de gases de efecto invernadero, según la EPA.
Los grupos ecologistas, entre ellos Earthjustice, celebraron la concesión de las exenciones por parte de la EPA.
«Esto podría leerse como marcar una casilla burocrática, pero la aprobación de la EPA es un paso crítico para proteger nuestros pulmones de la contaminación y nuestros bolsillos de los gastos de los combustibles de combustión», dijo en un comunicado Paul Cort, director de la campaña Right To Zero de Earthjustice. «El cambio gradual en las ventas de automóviles a modelos de cero emisiones reducirá el smog y los costos de los hogares mientras crece la fuerza de trabajo de energía limpia de California».
Con la esperada revocación de Trump de la exención, la batalla legal subsiguiente entre su administración entrante y California es un preámbulo de movimientos similares que se espera que la nueva administración haga para revocar las políticas climáticas de la era Biden.
Trump calificó repetidamente el «cambio climático» como un «engaño» y prometió eliminar las políticas de Biden sobre el tema cuando asuma el cargo en enero. Trump revocó una versión de la era Obama de las normas de emisiones de automóviles de California durante su primer mandato y se comprometió a tratar de poner fin al crédito fiscal de 7500 dólares al consumidor para la compra de vehículos eléctricos que él y sus aliados apodaron «el mandato del vehículo eléctrico».
La Corte Suprema considerará el viernes si los grupos empresariales pueden impugnar legalmente el uso de California de la exención para limitar el dióxido de carbono.
Con información de The Associated Press.
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