La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA por sus siglas en inglés) anunció la prohibición del uso del herbicida DCPA, también conocido como Dacthal, en un intento de proteger la salud de los nonatos.
El DCPA está registrado en Estados Unidos para controlar la mala hierba en procesos agrícolas y no agrícolas. Se pulveriza principalmente en cultivos como coles de Bruselas, broccoli, cebollas y repollo, según la agencia.
El 6 de agosto, la EPA anunció la suspensión de emergencia de todos los registros del DCPA, prohibiendo el uso de este producto químico. La agencia toma esta medida porque «los bebés nonatos cuyas madres embarazadas están expuestas al DCPA, a veces incluso sin saber que se expusieron, podrían experimentar cambios en los niveles de hormonas tiroideas del feto».
Estos cambios «suelen estar relacionados con un bajo peso al nacer, un desarrollo cerebral deficiente, una disminución del cociente intelectual y un deterioro de las capacidades motoras en etapas posteriores de la vida, algunos de los cuales pueden ser irreversibles», afirma la agencia.
La EPA calcula que algunas mujeres embarazadas que manipulan productos con DCPA podrían acabar expuestas a niveles de herbicida hasta 20 veces superiores a los que la agencia considera seguros para los nonatos.
Otra preocupación clave es el riesgo que corren los fetos cuando las mujeres embarazadas entran o trabajan en zonas donde ya se aplicó DCPA, incluso durante el deshierbe, el trasplante y la cosecha de los cultivos.
En la actualidad, la normativa dicta que estos trabajos sólo deben comenzar 12 horas después de la aplicación del DCPA. Sin embargo, la EPA descubrió que el DCPA puede permanecer en un campo tratado a niveles inseguros durante 25 días o más.
Un tercer motivo de preocupación es que cuando se rocían pesticidas como el DCPA, pueden transferirse a lugares cercanos y poner en peligro a las mujeres que viven en esas regiones.
«El DCPA es tan peligroso que debe retirarse inmediatamente del mercado», declaró Michal Freedhoff, administrador adjunto de la Oficina de Seguridad Química y Prevención de la Contaminación.
«El trabajo de la EPA es proteger a las personas de la exposición a sustancias químicas peligrosas», declaró. «Por eso, por primera vez en casi 40 años, la EPA está utilizando su autoridad de suspensión de emergencia para detener el uso de un pesticida».
Reacción de las partes interesadas
En junio de 2023, la EPA publicó un borrador de evaluación de riesgos ocupacionales y residenciales sobre el DCPA y aceptó comentarios públicos sobre el documento.
En su comentario, el Centro de Gestión de Plagas de Arizona advirtió que los costos del control de las malas hierbas para los agricultores aumentarían «sin duda» si se perdían los registros para el DCPA.
Los agricultores tendrían que asumir el costo de las aplicaciones adicionales de herbicidas y contratar a más personas para el deshierbe manual, dijo. Además, podría haber pérdidas en forma de rendimientos potenciales sin aplicar el producto químico.
«Los costos del deshierbe manual aumentaron considerablemente en los últimos años. Los costos pueden oscilar entre 50 y 100 dólares por acre. Además, la región está experimentando escasez de mano de obra en los últimos años, al igual que otras zonas del país», señaló el centro.
El Grupo de Trabajo Medioambiental (EWG) acogió con satisfacción la prohibición de DCPA y dijo que era “demasiado necesaria”.
«Durante años, el EWG y otros defensores de la salud pública advertieron sobre los graves riesgos que el herbicida supone para los trabajadores agrícolas, las personas embarazadas y otras poblaciones vulnerables», dijo el toxicólogo principal del EWG, Alexis Temkin, en un comunicado de prensa.
En 1995, la EPA clasificó el DCPA como «posible carcinógeno» después de que un estudio demostrara que el producto químico causaba tumores de tiroides en los animales. El estudio fue realizado por AMVAC, el único fabricante de DCPA de Estados Unidos.
En 2013, la EPA pidió a AMVAC que presentara un informe adicional que mostrara el efecto del DCPA en la tiroides fetal y otra información clave. La empresa presentó sus conclusiones en 2022, que «mostraban que incluso dosis bajas de exposición al DCPA pueden dañar al feto en desarrollo», declaró el EWG.
AMVAC defiende el mantenimiento del DCPA como herramienta herbicida en la producción de verduras especiales. En los comentarios presentados a la EPA el año pasado, la empresa dijo que el pesticida proporcionaba «beneficios únicos a los productores de coles y cebolla» en todo el país.
La empresa estimaba que los beneficios económicos anuales del herbicida eran de al menos 50 millones de dólares. Afirmó que «no existen herbicidas alternativos adecuados» al DCPA para algunos cultivos.
En mayo, nueve organizaciones que representan a trabajadores agrícolas, científicos y funcionarios de salud pública solicitaron la prohibición del DCPA, según un comunicado de prensa del Centro para la Seguridad Alimentaria.
«Las mujeres y niñas campesinas soportan cada día la pesada y peligrosa carga de la exposición a los pesticidas. No sólo son las principales cuidadoras de sus familias, sino que también garantizan que las familias de todo el país tengan comida en sus mesas», dijo en el comunicado de prensa Mily Treviño-Sauceda, directora ejecutiva de Alianza Nacional de Campesinas, un grupo que representa a las trabajadoras agrícolas.
The Epoch Times se puso en contacto con la empresa matriz de AMVAC, American Vanguard, para solicitar sus comentarios.
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo clic aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
