El expresidente Donald Trump ha mantenido en secreto durante meses su elección quién será su candidato a la vicepresidencia. Aunque cuatro posibles finalistas han encabezado una larga lista, los analistas siguen manteniendo la posibilidad de una elección sorpresa.
En enero, el expresidente dijo que había tomado una decisión sobre su compañero de fórmula. En febrero, reveló una lista de preseleccionados, que desde entonces ha evolucionado.
Al menos quedan cuatro finalistas. Se trata de los senadores Marco Rubio, de Florida, Tim Scott, de Carolina del Sur, y J.D. Vance, de Ohio, junto con el gobernador de Dakota del Norte, Doug Burgum. El expresidente reconoció esos nombres en entrevistas con personalidades de Fox News el 8 y el 10 de julio.
Sin embargo, es posible que el 45º presidente elija a un candidato menos conocido para vicepresidente, como el gobernador de Virginia Glenn Youngkin o el senador Bill Hagerty (R-Tenn.), según dijo a The Epoch Times Doug Kaplan, presidente de Kaplan Strategies, con sede en Florida.
Ahora, días antes de que comience la convención de nominación del Partido Republicano, el calendario para la decisión del expresidente sobre la vicepresidencia se está estrechando.
Los responsables políticos consideran esta elección más importante de lo habitual, ya que este candidato en concreto respaldará a un aspirante de 78 años que se enfrenta a una condena penal y a otros muchos casos criminales.
Además de estar listo para servir si el candidato presidencial fuera incapaz de cumplir con sus deberes por cualquier razón, la elección del VP podría influir en algunos votantes en función de su geografía, rasgos personales o calificaciones.
La elección del vicepresidente de Trump también ayudará a moldear una posible segunda presidencia y trazar el futuro del Partido Republicano, dijo el Sr. Kaplan.
«Quienquiera que elija tendrá una gran oportunidad en la nominación la próxima vez», dijo el Sr. Kaplan. «Pero el vicepresidente realmente solo tiene tanto poder como el presidente le da».
Anticipación
El expresidente Trump es el único que tiene poder discrecional sobre a quién elegirá, así como sobre cómo y cuándo revelará esa decisión. Su equipo de campaña ha dicho que incluso podría decidir revelar el candidato a vicepresidente a través de un posteo en su plataforma Truth Social.
El anuncio podría producirse justo antes o durante la Convención Nacional Republicana de Milwaukee, que se celebrará entre el 15 y el 18 de julio. Para que los delegados del Partido Republicano elijan oficialmente a sus candidatos a la presidencia y la vicepresidencia, es necesario nombrar a un compañero de fórmula.
Existe la posibilidad de que el expresidente revele su elección en su próximo mitin, previsto para el 13 de julio en Butler, Pensilvania, un estado disputado.
Justo antes de su último mitin, el 9 de julio en Doral (Florida), su campaña envió un mensaje de texto preguntando a sus seguidores: «¿Anunciaré a mi vicepresidente en 90 minutos?».
Durante su discurso, el expresidente hizo repetidas referencias a Rubio. Refiriéndose a los grupos de equipos de noticias que cubrían el evento de Florida, el expresidente dijo: «Creo que probablemente piensan que voy a anunciar que Marco va a ser vicepresidente porque eso tiene mucha cobertura de la prensa». Pero luego su discurso continuó —y concluyó— sin ninguna revelación de ese tipo.
El expresidente Trump dijo a Brian Kilmeade de Fox News durante un programa de radio el 10 de julio que le «encantaría» hacer su anuncio de vicepresidente «a la antigua usanza», en la Convención Nacional Republicana.
Pero en las últimas décadas, los candidatos presidenciales han nombrado a sus compañeros de fórmula antes de la convención de nominación de cada partido.
El momento del anuncio debería ser políticamente estratégico, dijo Kaplan. En su opinión, es prudente que el ex presidente no anuncie su candidatura a la vicepresidencia mientras la atención mediática se centra en su oponente demócrata, el presidente Joe Biden.
«Si tus enemigos están luchando e implosionando, los dejas hacer y no haces nada. Eso es, creo, lo que el presidente Trump está haciendo en este momento», dijo el Sr. Kaplan.
Cree que el expresidente probablemente ya habría hecho su anuncio de vicepresidente si el presidente Biden no se estuviera enfrentando al escrutinio de los medios por su desempeño en el primer debate presidencial.
Tras el debate, el presidente Biden y su campaña rechazaron los llamamientos de un puñado de demócratas electos para que abandonara la carrera.
Sopesar a los contendientes
Entre los cuatro finalistas a vicepresidente de Trump, el gobernador de Dakota del Norte, Doug Burgum, aparece cada vez más como el aspirante número 1, según Kaplan.
Burgum, de 67 años, procede de uno de los estados menos poblados del país. Dakota del Norte tiene menos de un millón de habitantes. La falta de reconocimiento de su nombre dificultó su carrera presidencial, que terminó en diciembre de 2023.
Desde entonces, su presencia ha sido habitual en mítines y actos de recaudación de fondos de Trump. En un discurso en Nueva Jersey, el expresidente Trump dijo que duda que alguien en la nación sepa más sobre el sector energético que el Sr. Burgum.
Es un multimillonario hecho a sí mismo, y su historia de éxito en Estados Unidos le da una afinidad con el expresidente. Ese ascenso al éxito podría atraer a los votantes, según declaró a The Epoch Times Nathaniel Gavronsky, influencer político de Iowa.
Cada uno de los tres senadores que compiten por la vicepresidencia tiene una historia de fondo convincente.
Rubio, de 53 años, es hijo de inmigrantes cubanos, una característica que podría atraer a más votantes latinos a una candidatura Trump-Rubio.
Scott, de 58 años, que es negro y podría atraer a ese bloque de votantes, ha señalado que su abuelo fue «obligado a abandonar la escuela en tercer grado y nunca aprendió a leer o escribir», pero Scott llegó a ser congresista. «Nuestra familia pasó del algodón al Congreso en una sola vida», dijo en la Convención Nacional Republicana de 2020.
El Sr. Vance, de 39 años, ascendió desde las raíces de los Apalaches y obtuvo una educación de la Ivy League, una historia dramática relatada en un libro de memorias superventas que se convirtió en una película de Netflix en 2020, «Hillbilly Elegy». Ganó sus elecciones de 2022 en Ohio gracias al respaldo del expresidente.
Ese respaldo fue controvertido porque el Sr. Vance había criticado candidato Trump en 2016. Pero el Sr. Vance dijo que llegó a respetar la presidencia de Trump. «Nunca se doblegó ante la mafia», lo que lo convierte en «el mejor presidente de mi vida», dijo Vance en el momento del apoyo de 2022.
También juega a favor de Vance su amistad con el hijo del expresidente, Donald Trump Jr. El hijo del expresidente dice que también tiene una buena relación con Rubio y que le gustan varios de los aspirantes a la vicepresidencia.
Durante el episodio del 8 de julio de su podcast «Triggered», Donald Trump Jr. dijo que la experiencia del Sr. Rubio como senador durante tres mandatos también conlleva la percepción de que podría estar demasiado ligado al «establishment».
Por el contrario, Vance solo lleva dos años como senador, lo que plantea la cuestión de si está preparado para liderar.
Kaplan señala que los reportes de los medios parecen ignorar un factor importante: Si el presidente Trump gana la reelección, cualquiera de los tres senadores que ocupen el puesto de vicepresidente se convertiría en el «heredero aparente, y se presentan a la presidencia para el segundo año» de su segunda presidencia.
Eso podría hacer que el expresidente Trump pareciera aún más un «pato cojo» como presidente que no podría servir un mandato adicional, dijo el Sr. Kaplan. Duda que eso ocurra con el Sr. Burgum, por lo que es «la elección más segura», dijo el Sr. Kaplan.
Jeanette Hoffman, consultora política originaria de Nueva Jersey, coincide con la valoración de Kaplan sobre los supuestos finalistas.
Al igual que el ex vicepresidente Mike Pence, el Sr. Burgum es «más moderado» y es poco probable que haga sombra al ex presidente, dijo. No ocurriría lo mismo con «personalidades más fuertes como J.D. Vance o Marco Rubio».
«El gobernador Burgum sería compatible para el presidente Trump en la candidatura a vicepresidente tanto en estilo como en sustancia», dijo a The Epoch Times. «Trump y Burgum son afines en sus exitosos antecedentes empresariales, sin embargo, cuando se trata de gobernar y hacer política, Burgum es más un caballo de batalla, mientras que Trump es un caballo de espectáculo».
Sea cual sea el candidato que el expresidente elija, hay un factor esencial, según Kaplan. Tiene que elegir a alguien «que no perjudique» a la candidatura.
Con información de Reuters.
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