Escuela cristiana de Florida denuncia haber recibido amenazas de muerte por su política LGBT

PUNTA GORDA, Florida –Una escuela cristiana de Florida ha recibido amenazas de muerte por una política establecida hace 48 años que prohíbe las relaciones sexuales fuera del matrimonio y se refiere a los estudiantes por el género que figura en su certificado de nacimiento.

Barry McKeen, director de la escuela privada Grace Christian School en Valrico, situada a 16 millas al este de Tampa, dijo a los medios de comunicación el 22 de agosto que ha recibido amenazas de muerte que le han obligado a contratar personal de seguridad como una precaución adicional, después de un correo electrónico enviado a los padres recordándoles una política relativa a la orientación sexual y el sexo fuera del matrimonio. El correo electrónico decía que se pediría a los estudiantes LGBT que abandonaran la escuela, ya que esto va en contra de las enseñanzas de la Biblia.

El correo electrónico decía, en parte, «Creemos que cualquier forma de homosexualidad, lesbianismo, bisexualidad, identidad/estilo de vida transgénero, autoidentificación, zoofilia, incesto, fornicación, adulterio y pornografía son pecaminosos a los ojos de Dios y de la iglesia —aunque esto es celebrado y alentado por el país, es condenado por Dios. Y en esta escuela, vamos a seguir a Dios en lugar de al hombre».

Actualmente, McKeen informa que ningún estudiante ha sido «expulsado de la escuela por su orientación sexual».

Una madre, que pidió permanecer en el anonimato, dijo a un canal de televisión de Tampa que sacó a su hija de la escuela porque «se identificaba como lesbiana» y temía por su «bienestar». Continuó diciendo que los maestros de la escuela son «cariñosos», pero que «respetaba» la opinión de la escuela.

Sin embargo, McKeen dijo que «solo responde ante Dios» y no ante los bloggers o los TikTokers. Algunas personas que llamaron a la escuela amenazaron con «quemar su casa», mientras que otras dijeron que «matarían a su familia», dijo.

«No vamos a cambiar porque Dios no va a cambiar», dijo McKeen en un mensaje de Facebook. «No vamos a estar llenos de odio, pero no vamos a dar marcha atrás en esta política».

El director de la escuela expresó su conmoción por el hecho de que la política haya acaparado la atención de los medios de comunicación nacionales y dijo que la indignación que ha presenciado por la política es «indicativa de que Estados Unidos se está alejando de Dios y del cristianismo».

«Me ha sorprendido que esto se haya convertido en lo que es: ¿te sorprende que una escuela cristiana tenga esta política?», dijo en su posteo en internet.

McKeen dijo que sería hipócrita de su parte creer y actuar de otra manera a las enseñanzas de la «Palabra de Dios».

«Si me retractara de algo así, estaría abandonando lo que Dios ha dicho que es la verdad. Yo… como que me devano los sesos para, como, ‘¿Cómo es que esto es difícil de entender para la gente?», continuó en su posteo.

«Esta es una de las muchas razones por las que tenemos una escuela cristiana, y no vamos a abandonar esta política. Dios ha hablado sobre estos temas».

McKeen señaló que una política como la que la escuela tiene actualmente no es nueva y es común en la mayoría de las escuelas cristianas y se pregunta por qué Grace Christian School ha sido «destacada».

En una declaración escrita, McKeen dijo que estaba de acuerdo con la posición de la iglesia de que la homosexualidad es «un pecado, y que cualquier pecado te condenará al infierno, y por eso necesitamos un salvador».

«Creemos que Dios creó a la humanidad a su imagen y semejanza: varón (hombre) y mujer (mujer), sexualmente diferentes pero con igual dignidad», decía la declaración de McKeen.

«Por lo tanto, el sexo biológico de uno debe ser afirmado, y … Se hará referencia a los estudiantes en la escuela por el género que aparece en su certificado de nacimiento y se referirá a su nombre de la misma manera».

Grace Christian School fue la visión de Bob Gustafson, originario de Miami, un jugador de béisbol profesional reclutado por los Cardenales de San Luis en 1965. Durante su breve paso por el béisbol, sufrió una lesión que puso fin a su carrera cuando fue golpeado por debajo del ojo izquierdo con una pelota.

Gustafson dijo en sus memorias que mientras estaba en la sala de emergencias con su ojo «tan grande como una pelota de softball», un pasaje de las escrituras pasó por su cabeza: «Predica la palabra; insiste a tiempo y fuera de tiempo…».

Después de graduarse en el seminario en 1970, Gustafson y su esposa, junto con una pequeña congregación, formaron la iglesia Grace Community Church, que se reunía en el interior de un edificio bancario. En 1974, tras una «respuesta a las oraciones», Grace Christian School se hizo realidad.

McKeen asistió a Grace Christian School y en 1991 se casó con la hija mayor de Gustafson. Se convirtió en el pastor principal y director de la escuela tras el fallecimiento de Gustafson en 2016.

McKeen declaró que, aunque ha habido indignación por parte de algunos, la comunidad escolar, así como «gente de todo el país», han enviado su apoyo.

«Nuestros padres nos apoyan mucho. Muchos de ellos vinieron a la iglesia esta mañana (21 de agosto)», dijo en su posteo. «Van a otras iglesias normalmente, pero estuvieron aquí esta mañana (…) Y estamos viendo un tremendo apoyo de todo el país, a pesar de que hemos estado recibiendo un montón de llamadas y correos de odio».

McKeen señaló que la escuela tiene una lista de espera de más de 100 estudiantes.

«No somos un grupo de personas llenas de odio. No odiamos a los estudiantes que son de una persuasión particular», dijo en el video de Facebook.

«Tal vez Dios nos ha elegido para este momento en particular para animar a las personas de ideas afines a que, ‘Hey, hay cosas que vale la pena defender, y vamos a hacer eso'», agregó.

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