La esposa del activista cubano José Daniel Ferrer dijo que la vida del opositor corre peligro tras más de 40 días encarcelado.
Ferrer fue arrestado por el régimen comunista de Cuba el 11 de julio mientras se dirigía a las protestas masivas en la isla. Este lunes cumplió 43 días preso, sin embargo, su familia aún no conoce su paradero, ya que el régimen cubano les niega toda información.
La semana pasada, el régimen reactivó la condena previa de Ferrer, teniendo que pasar 4 años y 14 días en prisión.
Nelva Ortega, esposa de Ferrer, dijo a NTD en Español el fin de semana, que tras más de 40 días el régimen no les había informado del paradero del activista aunque al final les informaron que se encontraba en la prisión de Malverde pero no lo pueden corroborar, incluso le han negado comunicación con él vía telefónica. Por lo que cree que la vida de Ferrer puede estar en peligro, ya que el régimen cubano no quiere una figura pública que convoque a la gente a salir a las calles.
«No solo nos negaron el hecho de verle sino que ahora optaron por la excusa de que él es el que no quiere realizar alguna llamada telefónica», dijo Nelva Ortega sobre la negativa de comunicación con el activista, y agregó que su esposo siempre los ha orientado de que cuando suceda ese tipo de situaciones él siempre querría hablar con su familia, «[Ferrer] siempre va a querer denunciar todo lo que está pasando».
Nelva Ortega dijo que los oficiales le dijeron que supuestamente por el COVID-19 no pueden ver a sus familiares presos y la única vía de comunicación que tienen es vía telefónica, sin embargo, le indican que él no quiere hablar con nadie por lo que ella cree «que está pasando algo muy grave».
“Él me dijo antes de salir, que estaba presentando fuerte dolor abdominal, estaba presentando vómitos, incluso con sangre, una úlcera sangrante, por una gastritis crónica que él tiene por las largas huelgas de hambre desde el 2003 con la primavera negra» agregó.
«Él me dijo (…) que si le desparecían por su crisis o por el haber salido a las manifestaciones a las cuales no llegó nunca (…) él iba a estar en huelga de hambre, en este momento puede ser que esté en huelga de hambre (…) que esté hospitalizado, muy grave de salud y su vida está corriendo grave peligro, puede ser que esté también golpeado», dijo Nelva Ortega, agregado que tal vez esas sean las causas por la que no permitan que su familia lo vea.
La sentencia publicada por su familia la semana pasada e impuesta a Ferrer por el tribunal señaló que es acusado por el presunto delito de desórdenes públicos y que la decisión de la revocación del beneficio de prisión domiciliaria se debe presuntamente por incumplir los requisitos de las sanciones impuestas y tener comportamientos desafiantes a la autoridad.
“Ahora en este momento tener a una figura pública que tenga poder de convocatoria y que saque a todo el mundo a las calles, siguen saliendo las personas a las calles que conste, pero que salgan a las calles así en masividad, ellos no quieren que pase en este momento”, agregó la esposa de Ferrer.
Ferrer actualmente se encuentra dentro las 853 personas detenidas de las cuales el 80 % son hombres tras las protestas históricas del 11 de julio contra el régimen, informó la organización de derechos humanos Cubalex.
El viernes pasado, Amnistía Internacional declaró a Ferrer como preso de conciencia dentro de una lista de 6 personas.
«Amnistía Internacional considera que la ocultación de su paradero implica que está sometido a desaparición forzada con arreglo al artículo 2 de la Convención para la Protección de Todas las Personas contra las Desapariciones Forzadas, en la que Cuba es Estado Parte», dice el comunicado de AI.
Con información de NTD en Español.
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