Según los analistas de política de China, el régimen comunista chino está listo y dispuesto a utilizar su cuasi monopolio, en elementos de tierras raras (REE), como una carta de triunfo en cualquier guerra comercial con Estados Unidos.
Un informe publicado esta semana por la consultora estratégica independiente, Horizon Advisory, indica que China está actuando para aprovechar la crisis del virus PCCh (Partido Comunista Chino) con el fin de tomar el control de los mercados estratégicos. Además, la fusión de Beijing de sus esferas militar y civil, combinada con su cuasi monopolio en tierras raras, podría hacer de este mercado el talón de Aquiles de Estados Unidos.
Según la académica de China y cofundadora de Horizon Advisory, Emily de La Bruyère, Beijing tiene como objetivo hacer que Estados Unidos dependa directa e indirectamente de China para minerales críticos y REE.
Los REE son metales difíciles de recuperar, con propiedades únicas, que los convierten en ingredientes esenciales para la producción de baterías, electroimanes, sistemas de armas, visores de visión nocturna y otros productos de alta tecnología de última generación. Según el Departamento del Interior, Estados Unidos depende en gran medida de las importaciones de estos productos minerales críticos, y, en particular, de las importaciones procedentes de China.
«La RPC (República Popular China) se ha centrado en las tierras raras desde que existe», dijo De La Bruyère a The Epoch Times en un comunicado. “Las fuentes chinas tratan explícitamente las tierras raras como herramientas de poder —y coerción— en el sistema industrial globalizado de hoy. Esta orientación se basa en la estrategia de fusión civil-militar de China: Beijing arma la integración en sistemas globales abiertos y cooperativos para fines ofensivos. Estados Unidos, sus aliados y sus socios necesitan reconocerlo conjuntamente y responder, a escala».
Apalancamiento de tierras raras de China
Según un informe anterior del equipo de Horizon sobre los esfuerzos del PCCh para subvertir la inversión de recuperación de Estados Unidos, el régimen chino ve la crisis del virus PCCh como «una oportunidad; una oportunidad para expandir su posición en los mercados de EE.UU., las cadenas de suministro y la infraestructura crítica». En tiempos de crisis económica, dice el informe, el régimen comunista apunta a mercados y activos que considera vulnerables. «Los objetivos son fomentar la dependencia, desviar la investigación y el desarrollo de EE.UU. y cooptar los mercados».
El nuevo informe de los analistas cita a los investigadores chinos Gao Fengping y otros en 2019 diciendo que «en medio del acalorado conflicto comercial entre China y Estados Unidos, China no descartará el uso de exportaciones de tierras raras como palanca para hacer frente a la situación».
Según el informe, Yang Danhui, de la Academia de Ciencias Sociales de China, dijo en 2018 que la estrategia de tierras raras de China es capturar «cadenas de suministro internacionales para recursos minerales raros y dominar gradualmente el poder líder de las normas de comercio de tierras raras y los precios internacionales».
Según un fallo de la OMC de 2014, el régimen comunista de China se vio obligado a abolir sus cuotas para las exportaciones de tierras raras. Sin embargo, el informe Horizon Advisory explica que, si bien China se adhirió al fallo, lo eludió al reemplazar las cuotas con un estricto control estatal de la industria minera y procesadora de tierras raras del país, lo que permitió al régimen un control ininterrumpido sobre la producción y el comercio.
Parte del sistema de control involucraba «límites de producción anuales estrictamente vigilados», indica el informe. A partir de 2015, China decidió reorganizar toda su industria de tierras raras para alinearse con las directrices del partido comunista sobre «Profundizar la reforma de las empresas estatales», lo que implicó aumentar el control del régimen sobre los recursos estratégicos de China.
El viejo libro de jugadas y los nuevos objetivos
Según el informe de Horizon Advisory de junio, China está tratando de replicar estrategias que perfeccionó durante la crisis económica de 2008, donde trabajó para extender su presencia en las cadenas de suministro, los sistemas de fabricación y de infraestructura de Estados Unidos. Las bajas notables de estas medidas incluyeron a productores estadounidenses de paneles solares y fabricantes de baterías de iones de litio. Las compañías que desde entonces han caído en manos de empresas chinas incluyen GE Appliances, que fue adquirida por la multinacional china Haier, en 2016.
El informe establece que «antes de 2008, un trabajador estadounidense podía comprar un refrigerador GE fabricado por una empresa estadounidense cuyas ganancias se reinvirtieron en la economía estadounidense. Hoy en día, casi cualquier aparato en el mercado financia un conglomerado chino, ya sea que la etiqueta del producto indique lo mismo o no».
Según el informe, «desde 2018, Beijing ha estado preparando una segunda ola de su estrategia industrial».
Dependencia de EE.UU a las tierras raras.
En una audiencia reciente del Comité del Senado de Estados Unidos sobre Energía y Recursos Naturales acerca de los impactos del virus PCCh en las cadenas de suministro de minerales, la Senadora Lisa Murkowski (R-Alaska) citó datos del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) que muestran que, en 2019, Estados Unidos importó el 50 por ciento de los requerimientos nacionales para 46 minerales diferentes, y el 100 por ciento de 17 de ellos, incluidos varios elementos de tierras raras.
«Más allá de los números, eso significa que estamos poniendo nuestro destino en la capacidad y disposición de los demás para vendernos», dijo Murkowski. «Y estamos obligando a los fabricantes estadounidenses a desarrollar complejas cadenas de suministro globales que, a veces, les hacen darse cuenta de que sería más barato y más fácil hacerlo desde otros lugares».
En la misma audiencia, el especialista en minerales del USGS, Dr. Nedal T. Nassar, dijo que la pandemia del virus PCCh destacó los riesgos a los que están expuestos los sistemas de la cadena de suministro en todo el mundo. También habló de las anteriores amenazas chinas para cortar las exportaciones de elementos de tierras raras.
«Las amenazas de China a cortar el suministro de tierras raras en 2010 personificaron estos riesgos para los países importadores que tenían alternativas limitadas debido al cuasi monopolio de China de la cadena de suministro de tierras raras», dijo.
El miembro principal del Centro de Energía Global del Consejo Atlántico, Joe Bryan, dijo en su testimonio que, en la carrera por la inversión en la cadena de suministro, «Estados Unidos se está rezagando».
El Dr. Thomas J. Duesterberg, investigador principal del Instituto Hudson, dijo en la audiencia que el liderazgo de Estados Unidos en inteligencia artificial, vehículos autónomos e Internet de las cosas está siendo desafiado por la competencia adversaria.
«El creciente control de China sobre muchos materiales básicos», dijo Duesterberg, «y su historia de usar ese control como palanca para sus propios objetivos económicos y políticos hace que esto sea motivo de preocupación para la continua fortaleza de la economía manufacturera de Estados Unidos».
China se mueve en África
Según Horizon Advisory, Beijing no está satisfecho con el desarrollo y el control de su industria de tierras raras en el país. El régimen también busca expandir su influencia y presencia de tierras raras a nivel mundial.
Su informe cita un informe de investigación de 2016 sobre la Iniciativa de La Franja y la Ruta que establece que: «Para China, el mayor productor mundial de tierras raras, el descubrimiento de las principales minas de tierras raras fuera de China, sin duda, tendrá un profundo impacto en el desarrollo futuro de la industria de tierras raras. Simplemente confiar en la minería doméstica de tierras raras de China no es realista. Es fundamental que las empresas chinas salgan y busquen recursos de tierras raras».
En su testimonio del 8 de mayo ante la Comisión de Revisión Económica y de Seguridad de Estados Unidos y China sobre “Los objetivos estratégicos de China en África”, Emily de La Bruyère dijo que el régimen chino busca obtener acceso y moldear los mercados y recursos extranjeros mientras, al mismo tiempo, protege los suyos. Dichas medidas están otorgando al PCCh una posición de ventaja duradera y apalancamiento sobre otros participantes del mercado.
“En el continente africano”, dijo, “esto significa que Beijing trabaja no solo para obtener, sino también para controlar las reservas de recursos, los mercados, las cadenas de suministro industrial y los estándares. Beijing quiere el control sobre los mercados, recursos y estándares de África para influir sobre el mundo».
Según De La Bruyère, «China se extralimita regularmente en sus relaciones con África y hace caso omiso de las normas internacionales, a medida que amplía sus intereses comerciales», incluso en términos de derechos humanos y corrupción. Instó a la Comisión a que Estados Unidos debe definir tanto sus objetivos políticos como su posición en relación con China, y que debe planear competir con el PCCh.
«La crisis de COVID-19 debería acelerar el fortalecimiento del enfoque estratégico de Estados Unidos hacia China», dijo.
Apoye nuestro periodismo independiente donando un «café» para el equipo.
A continuación
El Método del PCCh: El plan mundial del Partido Comunista Chino –el coronavirus es la última alarma
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.