Estados Unidos anunció este lunes su intención de participar en el «registro de daños» perpetrados por Rusia en la invasión de Ucrania que tienen previsto establecer esta semana los jefes de Estado y de Gobierno del Consejo de Europa en una cumbre en Reikiavik.
El Gobierno estadounidense estará representado en la reunión por la embajadora ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, y se unirá a ese registro como «miembro fundador asociado» y aportará fondos.
«Estados Unidos se ha comprometido a que Rusia rinda cuentas por su guerra de agresión contra Ucrania», dijo Thomas-Greenfield en un comunicado. «Establecer un registro de daños para documentar reclamaciones de daño de la brutal guerra de Rusia es un paso clave en este esfuerzo», añadió.
Estados Unidos recuerda que en noviembre del año pasado la Asamblea General de la ONU ya recomendó la creación de un registro internacional de los daños de la guerra y celebra que el Consejo de Europa haya decidido ponerlo en marcha.
El 24 de febrero pasado, coincidiendo con el primer aniversario de la agresión a gran escala rusa, el comité de ministros del Consejo de Europa adoptó una decisión en la que se subrayaba «la necesidad urgente de crear un registro para anotar y documentar las pruebas y reclamaciones por daños, pérdidas o lesiones como resultado de la guerra» iniciada por Moscú.
Posteriormente, las autoridades de los Países Bajos expresaron su voluntad de albergar ese registro en La Haya, ciudad que también acoge a la Corte Penal Internacional.
La decisión definitiva sobre ese registro la deben adoptar los líderes de los 46 Estados miembros del Consejo de Europa este martes y miércoles en la cumbre de Reikiavik, la cuarta que se celebra desde su creación en 1949, tras la Segunda Guerra Mundial.
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