Las esperanzas de todo el mundo de que se redujera el número de muertos en Kentucky se hicieron realidad el domingo por la noche, cuando la fábrica de velas -donde habían 110 personas en el momento del desastre- anunció que había podido localizar a 90 supervivientes.
El personal de recursos humanos de la empresa trabajó durante la noche del sábado y la madrugada del domingo para llamar a los números de contacto de emergencia de los desaparecidos a medida que se restablecían las redes eléctricas y telefónicas.
Lamentablemente, también se confirmó la muerte de ocho empleados, mientras que otros ocho siguen desaparecidos, según el portavoz de la empresa, Bob Ferguson.
“Muchos de los empleados se reunieron en el refugio contra tornados y después de que pasó la tormenta, dejaron la planta y se fueron a sus hogares”, dijo Ferguson. “Con el corte de luz y sin teléfono fijo, inicialmente era difícil llegar a ellos. Esperamos encontrar a más de esos ocho desaparecidos cuando intentemos localizarlos en sus domicilios».
Los trabajadores dijeron que les habían dicho que se apiñaran en un pasillo central, la parte más fuerte del edificio, cuando se acercaba la tormenta. Algunos ya se habían ido más temprano en la noche tras una sirena de advertencia.
Aunque las autoridades estatales aún no han confirmado oficialmente el informe, el anuncio significa que probablemente habrá un fuerte descenso en el número de muertes estimadas en Mayfield, una ciudad de alrededor de 10,000 habitantes en el oeste de Kentucky. El anuncio se presenta después de casi dos días de que el gobernador dijera que el desastre era el evento más devastador en la historia de Kentucky.
«Seguimos esperando que se produzcan algunos milagros, que encontremos a más personas y que, con suerte, el número de muertos sea menor de lo que esperamos», dijo el gobernador de Kentucky, Andy Beshear, a los periodistas el domingo por la noche. Añadió que sería «bastante maravilloso» si se confirma, y añadió que las autoridades están trabajando para verificar la información.
Troy Propes, director ejecutivo de la fábrica de velas, dijo el domingo que Mayfield Consumer Products tuvo dos milagros el sábado, cuando dos trabajadores fueron sacados de entre los escombros. Un colega se había quedado con un sobreviviente atrapado, sosteniendo su mano hasta que los rescatistas pudieron llegar a ellos, le dijo a ABC News.
Beshear dijo que, como los teléfonos móviles siguen sin funcionar en muchas comunidades, las autoridades están teniendo dificultades para confirmar el número de desaparecidos, muertos y heridos.
“Sabemos que vamos a tener al menos cuatro condados con más de 10 muertos. Una vez más, lo mejor que podemos esperar serían las 50 [muertes confirmadas]”, dijo sobre el recuento de muertes del estado. «Todavía estamos encontrando cadáveres».
Miles de personas se han quedado sin hogar cuando cuatro tornados azotaron el estado, incluido uno con un camino extraordinariamente largo de aproximadamente 200 millas en Kentucky y otras 20 millas a través de las fronteras estatales, dijeron las autoridades.
El enjambre de tornados causó la muerte de al menos seis personas en Illinois, donde un centro de distribución de Amazon fue impactado por uno de los tornados; cuatro muertos en Tennessee; dos en Arkansas y dos en Missouri.
Beshear dijo que, a pesar de la destrucción, en primer lugar está agradecido. Agradeció a los socorristas por su «increíble heroísmo» y a los estadounidenses de otras ciudades y estados por su «efusión de amor». Todas las solicitudes de asistencia de Kentucky, incluidos los esfuerzos de búsqueda y rescate en curso, se han cumplido, dijo.
“Quiero agradecer a todos por apoyar a la gente de Kentucky, lo sentimos. De hecho, uno de nuestros mayores desafíos en este momento es organizar la cantidad de personas que quieren ayudar, quieren donar… ese es el mejor desafío que cualquiera de nosotros podría pedir”.
El Fondo de Ayuda a los Damnificados por el Tornado del Oeste de Kentucky ya ha recibido USD 2.3 millones procedentes de 18,031 donaciones, de las que cada céntimo se destinará a las familias, empezando por las subvenciones para asistencia funeraria, añadió el gobernador.
Ayuda de emergencia
Beshear también agradeció al presidente Joe Biden «quien me llamó tres veces» el sábado e inmediatamente otorgó el estado federal de emergencia, lo que permitió a FEMA mover recursos rápidamente para comenzar con los esfuerzos de respuesta inicial.
La administradora de FEMA, Deanne Criswell, quien estaba visitando las regiones afectadas, dijo a los reporteros: “No pueden entender cómo esto ha impactado a estas comunidades hasta que están allí, por eso es tan importante para mí estar aquí, para verlo por mí misma, para que podamos asegurarnos de que estamos brindando el nivel adecuado de asistencia para ayudarlos con su respuesta y su recuperación”.
Ella les dijo a los habitantes de Kentucky que FEMA está lista para ayudar a las comunidades que enfrentan las pérdidas de viviendas y la escasez de energía y combustible.
“Recibimos hace unos momentos una solicitud del gobernador para una declaración de emergencia importante”, agregó, dando a entender que se aprobaría pronto.
Biden aprobó la declaración de desastre pocas horas después para las personas afectadas en los condados de Caldwell, Fulton, Graves, Hopkins, Marshall, Muhlenberg, Taylor y Warren.
«La declaración de emergencia mayor va a comenzar a ayudar a los individuos. Pueden ir a disasterassistance.gov, también ayudaremos con la reparación a largo plazo de la infraestructura crítica destruida en la tormenta», dijo Criswell.
«¿Nueva normalidad?»
Cuando los periodistas le preguntaron si la catástrofe suponía una «nueva normalidad» para Kentucky, en referencia a la preocupación por el cambio climático, Beshear dijo: «En este momento, no puedo procesar si esto es una nueva normalidad o no, sólo estamos tratando de identificar a los muertos, localizar a los vivos, reunir a las familias, tratar de dar a la gente un lugar donde alojarse y algo que comer… De todo lo demás, con el tiempo, podemos hablar».
Luego pidió a los medios de comunicación: «Por favor, concéntrense en nuestra gente y en la ayuda que necesitan y merecen».
También les dijo a los residentes: “Ojalá entendiera por qué nos golpeó la pandemia, una tormenta de hielo histórica, inundaciones y ahora el peor tornado de nuestra historia, todo en un lapso de 19 meses. Lo que sí sé es que en Kentucky somos buenas personas y nos preocupamos unos por otros. Y es por eso que la gente estaba en la tormenta ayudando a sus vecinos y a otras personas que no conocían… Es por eso que hemos abierto 13 refugios, pero solo tenemos seis abiertos porque nos llevamos unos a otros a nuestras casas».
«Vamos a llorar juntos, vamos a excavar y limpiar juntos. Reconstruiremos y avanzaremos juntos”, dijo el gobernador.
Con información de Associated Press.
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