El gobierno de Joe Biden dio a conocer un plan para reducir las emisiones de carbono que busca maneras en que los estadounidenses se queden en casa. Este incluye hacer llamados a la población para disminuir la exigencia a los desplazamientos y reducir las emisiones.
«El trabajo a distancia y las interacciones virtuales pueden ser una alternativa viable a los desplazamientos diarios de algunas personas», sostiene la iniciativa. El plan afirma que «la conectividad, la automatización y el uso compartido» podrían contribuir a cambiar el «futuro de la movilidad».
«La pandemia de COVID-19 ha puesto de relieve importantes oportunidades para el teletrabajo y algunos estudios muestran la posibilidad de una reducción a largo plazo del 10 por ciento de los kilómetros recorridos anualmente en vehículo», indica el plan.
El documento de la administración Biden señala que ha llegado el momento de identificar «el acceso remoto a los servicios, como la atención de salud y la educación», como uno de los «determinantes clave de la futura demanda de viajes».
Otras sugerencias incluyen compartir viajes y utilizar sistemas de conducción automatizada.
La administración está presionando para que los funcionarios encuentren una manera de «aumentar la comodidad» asegurándose de que los trabajadores tengan un mejor «acceso y proximidad a las oportunidades de trabajo, servicios comunitarios y opciones de entretenimiento».
El anteproyecto, elaborado por los Departamentos de Energía, Transporte (DOT), Vivienda y Desarrollo Urbano (HUD) y la Agencia de Protección del Medio Ambiente (EPA), fue calificado de «estrategia histórica» por el DOT, informó anteriormente The Epoch Times.
Varias agencias anunciaron la iniciativa mediante un comunicado de prensa el 10 de enero, en el que el Departamento de Transporte afirmaba que reflejaba una estrategia de todo el gobierno para resolver los problemas climáticos y alcanzar los objetivos del presidente Joe Biden de lograr cero emisiones netas de carbono para 2050 y garantizar un sistema eléctrico 100 por ciento limpio para 2035.
El representante Rick Crawford (R-Ark.), miembro de la Comisión de Transportes e Infraestructuras del Congreso, no se manifestó a favor del plan.
«El plazo de 2050 fijado por la administración Biden para obligar a los estadounidenses a sustituir los aproximadamente 250 millones de coches de gas que circulan por las carreteras de nuestro país por costosos vehículos eléctricos —solo un día después de anunciar que estudia prohibir las cocinas de gas que se utilizan actualmente en el 40 por ciento de los hogares estadounidenses— demuestra lo completamente alejados que están de la realidad a la que se enfrentan las familias de clase media», declaró Crawford a The Epoch Times.
El anteproyecto es la continuación de una iniciativa que también se plantea en la Ley Bipartidista de Infraestructuras y en la Ley de Reducción de la Inflación, las que representan inversiones significativas en los esfuerzos de la administración por cambiar la forma de moverse y de vivir de los estadounidenses.
Según la propuesta, se necesitan mayores «inversiones» en infraestructuras para ir a pie y en bicicleta, y la planificación del uso del suelo abordaría el asunto desde su base para hacer atractivo y práctico realizar menos viajes o hacerlos más cortos, o incluso ir a pie o en bicicleta cuando sea viable.
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