Las redes sociales están llevando a los jóvenes a tener un bajo sentido de autoestima y estar insatisfechos con su apariencia, según un estudio publicado el 3 de enero por la organización benéfica de salud mental, stem4, con sede en Londres.
“Las redes sociales definitivamente me están afectando negativamente. Como jóvenes, constantemente nos comparamos con personas atractivas en Internet. En sitios como TikTok, las únicas personas que ves son hermosas debido a los algoritmos y eso nos hace sentir muy mal con nosotros mismos”, dijo un joven citado en el estudio (pdf).
El estudio, que encuestó a 1024 jóvenes de entre 12 y 21 años en el Reino Unido, encontró que el 97 por ciento de ellos estaban en las redes sociales, pasando un promedio de 3.6 horas al día en aplicaciones de teléfonos inteligentes, como TikTok, Snapchat, Instagram, Youtube y WhatsApp.
Estudio
Encontró que el 77 por ciento de los encuestados no estaban contentos con su apariencia, y algunos dijeron que estaban «avergonzados» por sus cuerpos.
El 45 por ciento de los encuestados dijeron que habían sido intimidados o engañados regularmente en Internet sobre su apariencia física, y tuvieron que lidiar con comentarios como «Te veías mejor cuando eras anoréxica». Como resultado, el 24 por ciento de ellos respondió retirándose, el 22 por ciento comenzó a hacer ejercicio en exceso, el 18 por ciento dejó de socializar, el 18 por ciento optó por restringir drásticamente su ingesta de alimentos y el 13 por ciento se autolesionó.
En general, la mitad de los encuestados compartían el sentimiento de miedo: Si no intentaban mejorar sus cuerpos, serían rechazados por sus amigos y nadie los querría.
La encuesta también encontró que el 42 por ciento de los jóvenes, el 51 por ciento de las mujeres y el 31 por ciento de los hombres, dijeron que tenían problemas de salud mental.
Además, el 17 por ciento dijo que tenía problemas con su imagen corporal, mientras que el 14 por ciento dijo que estaba experimentando dificultades para comer, como alimentación restrictiva, atracones y purgas o vómitos.
“De los que necesitan apoyo, solo uno de cada diez jóvenes está recibiendo tratamiento por problemas de imagen corporal y dificultades para comer”, dice el estudio.
Muchos de los encuestados, el 62 por ciento, estaban preocupados por su salud mental, dado el tiempo que pasaban en las redes sociales, así como el contenido en Internet que les llegaba a través de los algoritmos de las redes sociales.
A pesar de sus preocupaciones, el 95 por ciento de los encuestados dijeron que se sentían impotentes a la hora de dejar sus hábitos en Internet.
“Las redes sociales tienen un gran impacto en cómo nos vemos a nosotros mismos”, dijo otro joven que fue citado en el estudio. “Empecé a sentirme descontento conmigo mismo y con mi propia imagen, ya que constantemente me comparo con personas influyentes. Tengo que recordarme a mí mismo que no todo lo que veo en Internet es cierto”.
“Las redes sociales han afectado los estándares de belleza de la sociedad y me siento presionada a lucir como algo que ha sido editado y alterado. Crece el comportamiento crítico y te obliga a etiquetar. Si las redes sociales no existieran, no me compararía ni me compararían, y seguiría con mi vida”.
Acción
La Dra. Nihara Krause, psicóloga clínica consultora y directora ejecutiva de stem4, dijo que los resultados de la encuesta “son profundamente preocupantes”.
“Todos los jóvenes pasan por un cambio corporal rápido en la adolescencia, pero una crisis global tras otra los ha dejado en un estado constante de ansiedad y desánimo, sintiéndose fuera de control”, dijo Krause, según el estudio.
«No es de extrañar que los jóvenes se sientan más negativos sobre su situación y empiecen a centrarse más en su cuerpo como una forma de autocontrol y para sentirse mejor consigo mismos”.
“Cuando usan aplicaciones de redes sociales para buscar información y consejos muy necesarios, se encuentran con una supuesta realidad distorsionada y dañina. Además, sus búsquedas en Internet siguen arrojando contenido desencadenante que agrava el problema”.
El informe ofreció un antídoto, una aplicación para teléfonos inteligentes basada en evidencia llamada Worth Warrior, para ayudar a los jóvenes a “superar la baja autoestima causada por una imagen corporal negativa”.
Según el estudio, stem4 creó la aplicación con una subvención del Instituto Nacional de Investigación en Salud y Atención del Reino Unido, que es el brazo de investigación del Servicio Nacional de Salud (NHS) británico. La aplicación proporciona actividades e información útiles.
“Aunque Worth Warrior no debe verse como un reemplazo de la terapia brindada por profesionales de la salud mental capacitados, esperamos que esta intervención digital temprana brinde a estos jóvenes las herramientas que necesitan para cuestionar y cambiar sus pensamientos, emociones y comportamientos negativos respecto a la imagen corporal y los problemas alimentarios”, dijo Krause.
Añadió: «Esperamos que esto pueda reducir los riesgos de desarrollar un trastorno alimentario y, al mismo tiempo, desarrollar su autoestima».
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