Una cárcel de Florida fue evacuada durante el fin de semana en medio de la preocupación de una posible «inundación catastrófica» después de que se descubriera una fuga en un depósito cerca de una zona de contención de aguas residuales en el condado de Manatee.
El funcionario de información pública de la cárcel del condado de Manatee, Randy Warren, dijo a los medios de comunicación que los 345 reclusos serán llevados a «un lugar seguro no revelado con el fin de liberar espacio para los 721 reclusos restantes en el nivel superior de la cárcel de Manatee».
No se proporcionaron detalles sobre el lugar donde serán alojados debido a las preocupaciones de seguridad.
«Wells y el personal siguen en constante comunicación con los funcionarios sobre la situación. No estamos esperando más de un pie de agua en la propiedad de la cárcel, en el peor de los casos», dijo Warren a NewsChannel8.
Mientras tanto, el administrador interino del condado de Manatee, Scott Hopes, dijo a los periodistas en una conferencia de prensa el domingo que los funcionarios «trasladaron la unidad médica y todo el personal al segundo piso, lo que los pone a más de 10 pies por encima del nivel de base». Pero esos planes fueron desechados y Wells ordenó que los reclusos fueran trasladados en autobús a otro lugar, dijo Warren al Bradenton Herald.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, declaró el domingo el estado de emergencia mientras los funcionarios del condado evacuaban a los residentes cerca de una planta de procesamiento de fosfatos durante el fin de semana, ya que los funcionarios advirtieron que un estanque lleno de aguas residuales tóxicas podría colapsar «en cualquier momento».
«Una parte del muro de contención en el lugar de la fuga se desplazó lateralmente», dijo el director de Seguridad Pública del condado de Manatee, Jake Saur, a la WSTP después de que se descubriera una «fuga significativa» en la planta de procesamiento de Piney Point. Saur advirtió además que «el colapso estructural podría ocurrir en cualquier momento».
La oficina del sheriff espera que se produzca una inundación de hasta 30 centímetros en las inmediaciones de la cárcel en caso de que se produzca una fuga en la planta de Piney Point.
«El razonamiento para ello es simplemente para crear una mejor seguridad para nosotros dentro de las instalaciones en el nivel superior y para darnos suficiente espacio para las camas de los 721 reclusos restantes», dijo Warren al Herald.
La principal preocupación con respecto a Piney Point es la cantidad de fosfoyeso, que es un «residuo radiactivo» en el estanque procedente del procesamiento del fosfato en un estado en el que se puede utilizar para fertilizantes comerciales, según el Centro para la Diversidad Biológica.
El agua que se está bombeando del lugar es una mezcla de agua de mar, escorrentía de lluvia y aguas pluviales, dijeron los funcionarios estatales y del condado.
«El agua cumple las normas de calidad del agua para las aguas marinas con la excepción del pH, el fósforo total, el nitrógeno total y el nitrógeno amoniacal total», dijo el estado en un comunicado. «Es ligeramente ácida, pero no a un nivel que se espera que sea una preocupación, ni se espera que sea tóxico».
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