Nepal y China fijaron este martes la altura del Everest en 8848.86 metros, en un anuncio conjunto de ambos países tras colaborar en una medición que pone fin a años de polémica y preguntas sobre cuánto mide la montaña más alta del planeta.
Hasta ahora, Katmandú, país al que pertenece la vertiente sur del Everest fijaba la altura en 8848 metros, respetando una medición internacionalmente reconocida realizada por la India en 1955, mientras que para Beijing el monte medía 8844.43 metros, según su última medición efectuada en 2005.
Esta es pues la primera vez que los dos países, Nepal y China, se ponen de acuerdo en la altura del Everest, poniendo así fin a una controversia que rodea al techo del mundo desde que fue medido por primera vez en 1849 por los británicos.
En las primeras mediciones, cuando todavía no se sabía que se trataba de la montaña más alta del mundo, se utilizaron cálculos trigonométricos y fue en esta época que se dio al «pico XV» el nombre de Everest, apellido del geógrafo británico que las lideró.
En 2005, la Oficina de Topografía y Cartografía china volvió a calcular el pico utilizando equipamiento GPS y radar y estableció su altura casi cuatro metros por debajo de la ampliamente reconocida, descontando unos tres metros de nieve que cubren la cima de la montaña, argumentando que esa capa varía según las condiciones climáticas.
Este anuncio zanja también las dudas derivadas de las especulaciones de los geólogos sobre el impacto del terremoto de 2015 en la zona, de una magnitud 7.5 en la escala Richter, en el que murieron más de 9000 personas, incluyendo 19 en el Everest.
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