Un grupo de congresistas ha presentado una medida que insta a la administración estadounidense a poner fin a su «política de una sola China» y a reconocer formalmente el estatus de Taiwán como nación independiente.
El representante Tom Tiffany (R-Wis.) lideró a otros 18 congresistas en la presentación de la resolución el 25 de enero, que insta a Estados Unidos a reanudar las relaciones diplomáticas formales con Taiwán.
La resolución también insta a la administración Biden a apoyar la adhesión de Taiwán a las organizaciones internacionales y a negociar un acuerdo bilateral de libre comercio entre Estados Unidos y Taiwán.
«Es hora de cambiar el statu quo y reconocer la realidad negada por el gobierno de Estados Unidos durante décadas: Taiwán es una nación independiente», afirmó Tiffany en una declaración compartida con The Epoch Times.
«Como nuestro antiguo y valioso socio, reconocer correctamente su independencia de la China comunista es algo que debería haberse hecho desde hace mucho tiempo».
Mejorar las relaciones con Taiwán
El Partido Comunista Chino (PCCh), que rige China como un estado de partido único, afirma que Taiwán forma parte de China y debe unirse a la China continental por todos los medios. El régimen se ha negado a descartar la conquista militar para lograr este objetivo y en varias ocasiones ha amenazado con la guerra por el tema.
A pesar de tales amenazas, el PCCh nunca ha controlado Taiwán, que cuenta con su propio gobierno democrático y economía de mercado.
Estados Unidos mantiene desde 1979 la llamada política de «una sola China», por la que reconoce al régimen chino como la única entidad que rige China. Washington también mantiene la Ley de Relaciones con Taiwán, que garantiza que proporcionará a Taiwán las armas necesarias para su autodefensa.
Sin embargo, los acuerdos de Washington con el PCCh le han impedido reconocer formalmente a Taipei en los organismos diplomáticos y comerciales, a pesar de que Taiwán es el décimo socio comercial más grande de Estados Unidos.
Es una situación que Tiffany espera rectificar.
“Taiwán ha sido puesto en pie de igualdad… con Corea del Norte y otros países recalcitrantes como ese”, dijo Tiffany durante una entrevista el 25 de enero con “Capitol Report” en NTD, un medio de comunicación afiliado a The Epoch Times.
“Han ampliado su democracia y son verdaderamente un país libre y amante de la paz aquí en el planeta Tierra. Y creo que deberían ser reconocidos como tales”.
La idea no es nueva con Tiffany, quien presentó resoluciones similares en 2020 y 2021. Lo nuevo, dijo, es el apoyo que está recibiendo la resolución.
“Hace un par de años, era solo yo”, dijo Tiffany. “Este año, vamos a tener 18 copatrocinadores originales”.
“Cada vez hay más personas en el Congreso que comprenden cuán importante es Taiwán y cuán importante es que reconozcamos a Taiwán y que negociemos con Taiwán”.
Esos copatrocinadores incluyen a los representantes republicanos Buddy Carter (Ga.), Dan Crenshaw (Texas), Scott DesJarlais (Tenn.), Byron Donalds (Fla.), Bob Good (Virginia), Lance Gooden (Texas), Doug LaMalfa (Calif.), Jake LaTurner (Kan.), Nancy Mace (SC), Tom McClintock (Calif.), Nicole Malliotakis (NY), Lisa McClain (Michigan), Ralph Norman (SC), Andy Ogles (Tenn.) , Burgess Owens (Utah), Scott Perry (Pennsylvania), Michelle Steel (California) y Randy Weber (Texas).
Una de las copatrocinadoras, Steel, también ha sido nombrada miembro del nuevo Comité Selecto de la Cámara sobre Competencia Estratégica entre Estados Unidos y el Partido Comunista Chino, lo que puede ayudar a brindar apoyo bipartidista a la resolución.
La dinámica entre EE. UU., Taiwán y China está cambiando
En conjunto, la resolución de Tiffany pretende rectificar lo que considera un conjunto anticuado de políticas exteriores que ya no reflejan ni el lugar de Taiwán ni el de China en el mundo, ni sus relaciones con Estados Unidos.
“El presidente debe abandonar la anticuada ‘Política de una sola China’ en favor de una política que reconozca la realidad objetiva de que Taiwán es un país independiente no gobernado ni incluido dentro del territorio de la República Popular China”, afirma la resolución, utilizando el nombre oficial de la China comunista.
De hecho, el contexto de las relaciones trilaterales entre China, Taiwán y Estados Unidos ha cambiado drásticamente en casi medio siglo desde que se formuló. Además de la adopción de la democracia por parte de Taiwán y su próspera economía de mercado, también está el hecho de que la mayoría de los taiwaneses ahora se consideran algo distinto de China y su gente.
Una encuesta de Pew de 2020 reveló que el 66 por ciento de los taiwaneses se consideraba un pueblo distinto de los chinos, el 28 por ciento se consideraba tanto taiwanés como chinos, y solo el 4 por ciento se consideraba solo chino.
Esta tendencia es mucho mayor entre las generaciones más jóvenes: el 83% de los taiwaneses menores de 30 años afirma no considerarse chino.
Asimismo, una encuesta realizada en noviembre de 2021 por el Consejo de Asuntos Continentales de Taiwán, que se ocupa de las relaciones entre ambos lados del estrecho, reveló que solo el 1.6 por ciento de los taiwaneses apoyaba la unificación con China.
Según Tiffany, los tiempos han cambiado y ya es hora de que Estados Unidos adapte su política exterior para reflejar las realidades de la era actual.
“El mundo ha experimentado cambios dramáticos desde los tiempos de Richard Nixon y Jimmy Carter, y es hora de que la política estadounidense refleje ese hecho”, dijo Tiffany en un comunicado.
“Taiwán es un país libre, democrático e independiente, uno que nunca ha estado bajo el control de la República Popular China o parte de su territorio. Cualquier sugerencia de lo contrario es simplemente una mentira”.
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