Los republicanos de Maine decidieron el 24 de junio que quieren que el excongresista Bruce Poliquin represente una vez más sus intereses en Washington.
Decision Desk HQ anunció la elección de Poliquin a las 10:23 p.m. ET.
Poliquin, que cuenta con el respaldo del candidato republicano a gobernador Paul LePage, fue nominado por Trump en 2019 para la Corporación de Protección de Inversiones en Valores (SIPC), administrada por el gobierno.
Con su campaña «Bring Back Bruce», obtuvo el 61.5 por ciento de los votos con el 26 por ciento de las boletas contadas a las 10:39 p.m. ET, según Decision Desk HQ. Derrotó a la contendiente republicana Liz Caruso.
Brent Littlefield, asesor de campaña de Poliquin, le dijo a The Epoch Times que los líderes republicanos de Washington están articulándose para asegurar que Poliquin tome el importante escaño en el Congreso. El representante Steve Scalise (R-La.) tiene previsto venir a Maine y hacer campaña por Poliquin.
En la mañana de las primarias de Maine, la congresista de Nueva York Elise Stefanik, presidenta de la Conferencia Republicana de la Cámara, instó a los republicanos del estado a apoyar a Poliquin.
“¡Bruce tiene lo que se necesita para recuperar este asiento crítico en la lucha para despedir a Pelosi y salvar a Estados Unidos!”, escribió Stefanik en Twitter.
Poliquin, extesorero estatal en Maine, ocupó el cargo dos veces y ahora competirá contra el representante Jared Golden (D-Maine). Poliquin perdió el escaño ante Golden en 2018 bajo la votación por orden de preferencia de Maine, un sistema electoral que se activa cuando ningún contendiente recibe más del 50 por ciento de los votos.
Poliquin no aceptó fácilmente la derrota. Presentó una demanda que impugnaba la constitucionalidad del sistema electoral, pero un juez federal falló en su contra, lo que llevó a Poliquin a ceder finalmente ante el joven demócrata y exmarine estadounidense.
Poliquin ha presentado su candidatura a otros cargos, incluida la carrera electoral de 2012 al Senado de EE.UU., en la que obtuvo la nominación republicana de los votantes de Maine. Cuando fue elegido por segunda vez para el Congreso de Estados Unidos en 2017, Poliquin se quedó solo como el único republicano que representaba un distrito de la Cámara de Representantes de Estados Unidos en los seis estados de Nueva Inglaterra.
Poliquin construyó su riqueza a partir de empresas de gestión de inversiones en Nueva York y Chicago. Aporta una diversidad de antecedentes políticos y personales a la arena nacional.
Graduado de la Academia Andover y de Harvard, Poliquin creció en las zonas rurales de Waterville, Maine. Sufrió la pérdida de su primera esposa en un accidente por ahogamiento en 1992, dejándolo como padre soltero de su hijo de 16 meses. Se divorció de su segunda esposa en 2009.
Como congresista, fue un republicano incondicional de forma intermitente, apoyando los aranceles a la madera importada de China para ayudar a la industria maderera estadounidense, pero siendo uno de los tres únicos republicanos de la Cámara de Representantes que votaron en contra de la derogación del Obamacare, una medida que llevó al Caucus Republicano de la Libertad a retirar el apoyo que le entregaba.
Poliquin consiguió un gran éxito entre los veteranos cuando presentó la Ley de Acceso de los Veteranos a los Cuidados de Larga Duración y a los Servicios de Salud, que permitiría reducir algunos de los trámites burocráticos para la atención en residencias de ancianos destinadas a los veteranos. También hizo una agresiva campaña a favor de reformar una legislación dirigida a la mala praxis en los hospitales de veteranos.
Como lo estuvo durante sus dos primeros mandatos, Poliquin sigue comprometido con el apoyo a los veteranos estadounidenses y se opone impávidamente a la legislación de control de armas y fronteras abiertas, esta vez, con énfasis en que la inmigración ilegal es la culpable de la afluencia de fentanilo en Estados Unidos.
Una novedad en su campaña es la petición de un proyecto de ley sobre los derechos de los padres para frenar lo que llamó «los elementos extremos» de la teoría crítica de la raza. Poliquin no ha dicho mucho sobre los mandatos de COVID impuestos por el gobierno a diferencia de Caruso, quien hizo campaña enfáticamente en una plataforma de libertad médica.
A diferencia de Caruso, Poliquin condenó abiertamente la irrupción al Capitolio el 6 de enero diciendo que fue un “evento violento” y, aunque se declaró partidario de la vida, se negó a decir si apoya la prohibición a los abortos. En una aparición reciente en “207”, a cargo de News Center Maine, la principal estación de televisión del estado, Poliquin se negó repetidamente a decir si pensaba que Trump ganó las últimas elecciones, y solo dijo que “tenemos un presidente al que no favorezco”.
Tras aceptar la victoria de Poliquin, Caruso dijo que estaba agradecida por la oportunidad de conocer a más compañeros de Maine en sus tres meses de campaña.
Caruso, de 52 años, y madre dedicada a educar a sus hijos en casa, se presentó en una plataforma de base, apelando a varias organizaciones organizadas por padres y trabajadores de la salud desconcertados por los mandatos contra el COVID de la gobernadora demócrata Janet Mills y por el impulso de la administración para aumentar la educación sexual LGBTQ+ y el plan de estudios de la teoría crítica de la raza en las escuelas públicas.
Si Poliquin vence a Golden, se unirá a la senadora Susan Collins (R-Maine) y a Angus King (I-Maine) para representar los intereses de Maine en Washington. Los representantes demócratas Chellie Pingree y Jared Golden actualmente representan a Maine en la Cámara de Representantes de Estados Unidos.
Pingree, que fue elegida en 2009, se enfrenta al republicano Ed Thelander, exmarine y bombero voluntario, por su escaño en el primer distrito del Congreso. Ninguno de los dos tuvo contendientes en las primarias.
El distrito incluye a la progresista costa sur de Maine, la capital de Maine, Augusta, y Portland, considerada una de las ciudades más liberales de Nueva Inglaterra.
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