El Dr. Robert Redfield, exdirector de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, apoyó al plan del expresidente Donald Trump y su nuevo aliado Robert F. Kennedy Jr. para «Hacer a Estados Unidos saludable de nuevo».
El respaldo del Dr. Redfield, a quien Kennedy había criticado durante años, aparece en una editorial que él escribió el 24 de septiembre para la revista Newsweek bajo el titular «Donald Trump tiene un plan para hacer que los niños de Estados Unidos vuelvan a estar sanos. Es uno bueno».
«Apoyo su noble esfuerzo por curar a nuestros niños», escribió Redfield refiriéndose a ambos.
El Dr. Redfield señaló que, antes de que la pandemia de COVID-19 se afianzara en 2020, la «administración Trump marcó el rumbo para abordar las enfermedades crónicas, financiando intervenciones más tempranas para frenar la creciente crisis».
«Cinco años después, este tema está exactamente donde tiene que estar: en el centro del debate presidencial, ahora en una única alianza», dijo, refiriéndose a la alianza de Trump con Kennedy.
«Para curar a nuestros hijos, un presidente debe ver las posibilidades y llevar a nuestra nación a actuar», escribió Redfield. «Después de más de 40 años en el ámbito de la salud pública, podría sorprender a algunos de mis colegas saber que creo que el presidente Trump eligió al hombre adecuado para el trabajo: Robert Kennedy, Jr.».
A fines de agosto, el apoyo de Kennedy a Trump causó sensación debido a la larga prominencia de su familia en el Partido Demócrata. Su padre fue el senador Robert F. Kennedy y su tío fue el presidente John F. Kennedy, ambos asesinados durante su mandato en la década de 1960.
Kennedy y Trump, a pesar de tener algunas diferencias políticas, comparten una preocupación mutua por la salud de los estadounidenses.
El Dr. Redfield dijo que Kennedy tiene razón en su evaluación de que las tres principales agencias de salud de Estados Unidos están sujetas a influencias externas, incluidos los CDC, que él dirigió anteriormente.
Gran parte del presupuesto de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) proviene de las empresas farmacéuticas, dijo el Dr. Redfield, añadiendo que los Institutos Nacionales de Salud (NIH) «están muy unidos a las empresas biomédicas y farmacéuticas», y a sus científicos «se les permite cobrar regalías por los medicamentos» que la agencia licencia a las farmacéuticas.
El Dr. Kennedy, exdemócrata de larga data y candidato presidencial independiente, que recientemente suspendió su campaña para 2024 y respaldó a Trump, describió el apoyo del Dr. Redfield como un «evento extraordinario» en un video publicado en la plataforma de redes sociales X.
«Esta persona es el jefe de los CDC que he estado criticando durante años, y luego esta tarde vino y almorzó conmigo», dijo Kennedy en el video del 24 de septiembre. «Era la primera vez que me reunía con él, y lo primero que me dijo es: ‘lo has hecho todo bien’».
Una nación enferma
El Departamento de Agricultura de Estados Unidos «también es cautivo de la industria», escribió el Dr. Redfield.
En lugar de centrarse en su misión de garantizar un suministro de alimentos sanos, «la agencia a menudo favorece a las grandes corporaciones por encima de los intereses de los pequeños agricultores y de la salud pública», afirmó.
Las enfermedades crónicas representan más del 75% de los 4 billones de dólares anuales de gastos sanitarios del país, un indicador de una desafortunada realidad, dijo el Dr. Redfield, agregando que «nos hemos convertido en una nación enferma».
Esto se puede cambiar, dijo a continuación, e hizo un guiño a la iniciativa Trump-Kennedy Make America Healthy Again, diciendo: «Es hora de hacer que América vuelva a estar sana».
Poner freno a los problemas de salud de Estados Unidos puede comenzar con los niños, dijo el exdirector, explicando que las condiciones crónicas de salud afligen al 40 por ciento de los niños en edad escolar; el 20 por ciento de los niños son obesos, un aumento de cinco veces desde la década de 1960.
Se ha demostrado que el uso de pesticidas en la agricultura es un factor de riesgo para los trastornos por déficit de atención e hiperactividad, añadió.
Trump prometió que, si gana las elecciones del 5 de noviembre contra la vicepresidenta Kamala Harris, nombrará a expertos que trabajen con Kennedy para investigar las causas del deterioro de la salud de los estadounidenses, que dura ya décadas.
Los planes sanitarios de Harris se centran en gran medida en reducir los costos de los medicamentos con receta, ampliar la Ley de Asistencia Sanitaria Asequible y cancelar la deuda médica de millones de estadounidenses, según la página web de su campaña. Harris también se comprometió a firmar la legislación del Congreso para legalizar el aborto en todo el país.
The Epoch Times pidió comentarios a los organismos federales mencionados por el Dr. Redfield en su artículo, pero no obtuvo respuesta inmediata de los CDC, la FDA, los NIH o el Departamento de Agricultura.
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