Jeff Sessions, exsenador de Alabama y fiscal general del presidente Donald Trump, dijo que la actual crisis fronteriza está permitiendo que más delincuentes ingresen a Estados Unidos.
“Sabes, en los países pobres, no mantienen a la gente en la cárcel durante 30 o 40 años. Están contentos de deshacerse de ti. Entonces, si eres un abusador de niños y el alguacil y el jefe de policía en Honduras te conocen, ¿Qué vas a hacer? Tienes un primo en Los Ángeles, simplemente cruzas la frontera”, dijo Sessions en un podcast del 29 de septiembre con Mark Krikorian, director del Centro de Estudios de Inmigración con sede en Washington.
“Así que creo que estamos deteniendo a una mayor cantidad de delincuentes de los que solíamos [detener] en el sistema de inmigración”.
Sessions se convirtió en una figura polarizada entre los conservadores poco después de convertirse en fiscal general cuando se recusó de la investigación de colusión de Rusia del Departamento de Justicia.
En la frontera, Sessions jugó un papel decisivo en la política de «tolerancia cero» que se aplicó durante unos dos meses a partir de abril de 2018. La política coincidía con la ley de inmigración que dice que, si las personas cruzan la frontera ilegalmente, deben ser detenidas.
Se conoció como la política de “separación familiar”, ya que varios cientos de padres fueron separados temporalmente de sus hijos, ya que todos los adultos fueron detenidos y procesados por ingresar ilegalmente.
La motivación detrás de la medida era detener la política de «atrapar y soltar» que había atraído a miles de inmigrantes ilegales que sabían que serían liberados dentro de Estados Unidos, a pesar de que la gran mayoría no era elegible para el asilo.
La administración detuvo el programa de tolerancia cero el 20 de junio y luego promulgó el programa Permanecer en México, que tuvo el efecto de reducir drásticamente las entradas ilegales. En lugar de ser liberados en Estados Unidos con una fecha de corte años después, el programa obligó a los que cruzaban la frontera ilegalmente a esperar en México hasta que su caso fuera adjudicado por un juez de inmigración.
“Es difícil exagerar lo difícil que fue para la administración Trump hacer progresos”, dijo Sessions.
«Se presentaron demandas en los tribunales como fiscal general y nos ocupamos de ellas. Y defendimos las acciones del presidente. Y empezamos a ganar casos y a cambiar políticas. Y el éxito fue real. Y los números cayeron… [Pero eso] fue desechado por la administración [Biden]. Lo que hicieron supera todo lo imaginable».
El presidente Joe Biden emitió un puñado de órdenes ejecutivas a las pocas horas de asumir el cargo el 20 de enero de 2021.
El primer día, la administración firmó órdenes ejecutivas y emitió memorandos para suspender temporalmente las deportaciones de extranjeros ilegales, revertir la prohibición de Trump de viajar desde países propensos al terrorismo, detener la construcción del muro fronterizo, dejar de agregar personas al programa «Permanecer en México», preservar y fortalecer el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA) y lanzar un amplio paquete de inmigración al Congreso que incluye amnistía para millones de inmigrantes ilegales.
Desde entonces, un número récord de extranjeros ilegales de más de 160 países han cruzado la frontera entre EE.UU. y México, incluidos más de 2 millones que cruzaron el año pasado.
Los agentes de la Patrulla Fronteriza informaron que, al menos, 599,000 extranjeros ilegales adicionales evadieron la captura el año pasado, casi 50,000 por mes, según cifras obtenidas por Fox News.
Se supone que los que evaden la captura, conocidos como “fugitivos”, están evadiendo la aplicación de la ley porque son delincuentes, fueron previamente deportados, o porque saben que no obtendrán la entrada legal.
Durante el año fiscal 2022, los agentes de la Patrulla Fronteriza arrestaron a 78 extranjeros ilegales que están en la lista de vigilancia terrorista del gobierno de EE.UU., en comparación con tres arrestos a personas en esta lista durante el año fiscal 2020, según Aduanas y Protección Fronteriza (CBP).
Además, los agentes de la Patrulla Fronteriza detuvieron a casi 11,000 delincuentes condenados en la frontera y otros 836 con órdenes de arresto en el año fiscal 2022, con un mes de datos faltantes. Otros 697 pandilleros han sido arrestados en la frontera.
«Tengo la sensación de que todo el mundo está aprendiendo ahora que no sólo los mexicanos y los centroamericanos pueden venir ilegalmente: ellos también pueden venir aquí ilegalmente», dijo Sessions.
Krikorian dijo que prevé que lleguen más extranjeros ilegales de países africanos, Medio Oriente, China e India.
“Una vez que la puerta está abierta, la atravesarán con la esperanza de pasar antes de que nos despertemos y la cerremos de nuevo”, dijo.
Sessions dijo que los legisladores republicanos en Washington deben aplicar más presión para asegurar la frontera.
“Lo que encontré fue, y lo dije muchas veces, votarán a favor de cualquier proyecto de ley sobre inmigración que suene bien, pero si realmente funciona, nunca será aprobado”, dijo Sessions.
Durante los primeros dos años de Trump, los republicanos controlaron tanto la Cámara como el Senado, pero no lograron aprobar ninguna legislación que cerrara las lagunas de la ley de inmigración, las cuales impulsaron muchas de las entradas ilegales.
«Es un desastre colosal que tengamos que abrir nuestro sistema a cualquiera que quiera venir. Eso nunca puede ser una política legítima de una gran nación», dijo Sessions.
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