Exmiembro de junta escolar: Contratistas externos imparten educación sexual en escuelas de California

Los distritos escolares de California han contratado a agencias externas dedicadas a la salud mental, la tutoría, la prevención del suicidio y muchos otros temas para que ofrezcan a las escuelas servicios de educación sexual y de género, dijo Brenda Lebsack, profesora durante 30 años y exmiembro del consejo del Distrito Escolar Unificado de Orange.

«Gran parte proviene del [programa] Escuelas Acogedoras de Human Rights Campaign, que enseña a los niños: Puedes elegir tu género. Cuando naces, los padres o los médicos adivinan tu género mirando las partes de tu cuerpo, pero eso no determina quién eres realmente. Y puedes ser de ambos géneros, de ninguno, de género fluido, o cambiar sobre la marcha en función de tus sentimientos».

Human Rights Campaign es una organización de defensa del colectivo LGBTQ con sede en Washington.

«Tenemos un montón de nuevos trabajadores jóvenes de salud mental, consejeros que se están incorporando a nuestras escuelas porque hay una gran cantidad de dinero de subvención que viene en este momento para la salud mental», dijo Lebsack al programa «Crossroads» de EpochTV el 16 de junio.

Cuando Lebsack preguntó a estos trabajadores cómo habían sido formados para definir la identidad de género de los niños, explicaron que afirman cualquier género que un niño de jardín de infancia elija ser y el pronombre que el niño quiera usar, dijo. Si a un niño de jardín de infancia le preocupa que a sus padres no les guste su elección, el trabajador de salud mental lo mantendrá confidencial y no se lo comunicará a los padres, dijo Lebsack.

«Mientras tanto, en California, los trabajadores de la salud mental o alguien que trabaje con la escuela puede realmente cambiar la categoría de género de un niño sin el permiso de los padres».

El trabajador entonces se mantiene en contacto con el niño en algunas escuelas a través de plataformas virtuales, o a través de mensajes de texto, continuó Lebsack, dando un ejemplo de Planned Parenthood, que puede proporcionar a los niños un número de texto para ser utilizado para hablar de la identidad de género.

Lebsack envió un mensaje de texto a dicho número fingiendo que era una niña asustada por la pubertad e insegura de su género. Como respuesta, recibió un mensaje en el que se le proponían 10 opciones de género entre las que elegir.

«Una de ellas era ‘invéntate tu propio género'», dijo.

El trabajador que le respondió también la puso en contacto con un chat para personas de entre 10 y 45 años, le propuso que tomara bloqueadores de la pubertad y le dio la opción de concertar una cita con la agencia para profundizar en su problema, dijo Lebsack. Ella no entró en ese chat, pero dijo que había visto chats en los que se mezclan menores con adultos y cree que «es claramente grooming [y] es una oportunidad para los pedófilos».

«Se llega a los niños [a] espaldas incluso de los maestros [y] muchos directivos y superintendentes ni siquiera lo saben», dijo Lebsack.

«Simplemente asumen: ‘Oh, una línea de ayuda en casos de suicidio. Oh, una línea directa de salud mental’. Pero no entienden cómo se forman ahora estos trabajadores de la salud mental, especialmente los jóvenes».

Bloqueadores de la pubertad

Enseñar sobre la identidad de género crea un dilema para los niños y muchos de ellos se ven «atrapados en eso, razonablemente, porque la pubertad es un momento muy incómodo», dijo Lebsack. Los niños quieren escapar de eso, especialmente las niñas, que a menudo se sienten horrorizadas por su pubertad, añadió.

Los trabajadores dicen a los niños que si no están seguros de su sexo pueden empezar a tomar bloqueadores de la pubertad, lo que les da más tiempo para decidir, dijo Lebsack.

Esto resulta especialmente atractivo para las niñas, ya que pueden pensar que pueden convertirse en un niño tras tomar la píldora, dijo.

Pero si los padres no están de acuerdo con el enfoque de la escuela, entonces en California, pueden ser acusados de abuso espiritual de sus hijos, dijo Lebsack. «[Abuso espiritual] significa utilizar la religión para justificar una ideología de género rígida, como ‘el género se basa en la biología'».

«La escuela [entonces] podría llamar [a los Servicios de Protección de Menores], y [los padres] podrían llevarse a su hijo».

«Las hormonas determinan nuestra estabilidad, y la pubertad es una época tumultuosa de todos modos», dijo Lebsack. Este tipo de tratamiento hormonal puede afectar a la capacidad de los niños para enfrentarse a los problemas, a su desarrollo cognitivo e incluso esterilizarlos, explicó.

Efectos secundarios peligrosos

Los bloqueadores de la pubertad pueden causar depresión y otros trastornos emocionales relacionados con el suicidio, según el Colegio Americano de Pediatras (ACPeds). Uno de los bloqueadores de la pubertad más recetados en Estados Unidos «también se ha asociado con, y puede ser la causa de, muchos efectos secundarios graves y permanentes, como la osteoporosis, los trastornos del estado de ánimo, las convulsiones, el deterioro cognitivo y, cuando se combinan con hormonas de sexo cruzado, la esterilidad», señala el sitio web del ACPed.

La Academia Americana de Pediatría (AAP) declaró en su sitio web que los bloqueadores de la pubertad son reversibles y pueden utilizarse en jóvenes con disforia de género hasta los 16 años de edad para que el niño tenga más tiempo «para explorar su identidad de género», pero también advierte sobre los riesgos asociados a la toma de bloqueadores de la pubertad.

«Retrasar la pubertad más allá de la de los compañeros también puede ser estresante y puede conducir a una menor autoestima y a una mayor asunción de riesgos», dice el sitio web de la AAP. «La investigación sobre los riesgos a largo plazo, en particular en términos de metabolismo óseo y fertilidad, es actualmente limitada y ofrece resultados variados».

El Dr. Lawrence Tabak, director interino de los Institutos Nacionales de Salud, reconoció que «no hay estudios a largo plazo sobre los riesgos asociados con el uso no autorizado de los bloqueadores de la pubertad por parte de los menores» cuando fue interrogado por el senador Marco Rubio (R-Fla.) durante una audiencia en el Senado en mayo, según un comunicado.

«Toda la investigación en este ámbito es observacional. No hacemos ningún trabajo de intervención», dijo Tabak en la audiencia.

Un estudio observacional no pone a prueba ningún tratamiento potencial y los investigadores observan los resultados de salud de los participantes que se someten a un tratamiento normal, mientras que un estudio de intervención pone a prueba el resultado de un tratamiento o procedimiento terapéutico concreto.

Rubio también subrayó durante la audiencia que el uso de bloqueadores de la pubertad y la terapia hormonal en menores no ha sido aprobado por la Administración de Alimentos y Medicamentos.

Financiación de la educación sexual

La financiación para contratar entidades externas que proporcionen a las escuelas servicios de educación sexual proviene de fuentes gubernamentales a nivel federal o estatal, lo que significa que se utiliza el dinero de los contribuyentes para pagar estos servicios, dijo Lebsack.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades proporcionan fondos para la educación sexual a Advocates for Youth que, junto con la AAP, afirma varias categorías de género para los niños, incluyendo «el género creativo, lo que significa que un niño puede componer su propio género», explicó Lebsack.

Además, las normas nacionales de educación sexual para 2020, que siguen muchos estados, fueron redactadas por Advocates for Youth, dijo Lebsack.

Advocates for Youth gestiona «Amaze», una organización que produce videos que forman parte del plan de estudios de educación sexual, dijo Lebsack. Los videos están disponibles en todo el mundo en muchos idiomas y enseñan a los niños que el género se basa en los sentimientos de un niño, que un niño puede elegir su género y que el género fluctúa, explicó Lebsack, añadiendo que los videos de Amaze también animan a los niños a explorar su sexualidad a cualquier edad, que también puede ser fluida.

Cuando era miembro del consejo escolar en California, dijo Lebsack, un hospital local ofrecía servicios de salud mental a 20,000 estudiantes del distrito. El hospital tenía una clínica pediátrica de género y sus trabajadores realizaban la transición de género de los niños socialmente a la edad de 5 años y médicamente a la edad de 9 años, dijo Lebsack. El dinero de la subvención estatal hizo posible la iniciativa, explicó.

Educar a los niños sobre las identidades transgénero también está incluido en el programa preescolar universal que forma parte del plan «Reconstruir mejor» del presidente Joe Biden, dijo Lebsack.

El marxismo aplicado a la educación sexual

Las escuelas también aprovechan la teoría crítica de la raza (TCR) para enseñar a los niños que los que mantienen su género biológico son considerados privilegiados y opresores, mientras que los que no se alinean con su género biológico o mantienen identidades de género diferentes son considerados los marginados y oprimidos, dijo la profesora.

Incentiva a los niños y los presiona para que exploren diferentes identidades de género porque nadie quiere ser un opresor, añadió.

La teoría crítica de la raza se basa en el arquetipo marxista de la lucha de clases, que enfrenta a dos clases sociales —la burguesía y el proletariado— para dividir y conquistar, pero la TCR divide a las personas en opresores y oprimidos en función de su color de piel o su género.

Lebsack dijo que habló con muchos padres que no están de acuerdo con la perspectiva de que sus hijos sean presa de la ideología de género, y descubrió que se sienten descorazonados.

«Es desgarrador», dijo. «Destruye una familia, y destruye a los niños».

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