Tras décadas de presuntos abusos sexuales, físicos y psicológicos, Sochil Martín, ahora una ex miembro de La Luz del Mundo, denunció este jueves los «crímenes» que suceden al interior de esta iglesia y que hacen parte de una demanda federal.
«A la edad de 9 años mi propia familia y comunidad (de la iglesia) me enseñaron que mi alma eterna dependía de complacer sexualmente al Apóstol de la Luz del Mundo», dijo Martín, de 33 años.
La hispana, nacida en California, ofreció este jueves una conferencia de prensa en Los Ángeles en la que hizo público las razones que la llevaron a presentar una demanda federal contra Naasón Joaquín García, líder de La Luz del Mundo, y más de diez miembros de la congregación.
«Comparto mi historia porque debemos ponerle un alto a esto que está pasando», aseguró, la mujer que bajo las leyes federales y de California tenía el derecho de mantenerse en el anonimato.
Según la querella presentada este miércoles en el Tribunal de Distrito Central de California, desde que era una menor de edad Martín fue violada en repetidas ocasiones por García y fue obligada a realizar bailes eróticos casi desnuda, entre otros actos de carácter sexual.
Además, los líderes de la iglesia supuestamente obligaron a Martín a reclutar otras jóvenes para que también atendieran al líder de la iglesia.
Visiblemente conmocionada, la mujer recordó que desde que nació está en el seno de esta iglesia porque su bisabuelo paterno fue uno de los primeros miembros y, por tanto, este credo fue transmitido de generación en generación en su familia.
De hecho, una tía con la que se crió fue la que le dijo que, aún siendo una niña, había sido «la elegida» para servir a Dios, y por ende al entonces líder de la iglesia, Samuel Joaquín Flores, quien estuvo al frente de la congregación por 50 años.
Cuando Naasón Joaquín García asumió la dirección de esta iglesia, en 2014, los abusos contra esta mujer continuaron, asegura la demanda.
De acuerdo a la querella, en 2007, Martín terminó en el hospital por uno de los abusos cometidos por el líder de esta iglesia.
«Por casi 22 años fui hecha para trabajar, viajar, mentir y dar mi cuerpo a una organización que me vio como una ganancia financiera y de placer sexual», relató la mujer, quien confesó que en todos estos años sabía que en el fondo lo que le pasaba estaba mal.
«Cuando ya estás ahí ves que tus amigas lo hacen, tus familiares están de acuerdo. Ya te acostumbras y crees que es correcto», reflexionó.
Cuenta que fue gracias a su esposo, ahora también exmiembro de la iglesia, que el 13 de octubre de 2016 decidió abandonar la congregación, en la que llegó a ser asistente personal de García.
No obstante, la salida no ha sido el final de sus tormentos. Su abogada Deborah Mallgrave subrayó que desde esa época y hasta la fecha la joven es víctima de acoso, intimidación y amenazas por parte de los miembros de la iglesia, tanto en Estados Unidos como en el extranjero.
Martín fue la primera mujer que presentó una queja ante las autoridades californianas por los supuestos abusos sexuales que ocurrían en la iglesia, y por los que García y otras tres miembros de la iglesia afrontan casi 30 cargos por delitos sexuales.
El abogado Jeff Anderson, quién también representa a Martín, dijo que actualmente su defendida sigue colaborando con las autoridades en el caso que lleva la oficina del Fiscal de California, Xavier Becerra.
«Es valiente y estamos junto a ella para lograr justicia», recalcó el jurista.
Además de las acusaciones de abuso sexual, la demanda de 63 páginas acusa a García y a la Iglesia de crimen organizado, tráfico de personas y trabajo forzado, entre otros.
Una audiencia judicial en Los Ángeles estaba programada para este viernes en el caso de García, Alondra Ocampo, de 36 años, y Susana Medina Oaxaca, de 24, pero finalmente fue postergada para el mes de marzo.
Azalea Rangel Melendez, quién también está acusada en el caso que llevan las autoridades californianas está en busca y captura.
«Los facilitadores de Naasón dirán que soy una mentirosa y una conspiradora y coaccionarán en contra de mí», presagió Martín, pero la exfeligrés dice estar preparada a resistir los ataques junto con su esposo y otros ex miembros de la iglesia.
«Es tiempo de decir no más», añadió.
A continuación
Cámara oculta muestra a una víctima de tortura en China
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.