Uno de los principales procuradores que sirvió en la investigación de Rusia para el consejero especial Robert Mueller, eludió el miércoles una pregunta sobre si borró el teléfono que le otorgó el gobierno durante el curso de la indagación.
En una entrevista difundida el 30 de septiembre, el presentador de CBSN, Vladimir Duthiers, preguntó al exprocurador del equipo de Mueller, Andrew Weissmann, si él era uno de los al menos 22 miembros del grupo que limpiaron sus teléfonos.
Weissmann, quien limpió su teléfono dos veces, no respondió a la pregunta y se limitó por afirmar que todos los registros estaban respaldados en los ordenadores de los miembros del equipo.
“Una de las cosas que realmente desearía que el departamento publique son todas las formas que teníamos, los sistemas de respaldo, y que todo lo que podría haber en un teléfono se respalda en nuestras computadoras, así que no creo que hayamos perdido ningún dato en absoluto», dijo Weissmann.
«Además de hecho, una de las cosas que detallo en el libro está lejos de no querer conservar la información, estábamos muy preocupados de que si nos despedían nuestra información desaparecería», añadió. «Así que hicimos todo lo posible para asegurarnos de que nuestros registros existieran y existieran en numerosos lugares en el Departamento de Justicia, así como en el tribunal. Así que teníamos todas las razones para asegurarnos que todo se mantenga para la posteridad».
De acuerdo con un registro guardado por un oficial de registros del consejero especial, Weissmann borró el iPhone 7 que le otorgó el gobierno el 8 de marzo de 2018, al introducir incorrectamente su «contraseña demasiadas veces». Borrar un iPhone de esta manera es todo menos accidental porque, debido a los retrasos programados después de demasiados intentos de contraseña errónea, toma más de una hora lograrlo.
Seis meses después, el 27 de septiembre de 2018, Weissmann nuevamente «borró accidentalmente el teléfono celular», según el registro de los oficiales. Borrar un iPhone 7 de cualquier otra manera requiere tocar al menos cuatro selecciones de menú, lo que hace que un borrado «accidental» sea extremadamente improbable.
Además de los al menos 22 teléfonos del equipo del consejero especial Mueller borrados en el curso de la investigación, 44 teléfonos no contenían ningún registro cuando fueron examinados por el oficial de registros, según documentos internos publicados en septiembre. El teléfono de Weissmann, cuando fue revisado el 28 de marzo de 2019, no contenía ningún registro.
Como ejemplo para demostrar que los registros se habían conservado, Weissmann señaló que tuvo que revisar calendarios de cuatro años en respuesta a una citación de Judicial Watch, un organismo de control conservador.
«Nada desapareció en absoluto», dijo Weissmann. «Y por lo tanto ellos son muy conscientes de que tienen todos estos datos y el Departamento de Justicia debe saberlo también y tengo curiosidad por saber por qué no están presentando esa información».
Weissmann no respondió a una solicitud de comentarios.
Además de los 44 teléfonos que no contenían registros, cinco teléfonos contenían solo un registro cada uno y otros cuatro contenían menos de 10 registros por dispositivo.
Los documentos también muestran que, además de los 22 teléfonos borrados, otros cinco teléfonos fueron entregados indebidamente a la Oficina del Oficial Jefe de Información del Departamento de Justicia y borrados antes de que el oficial de registros de la OCS pudiera revisarlos para obtener los datos.
De los 92 iPhones individuales utilizados por el equipo de Mueller, solo 12 parecen haber contenido un número significativo de registros, según determinó una revisión de The Epoch Times de los documentos disponibles.
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