El desarrollador israelí de software espía NSO Group está instando a la Corte Suprema a que lo reconozca como un agente de gobierno extranjero, una medida que, según dice, le daría inmunidad en virtud de las leyes estadounidenses que restringen las demandas contra países extranjeros.
El principal producto de software de NSO, Pegasus, permite a los operadores vigilar clandestinamente el teléfono móvil de un sospechoso, acceder a sus contactos y mensajes, así como a la cámara incorporada, al micrófono y el historial de localización. NSO afirma que solo trata con las agencias gubernamentales encargadas de la aplicación de la ley y que todas las ventas son aprobadas por el Ministerio de Defensa israelí. También se niega a identificar a sus clientes.
La empresa matriz de WhatsApp y Facebook, que se rebautizó a sí misma como Meta Platforms Inc., presentó una demanda contra NSO en 2019, alegando que la empresa atacó a unos 1400 usuarios de su servicio de mensajería encriptada utilizando software espía sofisticado. Meta quiere evitar que NSO acceda a las plataformas y servidores de Facebook y busca una compensación no especificada por daños y perjuicios.
WhatsApp acusó a NSO de irregularidades en un comunicado.
“El software espía de NSO invade los derechos de ciudadanos, de los periodistas y activistas de derechos humanos en todo el mundo, y sus ataques deben detenerse”, dijo WhatsApp. Dos Cortes de EE. UU. ya han rechazado «el artificioso intento de inmunidad de NSO, y creemos que no hay razón para que la Corte Suprema escuche su último intento de evadir la responsabilidad».
Apple demandó a NSO en 2021, alegando que necesitaba hacerlo para evitar que NSO hackeara sus productos, calificando a los empleados de la compañía como «mercenarios amorales del siglo XXI».
Los críticos afirman que algunos clientes de NSO, incluidos Polonia, Arabia Saudita y Jordania, han utilizado los productos de la compañía para espiar a los adversarios y reprimir la disidencia. El Departamento de Comercio de EE. UU. incluyó a NSO en la lista negra, diciendo que sus productos han desempeñado un papel en la “represión transnacional”.
Pero NSO, cercana al gobierno israelí, dice que no puede controlar lo que los usuarios hacen con sus productos y que no ha hecho nada malo.
“Los productos de NSO son utilizados exclusivamente por agencias gubernamentales de inteligencia y aplicación de la ley para combatir el crimen y el terror”, afirma el sitio web de la compañía. Sus productos se han utilizado para prevenir atentados con coches y suicidas, desarticular redes de pedofilia y ayudar a localizar a supervivientes atrapados bajo edificios derrumbados, continúa el sitio web.
Conceder la inmunidad soberana a NSO dificultaría el avance de WhatsApp y podría proteger a NSO de un proceso de investigación que podría identificar a sus clientes y sus secretos comerciales.
La demanda (pdf) en NSO Group Technologies Ltd. vs. WhatsApp Inc., expediente judicial 21-1338, fue registrada el 8 de abril por la Corte Suprema. La compañía está apelando a un fallo adverso de la Corte de Apelaciones de Estados Unidos para el 9º Circuito.
El 8 de noviembre de 2021, el Noveno Circuito votó 3-0 (pdf) para denegar la moción de NSO de desestimar la demanda.
La jueza de circuito Danielle Forrest, quien fue nombrada por el entonces presidente Donald Trump, escribió: “[L]a pregunta que se presenta es si la inmunidad soberana extranjera protege a las empresas privadas. La ley que rige esta pregunta tiene raíces que se remontan a nuestra historia más antigua como nación y conduce a una respuesta simple—no. De hecho, el título de la doctrina legal en sí misma— inmunidad soberana extranjera—indica el resultado”.
Pero en su demanda, NSO afirma que muchos gobiernos nacionales, incluido el de Estados Unidos, dependen de contratistas privados para llevar a cabo o apoyar actividades gubernamentales fundamentales.
“Si dichos contratistas nunca pueden solicitar la inmunidad, como sostuvo el Noveno Circuito, entonces Estados Unidos y otros países pronto podrían encontrar sus operaciones militares y de inteligencia interrumpidas por demandas contra sus agentes”, continúa la demanda.
Los demandados, WhatsApp y Meta, tienen hasta el 9 de mayo para presentar una respuesta ante la Corte Suprema.
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