Agentes del FBI obtuvieron acceso a un teléfono perteneciente a Thomas Crooks, el hombre identificado por las fuerzas del orden como el autor de los disparos contra el expresidente Donald Trump, según informó la oficina en un comunicado del 15 de julio.
Los especialistas continúan analizando el teléfono y otros dispositivos electrónicos que pertenecían al Sr. Crooks, quien fue asesinado a tiros por las fuerzas del orden fuera de un mitin de Trump en Butler, Pensilvania, el 13 de julio después de haber disparado contra el expresidente.
Los agentes completaron una búsqueda en la casa y el vehículo del Sr. Crooks y llevaron a cabo entrevistas con casi 100 agentes de la ley, asistentes al mitin y otros testigos, dijo el FBI. La oficina también está revisando las pistas que han llegado desde el tiroteo, incluyendo fotografías y vídeos de la escena.
Grabaciones a la casa de la familia Crooks mostraban a hombres uniformados hablando con un hombre que había abierto la puerta.
El Sr. Crooks tenía 20 años. Se graduó de Bethel Park High School y trabajó localmente en un hogar de ancianos como ayudante de dieta. Era un republicano registrado que donó a un grupo liberal en enero de 2021.
El Sr. Crooks usó un rifle estilo AR que fue comprado legalmente, según el FBI.
Una de las balas perforó la oreja derecha del expresidente Trump. El expresidente está bien, según su campaña. El lunes apareció con una venda sobre la oreja en la Convención Nacional Republicana.
Corey Comperatore, un exjefe de bomberos de 50 años, también fue alcanzado por una bala y murió. Otros dos hombres, David Dutch, de New Kensington (Pensilvania), y James Copenhaver, de Moon Township (Pensilvania), resultaron heridos y figuraban como estables el domingo.
Los disparos se realizaron desde lo alto de un edificio situado a unos 430 pies de donde estaba hablando el expresidente Trump.
El teniente coronel George Bivens, de la Policía Estatal de Pensilvania, le dijo a la prensa que creía que el edificio estaba fuera del perímetro de seguridad del evento.
“Es increíblemente difícil tener un local abierto al público y asegurarlo contra cualquier posible amenaza de un atacante muy decidido”, afirmó. “Es un desafío enorme intentar hacerlo”.
El Sr. Bivens añadió que una investigación sobre el tiroteo “realmente nos dará la oportunidad de echar un vistazo a donde se produjo cualquier fallo y lo que se puede hacer mejor en el futuro”.
Testigos presenciales de la manifestación afirman que señalaron al Sr. Crooks en el tejado del edificio antes de que se produjeran los disparos, y la policía recibió informes sobre su comportamiento. Un agente de policía del municipio de Butler, que estaba buscando a la persona sospechosa, se encontró con el Sr. Crooks en el tejado pero no se enfrentó a él, sino que se tiró al suelo. Un francotirador mató a Crooks segundos después de que disparara un AR-15 contra el expresidente.
El FBI dijo que los agentes no conocían a Crooks antes del tiroteo y que no ha determinado el motivo del mismo.
Kimberly Cheatle, directora del Servicio Secreto de EE.UU., dijo el lunes que la agencia está trabajando con agencias federales, estatales y locales para entender lo que pasó “y cómo podemos evitar que un incidente como este vuelva a ocurrir”.
Hasta ahora, Cheatle rechazó las peticiones de dimisión y la Casa Blanca ha dicho que el presidente Joe Biden confía en ella.
Los intentos de comunicarse con la dirección correspondiente al Sr. Crooks no han tenido éxito.
Jack Phillips contribuyó a este artículo
Con información de Associated Press
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