Las autoridades federales detuvieron este mes a un varón transgénero sospechoso de múltiples cargos de comunicación de amenazas interestatales violentas, incluida la amenaza de repetir el tiroteo del 27 de marzo en un colegio privado cristiano de Nashville (Tennessee).
La detección de efectuó el 8 de noviembre contra Jason Lee Willie, también conocido como Alexia Willie, acusado de 14 cargos de amenazas interestatales de causar lesiones. Según la acusación, el acusado realizó llamadas a numerosos usuarios de una plataforma de videochat en línea, MeetMe, durante las cuales supuestamente comunicó amenazas de acosar sexualmente a niños, herir y matar a niños y atacar violentamente a otras personas.
Según una proposición de pruebas presentada el 10 de noviembre en apoyo de una petición de la fiscalía para detener al acusado, la empresa matriz de MeetMe se puso en contacto con la Sección de Operaciones contra Amenazas Nacionales del FBI el 14 de agosto para alertarles de los diversos comentarios amenazadores que el acusado supuestamente había hecho en la plataforma.
Los expedientes judiciales indican que el acusado relacionó en ocasiones sus amenazas con el tiroteo de la Covenant School del 27 de marzo, en el que una sospechosa transgénero entró en la escuela privada cristiana de Nashville y mató a seis personas antes de ser abatida por los agentes de policía que acudieron al lugar. En una rueda de prensa inicial sobre el tiroteo en el colegio, el jefe del Departamento de Policía Metropolitana de Nashville, John Drake, dijo que las autoridades estaban investigando si la identidad de género de la sospechosa había contribuido al motivo del ataque. El motivo exacto del sospechoso en el caso del tiroteo sigue sin estar claro, y las autoridades siguen impidiendo que el público vea un manifiesto y otros escritos que dejó el sospechoso.
El escrito de acusación afirma que justo un día después del tiroteo en la escuela de Nashville, el FBI fue alertado de una publicación en Facebook que supuestamente hizo el acusado en la que advertía que se producirían nuevos ataques de mayor envergadura contra cristianos por parte de transexuales. Según la acusación, uno de los cargos a los que se enfrenta el acusado corresponde a una llamada en MeetMe en agosto de este año o alrededor de esa fecha en la que supuestamente dijo: «Una persona en Tennessee entró en una de sus escuelas y disparó a un grupo de sus hijas cristianas. No será la última si no cierras tu [improperio] boca».
En otras llamadas descritas en el escrito de acusación, el acusado supuestamente contó a veces que mantenía relaciones sexuales con niños en los baños. En una llamada, el acusado supuestamente dijo: «Soy abiertamente un pedófilo», mientras que en otra, el acusado dijo: «No soy un pedófilo», pero describió la agresión sexual a niños como un medio para atacar y herir a sus padres. En otras llamadas, el acusado supuestamente describió el asesinato de niños. En otras llamadas, el acusado supuestamente describió el asesinato de niños.
«Hay un montón de transexuales que están hartos de que se metan con ellos y vamos a entrar en las escuelas, vamos a matar a sus [improperio] hijos y se acabó. Estamos en guerra», dijo supuestamente el acusado en una de las llamadas.
En ocasiones, el acusado también dirigía sus amenazas contra miembros de la comunidad negra.
«Escuche, Dave Chappelle y todos los negros de aquí, todos los negros de aquí hablando de transexuales y [improperios], ellos tampoco son diferentes de los supremacistas blancos. Todos se inclinan ante la misma cruz [extiende el dedo corazón]», dijo supuestamente el acusado antes de amenazar más tarde en esa llamada con que «vamos a bombardearlos, vamos a bombardearlos. Vamos a bombardear las iglesias. Vamos a bombardearlas. Lo saben. Vamos a matarlos [improperios]».
En otra llamada, el acusado utilizó repetidamente la palabra con «n», diciendo: «Si pillo tus [improperios] [insultos raciales] en el baño, voy a infectarlos con el VIH, [insulto racial]. Me importa un [palabrota]. Que lo sepan [insulto racial]».
Según el ofrecimiento de pruebas, antes de estas llamadas amenazantes por las que ahora se acusa al implicado, el FBI había sido alertado previamente de comentarios amenazantes que hizo en línea entre 2018 y 2022. En una publicación de Facebook de 2018, el acusado supuestamente afirmó haber matado a un predicador que había abusado de ellos, y en otra publicación de Facebook de junio de 2022, el acusado supuestamente amenazó con desatar una «carnicería» en iglesias y escuelas.
Como parte del caso, los investigadores habían entrevistado a una persona con la que vivía el acusado, Joseph Kennedy. Según las actas judiciales, Kennedy dijo a los investigadores que su compañero de piso se conectaba con frecuencia a Internet para buscar y acosar a republicanos, predicadores y personas de raza negra en particular. Kennedy declaró que también había oído al acusado proferir amenazas contra escolares, pero que nunca identificó ninguna escuela en concreto.
Kennedy dijo a los investigadores que no había armas de fuego en su residencia, pero que el acusado había estado hablando de conseguir un arma de fuego y tratar de «encontrar a estas personas» y «matarlas».
Kennedy dijo que había alertado previamente a las autoridades de la actividad amenazadora del acusado, incluida una llamada del 24 de agosto de 2023 a la oficina del sheriff del condado de Perry en la que Kennedy advertía de que el acusado había descrito cómo aprender a obtener y utilizar armas de fuego para cumplir sus amenazas. Kennedy dijo que el acusado le había amenazado dos veces con matarle mientras dormía.
En una entrevista con la Oficina del Sheriff, Kennedy dijo que había estado trabajando activamente para encontrar asistencia de salud mental para el acusado.
La comunicación interestatal de una amenaza de lesiones es un delito federal que conlleva una pena máxima de cinco años de prisión por delito.
«Las fuerzas del orden se toman muy en serio las amenazas contra los niños e investigarán exhaustivamente a los adultos que amenacen con ponerlos en peligro», declaró sobre el caso la fiscal federal Rachelle Aud Crowe.
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