Trabajadores en Filadelfia retiraron la caja que cubría una estatua de Cristóbal Colón.
Los trabajadores completaron el trabajo el 11 de diciembre, según un vídeo en la Marconi Plaza.
La caja, que tenía los colores de la bandera italiana, fue retirada con una grúa mientras los espectadores vitoreaban.
Un panel de la Corte de la Commonwealth de Pensilvania dictaminó recientemente que la ciudad debe retirar la caja alrededor de la estatua de mármol de 10 pies de altura, que fue erigida hace 146 años en honor a Colón, un explorador italiano, y designada como objeto histórico por la Comisión Histórica de Filadelfia en 2017.
El panel encontró que la ciudad violó una regla sobre cómo se reciben los comentarios del público acerca de propuestas para eliminar obras de arte públicas.
Antecedentes
La estatua de Colón se colocó por primera vez en 1876 en Fairmount Park y se trasladó a la plaza en 1982. Es el punto final del desfile anual de la ciudad en el Día de la Raza, un día festivo que ahora se conoce como el Día de los Pueblos Indígenas en Filadelfia y en algunas otras jurisdicciones.
Después de los enfrentamientos alrededor de la estatua a raíz de la muerte de George Floyd en 2020, el alcalde de Filadelfia, el demócrata James Kenney, pidió a los funcionarios de arte que iniciaran un proceso para retirar la estatua. Junto con sus descubrimientos, señaló Kenney, Colón esclavizó a los nativos.
“Seguramente la totalidad de esta historia debe tenerse en cuenta al considerar si se debe erigir o mantener un monumento a esta persona. Creo que un proceso público que permita todos los puntos de vista, especialmente los de los pueblos indígenas cuyos antepasados sufrieron bajo el dominio de los colonos europeos, redunde en el mejor interés de la Ciudad”, escribió Kenney en ese momento.
Tras el proceso, la comisión histórica votó a favor de retirar la estatua, alegando que mantenerla en pie pondría en peligro la seguridad pública. Varios residentes se opusieron, pero su recurso fue denegado porque no habían planteado cuestiones durante la audiencia de la comisión que incluyó la votación. Los objetores interpusieron entonces una demanda, alegando que la comisión no cumplió la ley en el proceso de retirada, en parte porque no esperó 90 días para recibir comentarios del público, como es requerido.
La jueza del Tribunal de Causas Comunes, Paula Patrick, falló a favor de los objetores, diciendo que la comisión no analizó los atributos de la estatua ni consideró completamente el impacto de una remoción. Patrick también dijo que la comisión no se pronunció sobre la evidencia adecuada “para concluir que la seguridad pública era o es una preocupación constante”.
“Es desconcertante para este tribunal cómo la ciudad de Filadelfia quiere retirar la estatua sin ninguna base legal. Todo el argumento y el caso de la Ciudad carecen de fundamento legal”, escribió Patrick en su decisión.
La ciudad apeló la orden, argumentando que el voto de la comisión fue correcto y no debería bloquearse.
Rechazo
En el fallo reciente, el panel del Estado Libre Asociado dijo que la ciudad claramente no cumplió con la Directiva 67, que establece que el proceso de aporte público debe durar al menos 90 días.
“La solicitud de la Oficina de las Artes de retirar la estatua de Colón de su sitio actual antes de que finalice el período de participación del público violó la Directiva 67. Esto no se puede remediar excepto comenzando el período de participación del público y, esperando hasta que se complete ante la Oficina de Bellas Artes, toma cualquier otra medida con respecto a la remoción de la estatua de Colón de Marconi Plaza, como la presentación de una nueva solicitud a la Comisión Histórica”, dijo la jueza Mary Hannah Leavitt, escribiendo para la mayoría.
Leavitt también dijo que la ciudad podría haber implementado cursos de acción alternativos, como colocar plexiglás alrededor de la estatua o monitorearla con videovigilancia.
En disidencia, el juez Michael Wojcik dijo que la directiva fue suspendida ante la propuesta de retirar la estatua.
«Como resultado, no puede proporcionar una base sobre la que el tribunal de primera instancia pudiera revocar las decisiones administrativas de la ciudad que autorizaban la retirada de la estatua en una apelación a esas decisiones ante ese tribunal», dijo. «En consecuencia, a diferencia de la Mayoría, yo revocaría la orden del tribunal de primera instancia en este asunto”.
Reacción
George Bochetto, un abogado que representa a las personas que apoyan la estatua, dijo que estaba complacido de que ambos tribunales hayan “reafirmado con valentía que el estado de derecho sigue siendo importante”.
“Que no somos una sociedad gobernada por las mafias de la Cultura de la Cancelación. Que todos los grupos étnicos puedan proteger y honrar con orgullo sus diversas herencias”, agregó.
Por otro lado, un portavoz de la ciudad dijo que estaba “muy decepcionado” con el nuevo fallo.
“Seguimos creyendo que la estatua de Cristóbal Colón, que ha sido fuente de controversia en Filadelfia, debería ser removida de su posición actual en Marconi Plaza”, dijo el vocero en un comunicado. “Si bien respetaremos esta decisión, también continuaremos explorando nuestras opciones para encontrar un camino a seguir que les permita a los habitantes de Filadelfia celebrar su herencia y cultura respetando las historias y circunstancias de los diferentes orígenes de todos”.
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