«No lo vas a hacer aquí. Pasarás la Navidad, no con Santa Claus, sino con Santa Judd en la cárcel del condado. Eso es una garantía”, advirtió el alguacil del condado de Polk, Grady Judd, a los delincuentes en una conferencia de prensa el 2 de diciembre con la fiscal general de Florida, Ashley Moody.
A medida que los estados de todo el país sufren un aumento en el crimen organizado dirigido al sector minorista, Moody anunció un nuevo grupo de trabajo estatal para abordar el problema y se comprometió a proporcionar a las fuerzas del orden las herramientas para contrarrestarlo.
“A medida que el crimen organizado ha aumentado, a medida que las redes de robo organizado se han vuelto más complejas y sofisticadas, también lo haremos nosotros”, dijo Moody.
Ella anunció la Central Organizada de Seguimiento a Delitos Minoristas de Florida (TFORCE), un nuevo sistema de base de datos que ayudará a las fuerzas del orden a rastrear los robos minoristas e identificar las organizaciones criminales detrás de ellos.
El grupo de trabajo estará formado por investigadores, abogados estatales, agentes de la ley locales y funcionarios de la Federación de Minoristas de Florida, y representantes de empresas minoristas.
“En esta temporada navideña quiero que los floridanos se sientan seguros cuando vayan a nuestros centros comerciales”, dijo Moody.
Judd dijo que tenía una «tolerancia cero» para los que roban.
«Si un grupo de delincuentes entra en una tienda en el condado de Polk y roba, todos irán a la cárcel», dijo Judd a los periodistas.
Desde que asumió el cargo de fiscal general, Moody dijo que los fiscales estatales han presentado «casi 60 casos que involucran a más de 250 personas sospechosas de robo organizado al por menor o delitos relacionados».
“Se trata de redes masivas, organizaciones sofisticadas con líderes que utilizan a otros, incluidos los jóvenes, de manera coordinada para infiltrarse en numerosas tiendas, dentro de numerosas jurisdicciones, para crear una empresa criminal en la que roban y luego venden mercadería robada”.
Elogió a los funcionarios estatales y locales por hacer un buen trabajo en la prevención de los robos organizados en sus áreas individuales, pero una vez que los delincuentes «salen de una jurisdicción singular, es más difícil descubrir lo que une a las organizaciones para conectar los delitos». Por eso es tan importante esta base de datos».
«Si los dirigentes, los agentes de la ley y los fiscales anuncian a los delincuentes que les están restando importancia a los delitos, como lo que vemos en California, los delincuentes se centrarán en esos delitos para obtener beneficios».
A través de la base de datos TFORCE, los minoristas podrían cargar datos sobre robos recientes en tiendas. Moody dijo que la información era la clave para que las fuerzas del orden pudieran conectar los casos a fin de identificar a los líderes de las organizaciones criminales y las personas que están reclutando para «llevar a cabo sus esquemas».
La fiscalía general y la federación de minoristas gestionarían la base de datos, mientras que TFORCE estaría disponible «por invitación» para los minoristas y las fuerzas del orden que completen una capacitación especializada.
La base de datos consistiría en contenidos sobre artículos robados, descripciones de sospechosos, método de operación y cualquier información de los vehículos usados para los robos, lo que facilitaría la conexión información sobre los incidentes de robos.
Salto de la delincuencia organizada hacía el comercio minorista
La Federación Nacional de Minoristas estimó que el crimen minorista organizado les cuesta a los minoristas un «promedio de USD 700,000 por USD 1000 millones en ventas». También estimó que tres cuartas partes de los minoristas sufrieron un aumento en los robos en 2020, según su encuesta de 2020.
La federación dijo que el crimen era una preocupación creciente para los minoristas y un «tema candente» antes de 2020, pero la pandemia había «llevado a los delincuentes a expandir sus ataques a través de múltiples canales».
En la Encuesta Nacional de Seguridad Minorista de 2021, el 57 por ciento de los minoristas indicó un aumento en tales delitos.
«[Tendremos] una base de datos e intercambio de información, que nos permite rastrear lo que parecen incidentes únicos de robo y… juntar las piezas para identificar las organizaciones criminales a gran escala que están entrando en nuestras tiendas y robando grandes cantidades de mercadería», dijo Moody.
Dijo que los minoristas no son los únicos que sienten los efectos de este tipo de delito.
“Cada mercancía robada se somete a un análisis de costos, lo que aumenta los precios para los floridanos de a pie”.
Barreras a la delincuencia minorista organizada
Durante la conferencia de prensa, el alguacil Judd recordó un incidente en 2019 en el que una camioneta cerca de un Walmart tenía un baúl lleno de televisores nuevos que habían sido robados.
Cuando los gerentes de Walmart se comunicaron con la oficina del alguacil, Judd dijo que comenzaron una investigación y encontraron «una plataforma multimillonaria para el crimen organizado minorista».
Según Judd, seis sospechosos de delitos minoristas estaban «atacando entre ocho y 10 negocios por día en 14 condados de Florida en mayo de 2019».
Calculó que se habían robado 2 millones de dólares en mercancías.
«Tenían un sistema mediante el cual no volvían a la misma tienda hasta que la gente tenía la oportunidad de reponer [lo robado]».
Judd dijo que la red criminal afectó a más de la mitad de los 67 condados de Florida.
«Este grupo de trabajo permitirá que las fuerzas del orden y los minoristas trabajen juntos fácilmente y compartan información y recursos de manera eficiente, para que podamos erradicar y arrestar a estos ladrones, y enviarlos a la prisión donde pertenecen».
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