Un grupo de 13 fiscales generales republicanos criticó la herramienta de declaración de impuestos online gratuita Direct File, que el Servicio de Impuestos Internos (IRS, por sus siglas en inglés) lanzará próximamente, advirtiendo que perjudicará a los estadounidenses con bajos ingresos.
«Nos dirigimos a usted en oposición a los esfuerzos innecesarios e inconstitucionales para facultar al Servicio de Impuestos Internos (IRS, por sus siglas en inglés) con la autoridad expansiva para preparar y presentar declaraciones de impuestos para todos los contribuyentes», dice una carta de 30 de enero de los fiscales generales a la Secretaría del Tesoro. «El Congreso nunca ha concedido al Departamento del Tesoro autoridad para crear un programa de declaración directa. Y por una buena razón: los contribuyentes estadounidenses no quieren invitar al proverbial zorro al gallinero. Un programa Direct File también tendrá consecuencias negativas para los declarantes con bajos ingresos y devastará a las pequeñas empresas».
A principios de este mes, un funcionario del IRS dijo que Direct File estaría ampliamente disponible para los contribuyentes elegibles a partir de algún momento a mediados de marzo, aproximadamente un mes antes de la fecha límite de la temporada de presentación de impuestos 2024 del 15 de abril.
La carta señaló que había un «obvio conflicto de intereses cuando el IRS actúa como preparador de impuestos, declarante y auditor», lo que afectaría más a los estadounidenses de bajos ingresos y vulnerables.
Los legisladores citaron un informe de 2022 de la Universidad de Siracusa según el cual el IRS audita a las familias estadounidenses más pobres «a un ritmo cinco veces mayor» que al resto.
También señalaron un informe de ProPublica en el que se detallaba que los beneficiarios del Crédito Fiscal por Ingreso del Trabajo (EITC, por sus siglas en inglés) eran auditados a un ritmo dos veces superior al de los contribuyentes con ingresos de entre 200,000 y 500,000 dólares. El EITC es un crédito que se concede a los trabajadores con ingresos bajos a moderados y con hijos.
«El programa piloto Direct File se limitará a estos mismos contribuyentes, apoyando sólo deducciones y créditos limitados como el EITC», decía la carta.
«El público estadounidense es justamente escéptico del IRS dado su terrible historial». En 2021, el IRS solo respondió al 2 por ciento de las llamadas recibidas a su línea de ayuda oficial. En 2022, la agencia tenía un retraso de 21.3 millones de declaraciones.
«Si el IRS ya es incapaz de responder a las llamadas más rutinarias de los contribuyentes estadounidenses, Direct File solo exacerbará los fallos de la agencia. Y cuando el IRS no pueda responder a las consultas rutinarias de los contribuyentes estadounidenses sobre Direct File, los estafadores estarán demasiado deseosos de llenar ese vacío», advirtieron los legisladores.
Aunque el IRS contratara a miles de agentes para mejorar su servicio de atención al cliente, estos agentes no podrían ofrecer el mismo nivel de servicio y defensa que los contribuyentes ya reciben de los profesionales fiscales.
Los contribuyentes eligen trabajar con estos profesionales «porque quieren un defensor a su lado que represente sus intereses frente a la burocracia del IRS». Además, el programa Direct File, «amenaza innecesariamente la subsistencia de miles de estos preparadores de impuestos de pequeñas empresas».
Ya en mayo de 2023, apenas unas horas antes de que el IRS anunciara el programa piloto Direct File, la agencia admitió haber auditado históricamente a los contribuyentes negros a tasas más altas que a otros estadounidenses.
«¿Por qué confiaría cualquier estadounidense en que el IRS no abuse de su poder?», cuestionaron los legisladores. «El intento del Tesoro de establecer un sistema Direct File administrado por el IRS elude la autoridad constitucional del Congreso y la voluntad del pueblo estadounidense al establecer unilateralmente un nuevo programa gubernamental y empoderar aún más a un IRS que ha atacado repetidamente a algunos de los contribuyentes más vulnerables».
«Instamos al IRS a identificar y abordar las causas fundamentales de la discriminación histórica de la agencia contra los contribuyentes de bajos ingresos antes de lanzar un sistema supuestamente diseñado para ayudar a estas mismas personas», dijeron.
El IRS no respondió a la solicitud de comentarios de The Epoch Times.
Problemas de demanda y costes
La carta del GOP también destacaba varios problemas con el programa Direct File. «Desde el principio, este proceso ha estado plagado de repetidos pasos en falso y tergiversaciones que ahora exigen supervisión».
Cuando el Congreso aprobó la Ley de Reducción de la Inflación en 2022, destinó 15 millones de dólares a encargar un estudio a un «tercero independiente» para evaluar la viabilidad general de un sistema de preparación de impuestos gestionado por el IRS. Sin embargo, el IRS violó este requisito.
«Contrariamente a ese mandato del Congreso, el IRS eligió a New America —un think-tank liberal—para completar el estudio a pesar de que la organización había apoyado ampliamente un sistema de Direct File gestionado por el IRS en el pasado», decía la carta.
«Como era de esperar, el estudio de viabilidad de New America era profundamente erróneo. Fuentes verdaderamente independientes descubrieron que había problemas tanto con el propio estudio como con un sistema Direct File gestionado por el IRS en general».
Los legisladores citaron un informe de octubre de 2023 del organismo de control del IRS, Inspector General del Tesoro para la Administración Tributaria (TIGTA, por sus siglas en inglés), que afirmaba que la agencia tributaria podría haber «exagerado» el interés de los contribuyentes en Direct File.
La encuesta realizada por el IRS a los contribuyentes mostró que el 72 por ciento expresó interés en una herramienta de Direct File. El informe de TIGTA señaló que sólo el 28 por ciento estaba «muy interesado» en la herramienta, y el 45 por ciento restante sólo «algo interesado».
Además, TIGTA dijo que el IRS no pudo proporcionar «ninguna documentación de apoyo para respaldar sus estimaciones de costes». Las previsiones de costes de la agencia tributaria para la herramienta «no pudieron justificarse» debido a la falta de claridad en cuanto al número de contribuyentes que utilizarían el servicio y los costes previstos relacionados con la atención al cliente y el desarrollo del producto.
Según una estimación del desarrollador de software Govini, el coste de un sistema de declaración gratuito gestionado por el IRS sería similar al del sitio web gubernamental healthcare.gov, que costó más de 21,200 millones de dólares en los primeros 11 años de funcionamiento, señalaron los legisladores.
La carta pedía al IRS que dejara de tomar medidas sobre Direct File hasta que completara un «estudio de viabilidad verdaderamente independiente, tal y como ordenó el Congreso».
Direct File es diferente del actual programa online Free File del IRS. Mientras que Free File sólo está disponible para contribuyentes con ingresos anuales inferiores a 79,000 dólares, la herramienta Direct File está diseñada para ser utilizada por cualquier contribuyente, independientemente de su nivel de ingresos.
Inicialmente, Direct File se pondrá en marcha en una fase piloto en 12 estados: Arizona, California, Florida, Massachusetts, Nevada, Nueva Hampshire, Nueva York, Dakota del Sur, Tennessee, Texas, Washington y Wyoming.
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