Un padre cubano fue arrestado en Florida por dejar sola a su pequeña hija en el auto mientras bajaba a comprar a una tienda de autoservicio.
Raúl Rielo Fernández, de 42 años, fue arrestado por la policía en West Palm Beach luego de dejar a su hija de 3 años en el asiento trasero de su camioneta estacionada en medio del intenso calor, el pasado sábado 18 de mayo, informó CBS 12.
El padre fue de compras a un Sam’s Club y dejó a su hija por aproximadamente 31 minutos en el estacionamiento con el motor apagado y las ventanillas cerradas, según informes de la policía local.
La temperatura habría alcanzado uno 117° F en el interior del vehículo, lo que pudo haber originado una tragedia.
Unas personas escucharon a la niña llorando y se percataron de la peligrosidad de la situación, por lo que decidieron sacar a la niña del auto.
“Cuando encontraron a la niña, estaba sudando profusamente. Estaba roja, irritada y llorando”, dijo al mismo medio Mike Jachles, portavoz del Departamento de Policía de West Palm Beach.
El padre dijo que estaba haciendo unas compras por el día de las madres y presuntamente se habría olvidado que dejó a la niña en la camioneta, según dijo a la policía.
En los videos de seguridad de la tienda, se puede ver al padre caminando en la tienda mientras habla por el celular, y luego su reacción abrupta al salir y darse cuenta que algo estaba sucediendo con la niña.
El padre fue acusado por desatender a un menor en un vehículo motorizado durante más de 15 minutos y negligencia infantil sin grandes daños corporales, un delito grave en tercer grado.
Rielo ingresó a la cárcel del condado de Palm Beach por la noche y fue liberado bajo palabra el domingo por la tarde, informó WPTV.
Un juez habría ordenado al padre que «no tuviera contacto violento con la víctima» según registros judiciales, afirmó el medio.
La ayuda de unos extraños logró evitar que la situación se tornara trágica, ya que los autos pueden convertirse en trampas mortales para los niños que se quedan en el interior a las altas temperaturas.
“En los últimos 25 años, más de 965 niños han muerto por insolación porque quedaron atrapados o abandonados en un automóvil caliente”, según la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en Carreteras.
El riesgo es mayor para los menores, ya que su temperatura tiende a subir más rápido que la de un adulto. En caso de alcanzar los más de 107°F, un niño incluso puede morir por un golpe de calor, afirman las autoridades
Este tipo de accidentes pueden ocurrirle a cualquier persona, pero son totalmente prevenibles.
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