Florida no aceptará licencias de conducir de otros estados a los inmigrantes ilegales

El gobernador Ron DeSantis firma proyectos de ley para endurecer los requisitos de identificación, enviar a prisión a los conductores reincidentes sin licencia y convertir en delito grave la presencia de deportados en Florida

Por John Haughey
15 de marzo de 2024 9:39 PM Actualizado: 15 de marzo de 2024 9:39 PM

WINTER HAVEN, Fla..-Los legisladores de Florida han adoptado algunas de las leyes de inmigración ilegal más restrictivas de la nación en los últimos años y continuaron haciéndolo en 2024 al aprobar medidas que endurecen los requisitos de identificación, castigan con prisión la conducción sin licencia repetida y hacen que estar en Florida después de ser deportado sea un delito grave.

El gobernador de Florida, Ron DeSantis, firmó los proyectos de ley —que entran en vigor inmediatamente— el 15 de marzo, durante una conferencia de una hora en la oficina del sheriff del condado de Polk, en Winter Haven.

Lo acompañaron la vicegobernadora Jeanette Núñez, la fiscal general Ashley Moody, el alguacil del condado Polk Grady Judd, la representante estatal Kiyan Michael y Nikki Jones, cuyo esposo murió en un accidente automovilístico con fuga en 2019 causado por un inmigrante ilegal.

«Si retrocedes seis o siete años en el estado de Florida, no nos inclinábamos en absoluto contra la inmigración ilegal», dijo DeSantis. «De hecho, éramos uno de los estados más débiles con respecto a la inmigración ilegal. Desde que llegamos, hemos hecho cosas como prohibir las ciudades santuario, trabajado en duras penas para las personas que están trayendo fentanilo a nuestra comunidad y … usando cosas como E-Verify».

En mayo de 2023, poco antes de anunciar formalmente que se postulaba para presidente, el Sr. DeSantis firmó lo que llamó «el proyecto de ley contra la inmigración ilegal más fuerte de la nación».

Entre las disposiciones adoptadas en el proyecto de ley 1718 del Senado de 2023 se encuentran la ampliación de E-Verify a los empleadores privados, el aumento de las penas por contrabando de personas y más fondos para enviar a más inmigrantes ilegales a más jurisdicciones santuario.

«El paquete que hicimos el año pasado… incluso The New York Times admitió que era la legislación de inmigración más fuerte de todo el país», dijo el gobernador. «Estamos orgullosos de ello. Estamos orgullosos de que realmente hayamos dado un paso adelante para empoderar a personas como [el sheriff] Grady Judd para mantener su comunidad segura aquí en el condado de Polk».

Manuel Orrego-Savala, de Guatemala, que vivía ilegalmente en los Estados Unidos y conducía sin licencia ni seguro, se declaró culpable en julio de 2018 de conducir ebrio cuando estuvo en una colisión en la que murieron el linebacker de los Indianapolis Colts Edwin Jackson y su conductor de Uber (Policía Estatal de Indiana vía AP, Archivo)

Mantener a los ilegales fuera de las carreteras

Durante su recién concluida sesión de 2024, los legisladores de Florida añadieron otra ronda de legislación que impone más requisitos, restricciones y sanciones a los inmigrantes ilegales.

El proyecto de ley de la Cámara 1449, presentado por Michael, aumenta las penas por conducir sin una licencia de conducir válida, incluyendo una sentencia obligatoria de cárcel después de una tercera reincidencia.

Florida prohibió emitir licencias de conducir a inmigrantes indocumentados en 2022, dijo el gobernador, pero algunos gobiernos locales y organizaciones sin fines de lucro han aceptado licencias de conducir emitidas por otros estados a inmigrantes ilegales.

«No reconocemos las licencias de conducir de otros estados que han sido emitidas a extranjeros ilegales. Así que eso es inteligente», dijo el Sr. DeSantis. «Pero todavía hay gente que viene y conduce sin licencia. Esto va a ser un elemento de disuasión para la inmigración ilegal en el estado de Florida.

«Usted viene aquí», dijo, «usted no está recibiendo una licencia. No vamos a reconocer su licencia de California o la que pueda haber obtenido en un estado santuario. Quiero decir, esto es algo que ha destrozado las vidas de las familias con esta gente haciendo lo que están haciendo».

La familia de Michael es una de las familias cuyas vidas quedaron destrozadas cuando un inmigrante ilegal, sin carné ni seguro, embistió con su vehículo a su hijo de 21 años cuando éste se dirigía, durante su hora de almuerzo, a un banco a cobrar un cheque… «y lo mató» en 2007.

El conductor era un «extranjero ilegal deportado dos veces que llevaba al menos siete años en la zona de Jacksonville» y «no entendía las señales de tráfico», recordó, señalando que solo fue condenado a dos años de cárcel antes de ser deportado y que «probablemente esté de vuelta en Jacksonville ahora mismo».

La pérdida de su hijo la inspiró a postularse para la legislatura estatal en 2022. HB 1449 es un proyecto de ley que ella ha impulsado desde su primer día en Tallahassee.

«La gente quiere darles licencias de conducir. No sé si pensaron en que probablemente no pueden leer nuestras señales», dijo Michael. «¿Por qué quieren que las personas que no están aquí legalmente tengan [licencias de conducir]?

«¿Por qué [los inmigrantes ilegales] creen que tienen los mismos derechos y privilegios que los ciudadanos estadounidenses? No hay ningún ‘derecho’ a entrar en este país. No deberían tener los mismos derechos».

La SB 1036, patrocinada por el senador estatal republicano Blaise Ingoglia, fue aprobada por unanimidad en el Senado en una votación de 32-0 el 1 de marzo y respaldada abrumadoramente en la Cámara de Representantes el 6 de marzo en una votación de 83-20.

El proyecto de ley restringe los documentos que se pueden utilizar para recibir un documento de identidad emitido por el estado y aumenta las penas para los inmigrantes ilegales que vuelvan a entrar ilegalmente en el país después de haber sido deportados.

«Lo que se encuentra en algunos de estos incidentes realmente significativos donde la gente está siendo violada o asesinada es que no es solo un extranjero ilegal, sino que es alguien que ya ha sido deportado de este país, y luego vuelve a cometer crímenes de nuevo», dijo DeSantis. «Así que en el estado de Florida, si has sido deportado, y vienes a este estado, y entras en nuestro estado, y estás aquí ilegalmente, y cometes crímenes, te estamos tirando las leyes.

«Te vas a arrepentir de haber venido al estado de Florida. Así que estoy feliz de firmar esta ley».

SB 1036 también incluye una disposición que eleva las clasificaciones de felonía para «una persona que comete un delito que beneficia, promueve o ayuda a una organización criminal transnacional» con «organización criminal transnacional» definida como una organización que «rutinariamente facilita el tráfico internacional de drogas, seres humanos o armas o el contrabando internacional de seres humanos».

«Los floridanos son casi peligrosamente ingenuos e inconscientes de la magnitud y la malevolencia de la industria de la inmigración ilegal» orquestada por redes criminales transnacionales», dijo Núñez.

«Están utilizando a las personas y a los niños como mercancías», continuó. «Están introduciendo en el país delincuentes peligrosos, armas peligrosas y drogas peligrosas, [introduciendo de contrabando] suficiente fentanilo para matar a más de mil millones de personas».

Las fuerzas del orden de Florida, la policía estatal, la Guardia Nacional de Florida y la Guardia Estatal de Florida están desplegadas en la frontera de Texas. Florida, junto con otros estados republicanos, se ha visto obligada a tomar medidas porque el gobierno federal bajo la administración de Biden ha hecho poco para abordar lo que por sí solo no considera una crisis de seguridad nacional, dijo Moody.

«La ruptura de la frontera, abriendo de par en par las puertas, ha permitido que esos criminales se infiltren en nuestro país», dijo.

«Sabemos que no hay duda de que han entrado o están entrando delincuentes en nuestro país, delincuentes relacionados con organizaciones delictivas transnacionales. De hecho, incluso aquellas organizaciones que tienen vínculos con ISIS» están enviando terroristas potenciales y criminales a los Estados Unidos».

El sheriff tira la bandera

El Sr. Judd dijo que desde 2018, al menos 377,000 estadounidenses han sido asesinados por fentanilo contrabandeado a través de la frontera sur, sin embargo, «algunas personas, algunos de los principales medios de comunicación, algunos de los políticos, algunas de las élites, nos dicen todos los días que no hay una crisis fronteriza». ¿Habéis oído eso? ¿No hay una crisis fronteriza?».
Sacó un banderín cuadrado que decía «BS Flag» y lo agitó. «Yo digo BS, así que saco la ‘Bandera BS’ en eso», dijo, pasándosela a DeSantis.

«Firmado por Grady Judd», reflexionó el gobernador. «Esto podría valer algo en eBay».

El 13 de marzo, el Sr. DeSantis ordenó a la División de Manejo de Emergencias de Florida, la Guardia Estatal de Florida y las agencias policiales estatales que enviaran 250 oficiales y soldados al sureste de Florida «para proteger a nuestro estado» de «una posible afluencia de inmigrantes ilegales» de Haití que buscan escapar de la violencia allí.

El gobernador también autorizó al estado a desplegar unidades aéreas y marítimas en las aguas de los Cayos y el sur de Florida para «complementar los esfuerzos de interdicción de la Guardia Costera de EE.UU., que carece de recursos suficientes».

«No podemos tener extranjeros ilegales viniendo a Florida», dijo DeSantis en un post en X el 13 de marzo.

Con la orden, 39 policías del Departamento de Policía de Florida, 23 oficiales de Pesca y Vida Silvestre de Florida con ocho embarcaciones, 48 Guardias Nacionales con aviones y aviones no tripulados, 30 policías estatales y 133 miembros de la Guardia Estatal de 12,000 soldados de Florida se unirán a la Guardia Costera y otras agencias que patrullan la costa atlántica de Florida.

Durante una audiencia celebrada el 12 de marzo en el Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes sobre los retos para la seguridad nacional en el hemisferio occidental, el Reps. Matt Gaetz ( R-Fla.) y Carlos Giménez (R-Fla.), ex alcalde del condado de Miami-Dade, presionaron a la Subsecretaria de Defensa Rebecca Zimmerman sobre cómo respondería la administración Biden en caso de que se produjera una «migración marítima masiva» desde Haití.

«Por el momento, todavía no hemos visto grandes números, lo que caracterizaríamos como una ‘migración marítima masiva’, pero estamos alerta ante esa posibilidad», dijo Zimmerman.


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