La fiscal general de Florida, Ashley Moody, dio a conocer el 3 de diciembre las herramientas online que los trabajadores pueden usar para reportar fácilmente violaciones a una nueva ley. La nueva ley requiere que los empleadores acepten exenciones a las órdenes de vacunación.
Los nuevos documentos online explican claramente las reglas y el proceso para los empleados que desean optar por no recibir las vacunas anti-COVID y describen la forma en que se manejarán las infracciones. COVID-19 es la enfermedad causada por el virus del Partido Comunista Chino (PCCh).
Al definir claramente el proceso y proporcionar enlaces a formularios fáciles de completar, Moody no solo le ha dado «fuerza a la nueva ley, sino que también proporciona algunas herramientas legítimas a los empleados no vacunados que enfrentan condiciones de trabajo discriminatorias», dijo Jeff Childers, un abogado de Florida Central.
Ya están llegando quejas sobre los empleadores, dijo Lauren Cassedy, portavoz de Moody.
Desde principios de 2020, Childers ha representado a individuos y grandes grupos, luchando contra las órdenes de uso de mascarillas y vacunas.
Reunió a los 40,000 lectores de su blog coffeeandcovid.com para presionar a los funcionarios electos con una campaña de llamadas telefónicas pidiendo una sesión especial para crear esa ley y otras relacionadas con el COVID-19.
El gobernador de Florida, Ron DeSantis, finalmente convocó a la sesión especial que Childers y sus lectores habían pedido y, cuatro días después, los legisladores estatales entregaron cuatro proyectos de ley, incluido uno para proteger a los trabajadores que rechazan la vacuna anti-COVID.
Otro proyecto de ley les dio a los padres el derecho a decidir si sus hijos debían o no usar mascarillas en las escuelas.
DeSantis firmó los proyectos de ley en una ceremonia el mes pasado, en Brandon, Florida. Las leyes entraron en vigor de inmediato. Los lectores de Childers enviaron rápidamente USD 60,000 en donaciones a la campaña de reelección de DeSantis como muestra de agradecimiento. Las donaciones podrían atribuirse al esfuerzo del grupo porque cada donación individual costaba al menos USD 12.
Las directrices publicadas durante el fin de semana dan a los empleados y contratistas acceso a los formularios de exención a las vacunas para satisfacer sus necesidades individuales, según lo definido por una nueva norma estatal de emergencia.
Las pautas enumeran las razones permitidas para las exenciones y explica cómo un empleado puede presentar una queja contra un empleador después de ser despedido por no recibir una vacuna.
Las empresas privadas que emplean a menos de 100 personas pueden enfrentarse a una multa de hasta USD 10,000 por infracción.
Las multas para empresas más grandes son de hasta USD 50,000 por infracción.
Los empleadores públicos, incluidas las instituciones educativas o gubernamentales, ahora también tienen prohibido imponer mandatos de vacunación en Florida.
Las infracciones de los empleadores públicos pueden denunciarse al Departamento de Salud de Florida a través de [email protected].
El estado considera que un empleado está “despedido” incluso si la persona renuncia después de que el empleador dificulta o hace intolerable las condiciones de trabajo.
Para un procesamiento más rápido, los empleados pueden presentar una queja online. Las quejas también se pueden enviar a [email protected], o por correo al Departamento de Asuntos Legales, Programa de Orden de Vacunas para Empleadores Privados. Para el martes por la mañana, ya estaban llegando quejas sobre empleadores que no cumplían con el requisito, dijo Lauren Cassedy, portavoz de la oficina del fiscal general.
Childers busca proporcionar ayuda de bajo costo, posiblemente, con chats de vídeo grupales, a las personas que están temerosas con respecto al diligenciamiento de los formularios.
Brindó asesoramiento legal gratuito y pagado de esa manera cuando los empleados tenían que redactar sus propias solicitudes para no actuar en conformidad a las órdenes de vacunación laborales a principios de la pandemia.
Pero los nuevos formularios proporcionados por el estado son fáciles de entender, dice, y «no solicitan ninguna información confidencial». Eso es importante por cuestiones de privacidad, dijo.
El nuevo proceso funcionará de esta manera: Después de recibir una queja, el Departamento de Asuntos Legales de Florida (DLA) alertará al empleador, quien tiene 20 días para enviar una respuesta por escrito.
Después de evaluar a ambas partes, si parece que el empleador violó la nueva ley de exención, la DLA presentará una demanda contra el empleador en la División de Audiencias Administrativas (DOAH) del estado.
La DLA mantendrá al tanto a los empleados que presenten quejas.
Los trabajadores que han presentado quejas sobre sus empleadores le han comentado sobre una amplia variedad de preocupaciones a Childers:
Uno le contó sobre una nueva política de su oficina que exige que los no vacunados usen una mascarilla, un protector facial o gafas protectoras cuando estén a menos de dos metros de los demás. Debido a que los escritorios están a menos de dos metros entre sí, será una necesidad para todo el día, todos los días. Los trabajadores no vacunados no pueden comer ni beber cerca de los demás, lo que significa que no se permitirán las pausas con comida o bebida ni el almuerzo en el lugar de trabajo. Está prohibido el almuerzo con compañeros de trabajo.
Otro cliente no vacunado informó que enfrentaba un recargo de USD 100 por mes para tener beneficios médicos proporcionados por el empleador, y USD 125 más por mes por agregar un cónyuge, dijo Childers,
Otro cliente trabaja para un condado de Florida. La política del condado exige que cualquier empleado no vacunado expuesto al COVID-19 en el trabajo use el tiempo legal que se les otorga cuando se enferman para una cuarentena obligatoria de 14 días, incluso si no presentan síntomas. Los empleados vacunados podrán ponerse en cuarentena mediante «licencia administrativa con sueldo».
Otro cliente se lamentó: «Nuestro departamento de recursos humanos destruyó el formulario [de exención del Departamento de Salud de Florida] que entregué personalmente».
Otro se quejó: «Nuestro hospital exige que los empleados que obtienen la exención usen mascarillas, se hagan la prueba dos veces por semana, coman por separado y usen algo que indique que no están vacunados».
Claramente, estos empleadores están violando la nueva regla del estado, dijo Childers. Y ahora hay un castigo claro para los empleadores que lo ignoren.
“Una de las mejores cosas de la regla es que dice que las políticas excesivas contra los trabajadores no vacunados es lo mismo que el despido”, escribió Childers en su blog.
«Define el ‘equivalente funcional del despido’ como cuando ‘el empleador, a través de sus acciones, crea condiciones de trabajo tan difíciles, o intolerables, que lleva a una persona razonable en la posición del empleado a sentirse obligada a renunciar'».
Los empleados que hayan rechazado la vacuna y enfrenten consecuencias desagradables deben notificar a su empleador que «si no se cambian las odiosas políticas, el empleado planea renunciar y presentar una queja ante la DLA».
Childers dice: «Esa es una amenaza con algunos dientes, y los empleadores tendrán que pensar seriamente en cuánto realmente quieren castigar a los empleados por no recibir vacunas en lugar de arriesgarse a fuertes multas».
A los activistas conservadores les preocupaba que los formularios fueran intrusivos, posiblemente recopilando información privada sobre creencias religiosas o información médica para una base de datos estatal, dijo Childers. «Esas preocupaciones estaban fuera de lugar».
La facilidad para obtener la exención de los mandatos de vacunas es «una victoria espectacular para la libertad individual, la autonomía corporal y la privacidad, y también es completamente consistente con la protección total de los intereses de privacidad personal de la Constitución de Florida», dice Childers.
«Siempre debió haber sido así de sencillo».
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