El gobernador republicano de Florida, Ron DeSantis, firmó el 2 de mayo un proyecto de ley que prohíbe los programas de «adoctrinamiento» para profesores.
La medida, HB 1291, prohíbe que los programas, cursos y planes de estudio en la formación del profesorado «distorsionen» acontecimientos históricos o promuevan ideologías políticas en materia de raza, sexo y género.
Las instituciones postsecundarias acreditadas pueden solicitar la aprobación del Departamento de Educación de Florida para crear institutos que eduquen a los profesores en la mejora de la enseñanza en el aula y el cumplimiento de los requisitos para la certificación o recertificación.
También pueden solicitar la aprobación para impartir formación a los profesores sustitutos actuales y potenciales sobre cómo desempeñar sus funciones en el aula y para enseñar a los licenciados a obtener la certificación.
Sin embargo, no se permitirá que los programas de preparación, capacitación y certificación de maestros enseñen «política de identidad» o hagan afirmaciones de que el racismo sistémico, el sexismo, la opresión o el privilegio blanco son inherentes a la cultura de Estados Unidos.
Además, la oficina del gobernador DeSantis dijo en un comunicado que está trabajando con la oficina de la fiscal general Ashley Moody para salvaguardar a la fuerza laboral de Florida de ser objeto de discriminación ideológica y acoso.
El gobernador dijo que no cree que las empresas tengan derecho a obligar a sus empleados a asistir a cursos de formación diseñados para convencerles de que son «inherentemente racistas o sexistas» o para disminuir su sentido de autoestima debido a su educación religiosa o social.
En una rueda de prensa y ceremonia de firma en la Torre VyStar en Jacksonville, el Sr. DeSantis dijo que no quería que los programas de preparación de maestros «se conviertan en cautivos de la agenda ideológica de alguien».
«Este proyecto de ley prohíbe el adoctrinamiento en la preparación del profesorado», resumió. «Así que no va a haber DEI [diversidad, equidad e inclusión]. No habrá ninguna historia falsa. Simplemente va a ser estándar, preparación del profesorado sin tener una agenda ideológica».
La ley entra en vigor el 1 de julio.
Hay que ser preciso
En una entrevista concedida a The Epoch Times, Jonathan Butcher, investigador principal Will Skillman sobre política educativa en The Heritage Foundation, afirmó que la legislación contiene ambigüedades que deben resolverse.
En la introducción del proyecto de ley no queda claro qué tipo de profesores están sujetos a los mandatos. Dijo que no es hasta la lista que figura al final de la segunda página del proyecto de ley cuando se sabe que se aplica a los profesores sustitutos, a los ayudantes de profesores, a los licenciados que quieren convertirse en profesores titulados y a los graduados universitarios que no se especializaron en educación.
Se aplica a los profesores a tiempo parcial y a tiempo completo, no titulados, de «programas de carrera» asociados a programas de educación superior, como las escuelas técnicas superiores.
Teniendo en cuenta el contexto de este proyecto de ley, dijo, será importante asegurarse de que las definiciones son claras y que la aplicación se mantiene «dentro de los límites de la ley de derechos civiles apropiados».
«Hay que ser preciso en el lenguaje», dijo. «Creo que la intención del proyecto de ley es loable. Está claro que los programas de formación del profesorado utilizan regularmente materiales de naturaleza marxista».
«Cuando nos fijamos en los términos utilizados en estas disposiciones», explicó, corresponderá al Consejo Estatal de Educación decir con mucha precisión lo que quieren decir con ‘política de identidad’ y lo que quieren decir con la palabra ‘distorsionar’, porque el lenguaje dice que ‘no pueden distorsionar acontecimientos históricos significativos’”.
«Deberían definir todo eso. ¿Qué significa ‘distorsionar’? ¿Qué significa ‘significativo’?».
Otras partes de la legislación, dijo, son sólidas, como el requisito de que los cursos de formación para profesores no pueden enseñar a los alumnos que Estados Unidos está construido sobre el racismo y es una nación racista.
Señaló que «Pedagogía del Oprimido»»de Paulo Freire ha sido uno de los libros más asignados en los programas de formación de profesores durante 50 años.
«Lo de Pablo Freire es marxista. La teoría crítica de la raza es racialmente discriminatoria», dijo.
Los programas federales de subvenciones también fomentaban la enseñanza de la teoría crítica de la raza hasta que la reacción pública hizo que eliminaran las palabras de las descripciones de las subvenciones. Pero simplemente cambiaron el nombre por el de aprendizaje socioemocional.
El Departamento de Educación de Estados Unidos anunció en 2023 que la administración del presidente Joe Biden iba a conceder USD 14 millones en subvenciones federales para fomentar programas de diversidad más inclusivos que aborden la desigualdad racial.
Las subvenciones ofrecidas por organizaciones sin ánimo de lucro como FIRST también impulsan las políticas de DEI en la educación.
«No cabe duda de que los programas de formación del profesorado utilizan ideas radicales que se transmiten a los futuros docentes», afirma Butcher.
El Sr. Butcher añade que espera que la ley sea impugnada por grupos de izquierda cuyo objetivo, según él, es establecer clases protegidas, no la igualdad ante la ley.
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