Aunque la administración Biden ha impuesto la vacunación obligatoria a los ciudadanos estadounidenses, miles de inmigrantes ilegales están siendo liberados entre la población sin requisitos de vacunación. Mientras tanto, la cifra de crímenes violentos está aumentando en áreas donde se están asentando los inmigrantes ilegales. Algunos lo llaman «extremadamente frustrante». Otros lo llaman «pura estupidez».
Mindy Hodge de Clermont en el condado de Lake, Florida, ha hecho seguimiento a las cifras sobre inmigración ilegal en su área. Su interés en rastrear las estadísticas comenzó cuando su suegro resultó herido en un accidente automovilístico en Lake Worth cuando su auto fue atropellado por un vehículo conducido por un inmigrante ilegal. La persona que chocó contra el vehículo de su suegro no tenía licencia de conducir ni seguro, por lo que su suegro tuvo que asumir el costo de reemplazar su vehículo y pagar sus propias facturas médicas con provisiones de su propia póliza de seguro.
«Eso me ofendió mucho», dijo Hodge a The Epoch Times, y agregó que el incidente la inspiró a comunicarse con un amigo que era un oficial de policía retirado, quien le dijo que «esto sucede todo el tiempo».
“Ellos se involucran en accidentes automovilísticos, hieren gravemente a la gente, matan a la gente”, dijo Hodge que su amigo le contó sobre su experiencia en la aplicación de la ley. “Luego se les dice que comparezcan ante el tribunal por conducir imprudentemente, conducir sin licencia, homicidio vehicular, y luego simplemente se van y regresan a México o América Central y nunca hay rendición de cuentas”.
Luego, Hodge comenzó a realizar su propia investigación, ingresando al sitio web de la oficina del alguacil local para encontrar estadísticas de su propio condado.
“Comencé a tener un horario de viernes a domingo cada semana”, dijo Hodge, y explicó que lo que veía que sucedía con regularidad era que entre el 10 y el 15 por ciento de las personas que eran arrestadas en su condado todos los fines de semana estaban aquí ilegalmente.
“Esa es una de las cosas que nuestro condado tiene en su sitio web: su estado de ciudadanía”, dijo Hodge.
“No somos un condado enorme, como Orange o Miami-Dade, pero somos un condado de buen tamaño y me sorprendió que del 10 al 15 por ciento de nuestros recursos policiales se estuvieran utilizando para tratar con personas que estaban aquí ilegalmente, a menudo siendo arrestados varias veces”, dijo Hodge. “Como ciudadana, solía pensar que si estabas aquí ilegalmente, o incluso con una visa de trabajador, si te atrapaban cometiendo un delito, te enviaban de regreso. Descubrí muy rápidamente que ese no era el caso en absoluto y es extremadamente frustrante para las fuerzas del orden».
Hodge dijo que con respecto a la cantidad de arrestos de inmigrantes ilegales desde el comienzo de la crisis fronteriza de este año, no son tanto las cifras como la gravedad de los delitos lo que ha aumentado.
«Solían ser detenidos por DUI (conducir bajo la influencia) o conducir sin licencia», dijo Hodge. «Ahora estamos viendo muchas agresiones agravadas y mucha violencia doméstica».
El aspecto sorprendente para Hodge ha sido el creciente número de mujeres arrestadas por delitos cada vez más violentos.
«Mujeres involucradas en violencia doméstica, mujeres involucradas en asalto agravado», compartió Hodge. “Los delitos se están volviendo más graves que simplemente conducir sin licencia o emborracharse en un bar y conducir. Se están volviendo más violentos».
“Con este último grupo de haitianos, una gran cantidad de ellos fueron enviados a Orlando”, dijo Hodge. “El condado de Lake está justo al lado del condado de Orange, así que estamos como a 20 minutos de Orlando, y me parece muy interesante que la Casa Blanca diga que tenemos un enorme problema de COVID en Florida, y que [el gobernador] Ron DeSantis está matando personas y lo llaman ‘DeathSantis’, y Jen Psaki, la secretaria de prensa, dice que DeSantis no está protegiendo a los residentes de Florida; sin embargo, no sometieron a pruebas a ninguna de estas personas. No los obligaron a vacunarse y luego los enviaron a Orlando, el lugar que dicen que es tan peligroso”.
«Todo por diseño»
Según el representante de Florida Anthony Sabatini (Distrito 32), la medida para asentar a un gran número de inmigrantes ilegales en los estados rojos es «todo por diseño».
«Ellos están trayendo a tantos inmigrantes ilegales como pueden para que puedan aumentar sus listas de votantes», dijo Sabatini a The Epoch Times, y agregó que lo están haciendo «para que puedan conseguir más demócratas» y «más personas maleables que harán lo que sea que las corporaciones ‘woke’ quieran que hagan».
“Ese es todo el plan”, dijo Sabatini. “Todo es por diseño. Aquí no hay accidentes. Son los demócratas al servicio de sus amos corporativos».
Cuando se le preguntó sobre la aparente contradicción de que la administración de Biden imponga mandatos de vacunas a los ciudadanos estadounidenses mientras permite que miles de inmigrantes ilegales no vacunados se filtren sin control en la población estadounidense, Sabatini dijo que «en realidad no les importa la COVID».
“La COVID no es una preocupación real para ellos”, dijo Sabatini. “Ellos usan la COVID como pretexto para aumentar el control del gobierno, el tamaño del gobierno, el gasto del gobierno, la supervisión del gobierno y simplemente para aumentar su propio poder. Pero en términos de tratar de eliminar realmente la propagación de COVID, obviamente no están interesados en eso por la forma en que están lidiando con estos inmigrantes ilegales. No están interesados en la COVID. Están interesados en la mano de obra barata de inmigrantes ilegales y en aumentar el tamaño del gobierno».
Según Sabatini, los funcionarios de Florida preguntaron a la patrulla fronteriza el mes pasado cuántos de los 180,000 inmigrantes ilegales estimados que están llegando al país cada mes terminaron en Florida.
“Ellos dijeron que aproximadamente la mitad de los inmigrantes ilegales tenían como objetivo ir a Florida”, dijo Sabatini. “Así que serían entre 70,000 y 80,000 inmigrantes ilegales que llegan a Florida cada mes. Creo que una estimación conservadora y baja es que recibimos alrededor de 50,000 inmigrantes ilegales en Florida cada mes».
Cuando se le preguntó cuántos de estos 50,000 inmigrantes ilegales estimados por mes tienen antecedentes penales o son pandilleros conocidos, Sabatini dijo que “una gran cantidad” de ellos entran en esa categoría. “La verdad es que el simple hecho de venir los convierte en criminales. Es un crimen cruzar la frontera ilegalmente, así que todos son criminales en ese sentido”.
En respuesta a la afluencia, la fiscal general de Florida presentó una demanda contra la administración Biden por ignorar las leyes federales de inmigración, y DeSantis emitió una orden ejecutiva (pdf) que prohíbe a las agencias estatales ayudar en el reasentamiento ilegal de inmigrantes ilegales en el Estado del Sol.
«El hecho de que la administración Biden esté imponiendo mandatos a los ciudadanos estadounidenses y no imponiendo el mismo mandato a los inmigrantes ilegales es una prueba más de que las decisiones de su administración tienen más que ver con la política y menos con la seguridad de los estadounidenses durante una pandemia», dijo Blaise Ingoglia, representante de Florida (Distrito 35), a The Epoch Times. “Casi todas las decisiones de la administración Biden, ya sea por diseño o por pura estupidez, perjudican a nuestras pequeñas empresas y a las mujeres y hombres que trabajan duro y que mantienen nuestra economía en funcionamiento. La gente del sector privado lo sabe. Ya es hora de que los burócratas de DC se den cuenta de esto también».
«Creo que exigir una vacuna sin tener en cuenta la inmunidad natural es incorrecto tanto por motivos políticos como éticos», dijo Ingoglia. «Florida lo sabe. Esa es una de las razones por las que rechazamos los mandatos. Al final, creo que los tribunales tomarán la decisión correcta y se demostrará que Florida y el gobernador DeSantis tienen razón una vez más”.
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