UVALDE, Texas— El director del Departamento de Seguridad Pública de Texas, Steve McCraw, admitió el viernes que fue una «decisión equivocada» no enfrentarse antes al tirador masivo de Texas, Salvador Ramos.
Cuando se le preguntó por qué la policía en la Escuela Primaria Robb no actuó más rápido, McCraw dijo a los periodistas en una conferencia de prensa que «el comandante en la escena en ese momento creyó que había pasado de un tirador activo a un sujeto atrincherado».
«Se tomó la decisión en la escena —yo no estaba allí— de que se trataba de una situación de un sujeto atrincherado que había tiempo para recuperar las llaves y esperar a que un equipo táctico se adelantara y abriera la puerta y se enfrentara al sujeto», dijo. «En ese momento, esa fue la decisión, ese fue el proceso de pensamiento».
McCraw dijo en una retrospectiva que «no fue la decisión correcta, fue una decisión equivocada y mucho. No había excusa para eso», refiriéndose a una falta de participación de Ramos antes. «Yo no estaba allí, así que solo le digo que por lo que sabemos, creemos que debió haberse entrado lo antes posible», dijo a continuación.
Finalmente, para entrar en el aula de la escuela primaria Robb los agentes utilizaron una llave proporcionada por un conserje. Ramos disparó cerca de 100 balas durante todo el incidente, reveló el director de la agencia, diciendo que se basaron en las pruebas del audio.
En el incidente del martes, Ramos mató a 19 niños y dos adultos en el peor tiroteo masivo en una escuela de Estados Unidos en una década. Las autoridades dijeron que el adolescente, que recientemente cumplió 18 años, no mostraba signos de problemas de salud mental aunque fue descrito como un solitario que tenía problemas en la escuela.
El adolescente entró en la escuela primaria Robb de Uvalde a través de una puerta que fue abierta por un profesor minutos antes, añadió McCraw, indicando sin decir el por qué, que tampoco había un oficial de recursos escolares en la escuela. El oficial respondió más tarde cuando alguien llamó al 911, añadió.
Antes de que Ramos entrara en el edificio, el agente pasó inadvertidamente por delante del sospechoso, que estaba escondido detrás de un coche. En su lugar el agente se enfrentó a un profesor que creía que era el sospechoso, dijo McCraw a los periodistas.
Alrededor de las 11:27 a.m. del martes, la maestra abrió la puerta de la Escuela Primaria Robb, llegando aproximadamente un minuto antes de que Ramos estrellara su vehículo en las cercanías, dijo McCraw. La misma maestra unos dos minutos después, a las 11:30 a.m., reportó el choque y a un hombre con un arma, aunque no quedó claro por qué la maestra no cerró la puerta.
McCraw no proporcionó más detalles sobre por qué en primer lugar la puerta estaba abierta o por qué el oficial de recursos escolares se enfrentó al profesor.
Gemma López, una niña de 10 años sobreviviente del ataque, dijo que escuchó a Ramos decir a los agentes de la ley que respondieron al tiroteo «déjenme en paz, por favor».
La niña dijo a ABC News que apagó la luz de su aula después de que una «bala atravesara la pared».
«Yo escuché a los oficiales gritar al tirador (…) para que bajara el arma de fuego y luego el tirador dijo «déjenme en paz por favor» y entonces comenzó a disparar».
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