El asesor de seguridad nacional del presidente electo Donald Trump, el representante Mike Waltz (R-Fla.), dijo en una entrevista publicada el viernes que se espera que los funcionarios del Consejo de Seguridad Nacional (NSC) renuncien un minuto después de la toma de posesión de Trump, el 20 de enero.
«Todo el mundo va a renunciar a las 12:01 del 20 de enero», dijo Waltz a Breitbart News. «Estamos trabajando a través de nuestro proceso para conseguir que todos tengan sus autorizaciones y a través del proceso de transición ahora. Nuestra gente sabe a quién queremos fuera en las agencias, estamos presentando esas solicitudes, y, en cuanto a los agentes, todos van a regresar».
Aunque no entró en detalles sobre cómo lograría esto la próxima administración Trump, Waltz dijo que quiere asegurarse de que los empleados del NSC tengan «muy claro» cuál es «la agenda» de la próxima administración.
«Es un proceso bastante sencillo», dijo Waltz. «Como una buena parte del NSC son destacados, salidos de las agencias, nuestro equipo sabe a quién queremos traer y estamos haciendo esas peticiones y vamos a traerlos».
El NSC implica a un equipo de cargos políticos que son dirigidos por el consejero de seguridad nacional, que será Waltz, para supervisar a varios funcionarios de inteligencia asignados al NSC que trabajan en varias agencias y departamentos de todo el gobierno federal. El actual asesor de seguridad nacional del presidente Joe Biden es Jake Sullivan, que anteriormente había desempeñado diversos cargos en la administración Obama.
Agregó que «hubo algunas dificultades en la primera administración (de Trump)» porque algunos funcionarios no necesariamente se adhirieron a las decisiones de Trump como comandante en jefe.
«Eso es todo, desde la política nuclear, la política cibernética, las pandemias —tiene la gripe aviar rebotando un poco— y luego las estrategias regionales que se alinean con su agenda», dijo Waltz. «La frontera, la deportación, Permanecer en México, realmente reintroducir el liderazgo estadounidense en el hemisferio occidental de nuevo como han oído de él sobre Canadá, Groenlandia, el Canal de Panamá».
The Epoch Times se puso en contacto con el equipo de transición de Trump y con la Casa Blanca para obtener comentarios adicionales el viernes, pero no recibió respuesta al momento de la publicación de este artículo.
Propuesta sobre Groenlandia
Esta semana, Waltz pareció adelantar algunas de las medidas que podría tomar poco después del día de la investidura, dando a entender que los recientes comentarios de Trump sobre que Estados Unidos arrebataría Groenlandia a Dinamarca parecen ir en serio.
Durante una entrevista con Fox News, se le preguntó a Waltz sobre el hecho de que Trump quisiera que Estados Unidos controlara la isla ártica.
«Tienes a Rusia que está intentando convertirse en el rey del Ártico, con más de 60 rompehielos, algunos de ellos nucleares», dijo el jueves. «Nosotros tenemos dos, y uno acaba de incendiarse».
Waltz añadió: «Se trata de minerales críticos. Se trata de recursos naturales. Se trata de que, a medida que retroceden los casquetes polares, los chinos están fabricando rompehielos y empujando hacia allí también. Así que se trata de petróleo y gas. Es nuestra seguridad nacional».
El primer ministro groenlandés, Mute Egede, ha declarado que la isla no está en venta. Groenlandia, que forma parte de la OTAN gracias a la pertenencia de Dinamarca, se extiende a ambos lados de la ruta más corta entre Europa y Norteamérica y es estratégicamente importante para el ejército estadounidense y su sistema de alerta temprana de misiles balísticos.
En una amplia conferencia de prensa esta semana, Trump dijo a los periodistas que no utilizaría la fuerza militar para tomar el control de Groenlandia, que ha sido un territorio autónomo supervisado por Dinamarca durante siglos y que también forma parte de la Unión Europea.
Con información de Reuters
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