El gobernador de Texas, Greg Abbott, promulgó otras dos órdenes ejecutivas contra la influencia del Partido Comunista Chino (PCCh) en su estado, tras anunciar una primera orden el 18 de noviembre destinada a proteger a los disidentes locales del acoso del régimen chino.
El 20 de noviembre, Abbott firmó la Orden Ejecutiva nº GA-49 para proteger las infraestructuras críticas de los ciberataques y el 19 de noviembre emitió la Orden Ejecutiva nº GA-48 para proteger a los tejanos de las operaciones de espionaje del PCCh.
La Orden Ejecutiva nº GA-49 ordena a la División de Gestión de Emergencias de Texas y a la Comisión de Servicios Públicos de Texas que se preparen para cualquier posible ciberataque dirigido contra las infraestructuras críticas del estado.
En virtud de la orden de Abbott, ambos organismos crearán un grupo de trabajo para estudiar las posibles vulnerabilidades de los sistemas gubernamentales y las infraestructuras críticas, realizarán simulacros de respuesta a ciberataques y reunirán a un comité de organismos estatales para «simular un reinicio de la red eléctrica de Texas en caso de ataque extranjero», según un comunicado emitido el miércoles.
«China ha dejado claro que puede atacar y atacará las infraestructuras críticas de Estados Unidos», afirmó Abbott en el comunicado. «Texas continuará protegiendo nuestras infraestructuras críticas para garantizar la seguridad de los tejanos frente a posibles amenazas del Partido Comunista Chino o de cualquier gobierno extranjero hostil».
La orden destacaba a Volt Typhoon, uno de los grupos de amenazas patrocinados por el Estado chino, y cómo había atacado sistemas de comunicaciones, energía, transporte, agua y aguas residuales en Estados Unidos y sus territorios.
Volt Typhoon, que fue desmantelado por una operación de varias agencias en enero, había mantenido «acceso y puntos de apoyo dentro de algunos entornos informáticos de las víctimas durante al menos cinco años», dijo en febrero la Agencia de Ciberseguridad y Seguridad de las Infraestructuras.
La orden también citaba las advertencias del director del FBI, Christopher Wray, en la Cumbre Vanderbilt de Nashville en abril, cuando dijo que China «ha dejado claro que considera cada sector que hace funcionar nuestra sociedad como juego limpio en su intento de dominar en el escenario mundial».
Actores extranjeros hostiles
La Orden Ejecutiva nº GA-48 ordena a todas las agencias estatales e instituciones públicas de enseñanza superior que «endurezcan» sus sistemas frente a posibles infiltraciones de naciones hostiles, lo que incluye una comprobación más exhaustiva de los antecedentes de los empleados y contratistas estatales que puedan acceder a infraestructuras críticas.
Además, se prohibirá a los organismos estatales contratar a «empresas que sean propiedad o estén controladas por un gobierno extranjero adversario, y las empresas licitadoras deberán demostrar que ‘ninguna de sus sociedades de cartera o filiales es propiedad de un gobierno extranjero adversario'», según una declaración del martes.
Se prohíbe a los miembros del profesorado de las instituciones de enseñanza superior participar en «cualquier programa de contratación extranjero de una nación adversaria extranjera», como el Programa de los Mil Talentos de China, según la declaración.
El Programa de los Mil Talentos es una de las muchas iniciativas de captación de talentos que el régimen chino mantiene desde hace décadas para atraer a expertos chinos y extranjeros a trabajar en los sectores científico y tecnológico de China. A través de estos programas, el PCCh espera convertir rápidamente a China en una potencia industrial y de innovación y, en última instancia, superar a los países occidentales.
El FBI advierte en su página web de que los programas de talentos chinos suponen una amenaza para la seguridad nacional de Estados Unidos y suelen implicar «transferencias no reveladas e ilegales» de propiedad intelectual estadounidense a la parte china.
«La Oficina Federal de Investigación informó de que el gobierno chino ha apuntado activamente a funcionarios locales y estatales como parte de su estrategia para socavar la seguridad nacional de Estados Unidos», dijo Abbott en un comunicado.
«Endurecer nuestro gobierno estatal es fundamental para proteger a los tejanos de actores extranjeros hostiles que puedan intentar socavar la seguridad de Texas y de la nación».
Como ejemplo de la infiltración del PCCh, la orden de Abbott señalaba la reciente imputación contra Linda Sun, ex subjefa de gabinete de la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul. Sun fue acusada de espiar para Beijing.
Otro nombre mencionado en la orden es el de Christine Fang, una presunta agente de inteligencia china que, según la oficina de Abbott, «desarrolló profundas conexiones» con figuras políticas de California y políticos nacionales.
«Texas está liderando la ofensiva»
El lunes, cuando Abbott anunció la Orden Ejecutiva nº GA-47, la oficina local del FBI en Houston acudió a la plataforma de redes sociales X para instar a las víctimas a que se presentaran.
«El gobierno de la República [Popular] de China (RPC) puede estar acosando cibernéticamente, intimidando físicamente y hostigando a ciudadanos chinos, ciudadanos estadounidenses naturalizados y familias de disidentes que hablan en contra del Partido Comunista Chino en Texas», escribió la oficina.
En virtud de la orden de Abbott, el Departamento de Seguridad Pública de Texas perseguirá y detendrá a cualquier persona que participe en operaciones de influencia del PCCh en el estado.
El grupo de defensa de los uigures Campaign for Uyghurs, con sede en Washington, aplaudió el lunes en X la decisión del gobernador, afirmando que el PCCh sigue llevando a cabo su «nefasta práctica» de represión transnacional en Texas.
Un ejemplo de la represión transnacional de Beijing salió a la luz en abril del año pasado, cuando dos ciudadanos chinos fueron acusados de establecer presuntamente una comisaría secreta en Manhattan en coordinación con el Ministerio de Seguridad Pública de China.
El representante Michael McCaul (R-Texas), presidente de la Comisión de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes, emitió el miércoles un comunicado en el que aplaudía el liderazgo de Abbott.
«Texas está liderando la ofensiva contra el PCCh con la ayuda del liderazgo del gobernador Abbott», declaró McCaul. «No podemos quedarnos de brazos cruzados mientras China intenta infiltrarse en nuestro país y dañar la seguridad nacional de Estados Unidos».
«Estas órdenes ejecutivas envían un fuerte mensaje de disuasión al PCCh: No te metas con Texas».
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