El gobernador de Arkansas, Asa Hutchinson, firmó el viernes un proyecto de ley que protege a los proveedores de atención médica de la discriminación si se niegan a prestar servicios médicos por razones religiosas o morales.
El proyecto de ley, conocido como la Ley de Ética Médica y Diversidad, establece que los médicos y otros trabajadores de salud tienen el derecho de no participar en un servicio de atención médica si viola su conciencia. La legislación pretende proteger el derecho de conciencia e impide que otros discriminen a un médico que ejerza sus derechos de conciencia.
La ley, sin embargo, establece una excepción que impide a los profesionales sanitarios de fe negar la atención médica de urgencia.
«Sopesé este proyecto de ley con mucho cuidado, y cabe señalar que me opuse al proyecto de ley en la sesión legislativa de 2017. El proyecto de ley se modificó para garantizar que el ejercicio del derecho de conciencia se limite a las ‘objeciones basadas en la conciencia a un servicio de atención médica particular'», dijo Hutchinson en una declaración.
Hutchinson se opuso a una medida similar en 2017 que fracasó ante un comité de la Cámara y dijo que la nueva ley que firmó es más estrecha y limita las objeciones a casos de servicios de atención médica particulares y no a dar tratamiento a tipos específicos de personas.
«Apoyo este derecho de conciencia siempre y cuando la atención de emergencia esté exenta y la objeción de conciencia no pueda ser utilizada para negar el servicio de salud general a cualquier clase de personas. Lo más importante es que las leyes federales que prohíben la discriminación por motivos de raza, sexo, género y origen nacional siguen aplicándose a la prestación de servicios sanitarios», añadió.
La ley también crea una vía para que los trabajadores sanitarios que sean discriminados puedan demandar por daños y perjuicios debido a la violación de la ley.
Quienes se oponen a la ley, como la Human Rights Campaign (Campaña de Derechos Humanos) y American Civil Liberties Union (Unión Americana de Libertades Civiles), dijeron que la legislatura permitirá a los médicos negarse a ofrecer una serie de servicios a los pacientes LGBTQIA+. La Cámara de Comercio del estado también se opuso a la medida, diciendo que envía el mensaje equivocado del estado.
Ellos también argumentaron que los tipos de atención médica que podrían ser interrumpidos incluyen el mantenimiento de los tratamientos hormonales para los pacientes transgénero que necesitan atención hospitalaria para una infección, o los servicios de apoyo emocional para una pareja del mismo sexo. Ellos también dijeron que podría ser utilizado para negarse a llenar las recetas de control de la natalidad, o por los asistentes de los médicos para negarse a anular las directivas del paciente en la atención al final de la vida.
La directora ejecutiva de la American Civil Liberties Union de Arkansas, Holly Dickson, criticó el proyecto de ley, pero no indicó si la organización tiene intención de impugnar la ley.
Previamente Hutchinson firmó una ley que prohibiría a los hombres biológicos participar en deportes femeninos. Desde entonces se le acusó de atacar a la comunidad LGBTQIA+, sin embargo, el gobernador también dijo que su prioridad es aprobar un proyecto de ley de crímenes de odio, que pretende proteger a las personas que son atacadas por su raza, etnia u orientación sexual. Los esfuerzos para aprobar el proyecto de ley se estancaron en la legislatura de mayoría republicana.
Con información de The Associated Press.
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