Desafiando la amenaza de una demanda legal del presidente Donald Trump, el gobernador de Nevada Steve Sisolak firmó el 3 de agosto una ley que permitiría a todos los residentes del estado emitir su voto por correo durante las elecciones del 2020.
La nueva ley fue aprobada apresuradamente por la legislatura de Nevada en una sesión especial convocada por Sisolak el 30 de julio. Bajo la nueva ley, cada residente del estado puede recibir una boleta por correo. Una estipulación aparte otorga a Sisolak, y no al secretario de estado de Nevada, el poder de determinar cómo se lleva a cabo una elección en caso de emergencia.
«Esta ley ayudará a evitar que los residentes de Nevada experimenten las largas colas en los lugares de votación que enfrentaron durante la elección primaria, lo que protegerá su seguridad, salvaguardará su derecho a hacer oír su voz y ayudará a reducir la propagación de COVID-19», dijo Sisolak en Twitter.
El presidente Donald Trump y el fiscal general Barr han advertido en repetidas ocasiones que las leyes de voto por correo en blanco, como la de Nevada, aumentarían el riesgo de fraude electoral.
Trump había amenazado con llevar al estado a la corte la mañana previa a la firma de Sisolak.
«En un golpe ilegal a última hora de la noche, el gobernador de Nevada hizo imposible que los republicanos ganen el estado», escribió Trump en Twitter el 3 de agosto. «La oficina de correos nunca pudo manejar el tráfico de votos por correo sin preparación. Usando Covid para robar el estado. ¡Nos vemos en la Corte!»
El Departamento de Justicia, que se encargaría de cualquier cuestionamiento jurídico en nombre de la administración Trump, no respondió inmediatamente a una solicitud de comentarios.
Hillary Clinton ganó Nevada por 2.5 puntos en 2016.
Ambas cámaras de la legislatura estatal de Nevada están controladas por los demócratas. La medida de votación por correo fue aprobada por la asamblea estatal el 31 de julio y por el senado estatal el 2 de agosto.
Los republicanos se opusieron unánimemente a la medida en ambas cámaras.
Los demócratas generalmente argumentan que el fraude electoral no existe y que la oposición republicana a las medidas de voto por correo es un intento de impedir que la gente participe en las elecciones. Los republicanos argumentan que las boletas de voto por correo abren la puerta a una serie de esquemas fraudulentos.
«Tendrás a alguien como el gobernador de Nevada con este plan masivo, de la nada, para tomar millones de boletas y enviarlas por todo el lugar. Nunca sabrás quién ganó ese estado. Se arruinará como Nueva York y como Paterson, N.J., y como muchos otros lugares», dijo Trump el 3 de agosto antes de que Sisolak firmara el proyecto de ley.
La Casa Blanca no respondió a la solicitud de comentarios.
Estados Unidos ha tenido 1290 casos comprobados de fraude electoral, según una base de datos gestionada por la Fundación Heritage, de tendencia conservadora.
Matthew Vadum contribuyó a este informe.
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