El gobernador de Texas, Greg Abbott, ha promulgado una nueva ley destinada a limitar la exposición de los niños a espectáculos de drags u otras actuaciones sexuales en propiedad pública o empresas de todo el estado.
El proyecto de ley 12 del Senado (pdf) prohíbe que determinados «espectáculos de contenido sexual» tengan lugar en lugares públicos, en las instalaciones de una empresa comercial o en presencia de menores de 18 años.
Según el proyecto de ley, un «espectáculo de contenido sexual» se define como un espectáculo visual en el que el artista está desnudo, es un artista masculino que se presenta como mujer, o una artista femenina que se presenta como hombre y lleva ropa, maquillaje u otros signos físicos similares, y que canta, hace playback, baila o actúa de otro modo ante el público y «apela al interés lascivo por el sexo».
Dichas actuaciones también estarían tipificadas como delito si se ajustan a otras definiciones de «conducta sexual», incluidos los actos sexuales reales o simulados o el contacto real o simulado que se produzca entre una persona y las «nalgas, pechos o cualquier parte de los genitales de otra persona», entre otras.
Las empresas que infrinjan el proyecto de ley corren el riesgo de tener que pagar una multa de 10,000 dólares, mientras que los artistas a los que se sorprenda infringiendo las nuevas restricciones podrían ser acusados de un delito menor de clase A, que se castiga con hasta un año de cárcel y una multa de 4000 dólares, independientemente de que hayan sido o no remunerados por la actuación.
Abbott promulgó la ley el 18 de junio y entrará en vigor el 1 de septiembre.
Niños «sexualizados por los espectáculos drag»
Los republicanos del estado, incluido el vicegobernador de Texas, Dan Patrick, han argumentado que la legislación es necesaria para proteger a los niños de presenciar comportamientos inapropiados en tales espectáculos.
«Me resulta impactante que un padre permita que su hijo sea sexualizado por espectáculos de drags», declaró Patrick el 28 de mayo. «Los niños, que no pueden tomar decisiones por sí mismos, deben ser protegidos de esta plaga a la que se enfrenta nuestro estado».
Los legisladores demócratas, entre ellos el senador Royce West, de Dallas, también han mostrado su apoyo al proyecto de ley.
«Creo que es importante enviar el mensaje de que, aunque apoyamos el derecho de una persona a dedicarse al drag, no lo aprobamos en presencia de menores de 18 años», declaró West a The Dallas Morning News a principios de abril.
Sin embargo, los defensores del colectivo LGBT y los artistas drag han condenado la legislación.
«Creemos que se trata de un lobo con piel de cordero que sigue teniendo como objetivo a las travestis y a la comunidad LGBTQ+», declaró Brian Klosterboer, abogado de la ACLU de Texas, a The Texas Tribune en mayo.
Klosterboer añadió que cree que el vago lenguaje del proyecto de ley «permitirá al fiscal general, a los gobiernos locales y a los fiscales y a la policía tener esta discreción casi ilimitada para reprimir cualquier actuación que consideren sexual».
Prohibición de los Procedimientos de Transición de Género
Texas es el último estado en adoptar una legislación que restringe las actuaciones de drags, siguiendo los pasos de Florida, Montana y Tennessee, aunque el proyecto de ley de este último estado está actualmente en suspenso después de que un juez federal dictaminara que era inconstitucional.
Pocos días antes de promulgar la Ley 12 del Senado, Abbott firmó otra ley que prohibía a los varones biológicos que se identificaran como mujeres competir en deportes universitarios femeninos.
Esa legislación, conocida como «Ley para Salvar el Deporte Femenino», tiene por objeto proteger la integridad del deporte femenino, según el gobernador republicano, y se basa en la legislación anterior aprobada por Abbott en 2021, que prohíbe a los hombres y niños que se identifiquen como mujeres en las escuelas K-12 participar en equipos deportivos que no coincidan con su sexo biológico.
La nueva ley también entra en vigor el 1 de septiembre.
A principios de este mes, Abbott también promulgó una ley que restringe los procedimientos y tratamientos de transición de género, incluidos los bloqueadores de la pubertad y la terapia hormonal sustitutiva, para los menores del estado.
Conocida como Proyecto de Ley del Senado 14, esa legislación prohíbe a los médicos realizar determinados procedimientos y tratamientos relacionados con la transición de género, la reasignación o la disforia de género a menores de 18 años, como la castración, la vasectomía, la vaginoplastia y la histerectomía.
También restringe el uso de fondos públicos o ayudas públicas para tales procedimientos.
Docenas de otros estados, como Nebraska, Florida y Oklahoma, han presentado leyes similares para evitar que los menores tomen decisiones médicas que pueden alterar sus vidas y ser fatales. Los legisladores de esos estados señalan que no existen pruebas científicas sólidas que sugieran que los llamados procedimientos de «afirmación del género» ayuden a los niños a superar la disforia de género, y que en algunos casos pueden empeorar sus problemas de salud mental.
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