El gobernador republicano de Nevada y la gobernadora demócrata de Arizona redactaron conjuntamente una carta dirigida al gobernador de California, Gavin Newsom, en la que expresan su preocupación por la legislación propuesta para la sesión especial sobre el precio de la gasolina convocada por Newsom a finales del mes pasado.
El gobernador de Nevada, Joe Lombardo, y la gobernadora de Arizona, Katie Hobbs, enviaron la carta el 10 de septiembre en respuesta a la sesión legislativa extraordinaria convocada para abordar “el pernicioso problema de las subidas del precio de la gasolina en los surtidores”, según un comunicado de prensa de la oficina de Newsom.
“Aunque podemos tener diferentes agendas políticas como gobernadores, todos compartimos un sincero interés por las preocupaciones y el bienestar de nuestros electores”, escribieron los gobernadores.
“Sin duda, todos compartimos la preocupación por el elevado coste del combustible y su impacto en las comunidades de nuestros estados. Sin embargo, nos preocupa que el inventario obligatorio de las refinerías aumente directamente el coste del combustible para todos nuestros electores y cree una mayor inestabilidad económica en la región”.
Se trata del proyecto de ley X2-1 de la Asamblea, presentado anteriormente como proyecto de ley 950 del Senado, que no fue aprobado por la legislatura antes de la fecha límite del 1 de septiembre.
El proyecto de ley pretende crear un comité consultivo de expertos de seis miembros con autoridad para regular e imponer obligaciones de inventario a las refinerías. Al exigir a las refinerías que retengan combustible en el mercado, el proyecto de ley trataría de mitigar los picos de precios que se producen cuando el mantenimiento planificado y no planificado afecta al suministro de gas.
Newsom les dijo a los periodistas en una conferencia de prensa sobre un tema diferente el 4 de septiembre que la legislación es necesaria porque la “codicia” de las compañías petroleras hace que los precios se disparen en ciertas épocas del año.
“Vamos a avanzar para abordar una cuestión preocupante que afecta a todos y cada uno de los californianos, y es el abuso de las petroleras”, dijo.
“Esta es la época del año en la que tenemos mantenimiento planificado y no planificado en las refinerías, lo que dispara el coste de la gasolina y los beneficios de quienes realizan el mantenimiento… Cinco empresas tienen el 90 por ciento de la cuota de mercado en el sector de las refinerías”.
Los gobernadores de los países vecinos del este y sureste de California pidieron a Newsom que se replanteara la legislación.
“Le pedimos que reevalúe la obligatoriedad del inventario de las refinerías y retrase la adopción de medidas sobre este tipo de legislación hasta que se mantengan conversaciones exhaustivas sobre políticas con los líderes de la industria y nuestras oficinas estatales de energía”, dice la carta.
“Tanto la Oficina de Resiliencia de la gobernadora de Arizona como la Oficina de Energía del gobernador de Nevada están dispuestas a ayudar a encontrar soluciones energéticas regionales viables que conduzcan a la reducción de los costes de combustible”.
Las normativas sobre refinerías y los mandatos de inventario podrían provocar escasez de suministro, sugirieron Lombardo y Hobbs, lo que a su vez provocaría un aumento de los precios para los consumidores de algunos estados que dependen de la gasolina procedente de California.
“Dado que nuestros dos estados dependen de los oleoductos de California para obtener cantidades significativas de nuestro combustible, estos inminentes aumentos de costes y la escasez de suministro son motivo de gran preocupación para Arizona y Nevada”, escribieron. “Para aumentar aún más nuestra preocupación, las refinerías han hecho sonar la alarma sobre escasez de suministro y posibles cierres de refinerías debido a los mandatos de inventario, lo que tendría graves consecuencias para nuestras economías compartidas y la infraestructura de transporte en todo el Oeste”.
Además, los gobernadores destacaron un informe publicado recientemente por la Comisión de Energía de California, en el que se enumeran como posibles inconvenientes el coste de mantener un almacenamiento adicional, así como el riesgo de que suban los precios.
“Si las refinerías retienen existencias para mantener el mínimo, se puede crear artificialmente escasez en los mercados posteriores [porque] las refinerías pueden tener que retener un envío para mantener las existencias mínimas legales, lo que podría hacer que una terminal funcionara por debajo de lo esperado”, decía el informe.
Ante la posibilidad de que el aumento de los costes de las refinerías repercuta en los consumidores, los gobernadores afirman que las conclusiones del informe son alarmantes.
“Esta conclusión por sí sola es muy preocupante y justifica una comunicación bipartidista y regional sobre esta legislación antes de seguir adelante”, afirman los gobernadores en su carta.
En un comunicado de prensa fechado el 10 de septiembre, el gobernador de Nevada afirmó que conseguir unos precios más bajos de los carburantes es un objetivo de ambos partidos y prometió oponerse a la agenda de California, que en su opinión afectará negativamente a los residentes de su estado.
El gobernador de Arizona dijo que las presiones inflacionistas son un reto para las personas y pidió que los líderes de toda la región suroeste hagan más para ayudar a los consumidores.
“Los habitantes de Arizona están luchando contra el alto coste de la vida, no podemos permitirnos otra subida de precios”, dijo Hobbs en el mismo comunicado.
Un legislador de California dijo que resolver el problema del precio de la gasolina es una cuestión bipartidista y advirtió que los conductores de otros estados se están viendo afectados por las políticas del Estado Dorado.
“Gente de todo el espectro político se está dando cuenta de los peligros de este plan egoísta”, dijo el líder republicano de la Asamblea de California, James Gallagher, a The Epoch Times por correo electrónico el 11 de septiembre. “La propia administración de Newsom afirma que su maniobra corre el riesgo de provocar escasez de combustible y subidas del precio de la gasolina, y no sólo los conductores de California pagarían el precio. Los conductores de California necesitan un respiro ante los altos costos de la gasolina, no esquemas peligrosos que podrían empeorar el problema”.
Los líderes republicanos en la legislatura también enviaron una carta a Newsom el 29 de agosto, citando preocupaciones sobre el plan para regular los inventarios de las refinerías. La carta pedía aclaraciones sobre el impacto del proyecto de ley en los precios al por menor de combustible y el plan de Newsom para mitigar la escasez de combustible.
Los legisladores también pidieron al gobernador que conciliara las políticas de contaminación atmosférica, que aumentan intencionadamente los precios, con el objetivo de la Comisión de Energía de estabilizar los precios del combustible.
El proyecto de ley propuesto, decía la carta, “no hará nada para resolver los problemas que causan que los precios de la gasolina en California sigan estando entre los más altos de la nación”.
Newsom no respondió a la solicitud de comentarios de The Epoch Times al cierre de esta edición.
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