El secretario del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés), Alejandro Mayorkas, dijo que el gobierno federal y su agencia evaluarán si se debe utilizar un sistema tipo «pasaporte de vacunación» para los viajeros que entran y salen de Estados Unidos.
El DHS es la agencia que supervisa a la Administración de Seguridad del Transporte (TSA), que supervisa a los pasajeros en todos los aeropuertos de EE.UU.
En una entrevista con ABC News el viernes, Mayorkas dijo que Estados Unidos está considerando la posibilidad de exigir pasaportes de vacunas para viajes internacionales.
“Estamos analizando muy de cerca eso, ya sabes, uno de nuestros principios que nos ha guiado durante esta pandemia es el valor de la diversidad, la equidad y la inclusión, y asegurarnos de que cualquier pasaporte que proporcionemos para las vacunas sea accesible a todos y que nadie esté privado de sus derechos”, dijo Mayorkas, refiriéndose a las restricciones que se implementaron durante la pandemia.
El secretario dijo que dicho sistema, que ha sido señalado por grupos de libertades civiles como una posible invasión de la privacidad, está diseñado para vacunar a las personas contra el COVID-19.
«Hay un punto subyacente aquí, por supuesto, que es que todos deberían vacunarse», dijo Mayorkas.
La Unión Europea, algunos gobiernos asiáticos y la industria de las aerolíneas están luchando para desarrollar pasaportes de vacunas anti-COVID para ayudar a reiniciar los viajes internacionales. Estos gobiernos están trabajando en sistemas que permitirían a los viajeros utilizar aplicaciones de teléfono móvil para demostrar que han sido vacunados, ayudándoles a evitar los requisitos de cuarentena en sus destinos.
Los comentarios de Mayorkas parecen ir en contra de lo que la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, les dijo a los reporteros a principios de este mes. La secretaría reiteró que la administración Biden todavía no apoya ningún sistema federal de pasaportes de vacunas.
«No ha cambiado nuestra opinión de que el gobierno federal no desempeñará ese papel», dijo Psaki en respuesta a una pregunta de los periodistas a principios de este mes. «Las empresas privadas pueden impulsar al sector privado a avanzar en las acciones, que es donde pensamos que se deben centrar las iniciativas».
En marzo, Psaki dijo que «actualmente existe un proceso interinstitucional que está analizando muchas de las preguntas sobre la verificación de vacunas» y agregó que «una determinación o desarrollo del pasaporte de la vacuna o como quieran llamarlo será impulsado por el sector privado», en lugar del gobierno federal.
Los sistemas de vacunas tipo pasaporte se han convertido en un punto de controversia, con varios estados liderados por republicanos que prohíben a los gobiernos estatales y locales implementarlos. Algunos estados también se han movido para evitar que las empresas privadas también utilicen sistemas de pasaportes.
En Florida, el gobernador Ron DeSantis, un republicano, firmó una orden ejecutiva que prohibía los pasaportes de vacunas, diciendo que las vacunas no son «requeridas por ley» y que «los registros de vacunación son información de salud privada» que no debe compartirse por mandato. También ha argumentado que esos sistemas separarían a las personas en clases «no vacunadas» y «vacunadas».
The Epoch Times se ha puesto en contacto con la Casa Blanca para solicitar comentarios al respecto.
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