Las autoridades californianas han acordado pagar 800,000 dólares en concepto de honorarios de los abogados de la parte vencedora a una popular megaiglesia cristiana de Los Ángeles, después de que los tribunales estatales y federales de California emitieran órdenes judiciales permanentes que prohíben a los funcionarios del gobierno de ese lugar volver a imponer restricciones discriminatorias a los lugares de culto.
En Estados Unidos, los litigantes que no tienen éxito solo tienen que pagar los honorarios legales de sus oponentes, incluso cuando sus casos son débiles.
Aunque en otras partes de la anglosfera, como el Reino Unido y Canadá, es habitual que la parte que no tiene éxito en un litigio civil tenga que pagar las costas legales del litigante que ha tenido éxito, es «muy raro» que ocurra en Estados Unidos, dijo Paul Jonna, consejero especial de la Thomas More Society, a The Epoch Times.
La Thomas More Society, un bufete nacional de abogados de interés público, representó a la Grace Community Church (GCC) y al pastor John MacArthur en los procedimientos legales que se iniciaron en marzo de 2020, cuando California y los gobiernos locales iniciaron una amplia respuesta para combatir el SARS-CoV-2, el virus del PCCh que causa la COVID-19. Los funcionarios del gobierno trataron repetidamente de impedir la asistencia presencial a las iglesias tras el inicio de la pandemia.
El 31 de agosto, la Junta de Supervisores del Condado de Los Ángeles votó para aprobar el acuerdo con GCC y MacArthur. Según el acuerdo, el condado pagará 400,000 dólares, y el estado de California pagará otros 400,000 dólares como compensación por los honorarios de los abogados de GCC y MacArthur.
MacArthur se mostró satisfecho con el acuerdo sobre los honorarios.
«Estamos muy agradecidos por la protección y la providencia de nuestro Señor a lo largo de este último año», dijo MacArthur en una declaración.
«Nuestro compromiso con la Palabra de Dios y su iglesia nunca ha flaqueado. Simplemente hemos seguido manteniéndonos firmes, como siempre lo hemos hecho y siempre lo haremos. Ponemos nuestra confianza en el Señor Jesucristo, que es la cabeza de la iglesia. Durante el año pasado, nuestra congregación ha visto su mano de bendición de una manera como nunca antes, y la promesa del Señor se ha hecho realidad: ‘Construiré mi iglesia y las puertas del Hades no la dominarán'».
El consejero especial de la Thomas More Society, Charles LiMandri, dijo en una declaración: «Este fue un caso muy reñido en cada paso del camino. El pastor MacArthur y la Grace Community Church se negaron a doblegarse ante la tiranía del gobierno y finalmente obtuvieron el excelente resultado que merecían. Gracias a su valor y perseverancia, la justicia prevaleció y la Primera Enmienda fue reivindicada. El Condado de Los Ángeles y el Estado de California ya no pueden tratar a las personas de fe como ciudadanos de segunda clase. Este resultado es una victoria para todos los estadounidenses que aprecian la libertad religiosa».
Si los funcionarios del gobierno se hubieran negado a llegar a un acuerdo sobre la cuestión de los honorarios legales después de haber recibido órdenes judiciales en su contra, los tribunales probablemente les habrían ordenado pagar una suma mayor de la que finalmente acordaron, dijo Jonna.
La otra parte «sabía que se iba a exponer a importantes honorarios de abogados si no llegaba a un acuerdo en estos casos».
«La regla general en la legislación estadounidense es que cada parte corre con sus propios honorarios», dijo Jonna.
«En los casos de derechos civiles, un demandante que prevalezca y que reivindique un derecho constitucional tiene derecho a una adjudicación de honorarios también, y la razón es animar a la gente a presentar casos con fundamento que reivindiquen estos importantes derechos constitucionales».
En el acuerdo que se cerró, «nadie admitió nada», pero «obviamente» las acciones emprendidas contra la iglesia fueron «claramente represalias», dijo Jonna.
Hace un año, el condado canceló abruptamente un contrato de arrendamiento de un espacio de estacionamiento que la iglesia había estado utilizando desde 1975, como informó The Epoch Times en su momento.
«Si se observa el momento, no había ninguna base para revocar el contrato de arrendamiento más que para intimidarlos», dijo Jonna.
Los funcionarios también trataron de intimidar a MacArthur, amenazándole con penas de cárcel y citaciones, dijo el abogado.
La Thomas More Society utilizará los 800,000 dólares para ayudar a financiar otros casos legales, dijo Jonna.
El bufete de abogados sin ánimo de lucro «fue capaz no solo de proteger estos importantes derechos, sino de recuperar una suma significativa para guardarla básicamente para financiar otros casos futuros».
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