ANCHORAGE, Alaska — En una historia más propia de un melodrama que de una votación popular, Grazer ganó el martes su segundo concurso del Oso Gordo al derrotar al monstruo macho que mató a su cría este verano.
Grazer venció a Chunk por más de 40,000 votos emitidos por los aficionados que veían en directo las cámaras de atexplore.org del Parque Nacional y Reserva de Katmai, en Alaska.
Los aficionados votaron por Internet a su competidor gordito favorito en unas eliminatorias al estilo de un torneo que empezaba con 12 osos. Eligieron al oso que, a su juicio, mejor ejemplifica la preparación para el invierno por la grasa que acumuló durante el verano alimentándose del salmón rojo que regresa al río Brooks.
Los osos se posan a menudo en lo alto de una cascada del río y capturan en el aire los salmones que intentan saltar la cascada para desovar río arriba.
Aquí es donde murió el osezno de Grazer tras resbalar por la cascada y morir a manos de Chunk, quizá el oso pardo más dominante del río. Grazer luchó contra Chunk para salvar al osezno, pero éste murió más tarde. La muerte fue captada por las cámaras en directo.
Otra muerte fue captada en directo por las cámaras la semana pasada, lo que retrasó un día la publicación del cuadro del torneo. La osa 402, una hembra que iba a participar en el concurso de este año murió a manos de un oso pardo macho el día en que se esperaba que se publicaran los resultados.
Grazer tiene unas llamativas orejas rubias y un hocico largo y recto, según su biografía en explore.org. «Es una presencia formidable en el río Brooks. Su intrepidez y su fuerza le valió el respeto de la mayoría de los osos, que evitan enfrentarse a ella», dice la página.
El otro osezno superviviente de su tercera camada quedó segundo hace dos semanas en el concurso Fat Bear Junior.
Según su biografía, Chunk es quizá el oso más grande del río, con ojos achinados, pelaje marrón oscuro y una característica cicatriz en el hocico. Este año aprovechó su tamaño para ascender a lo más alto de la jerarquía fluvial y se aseguró los mejores puestos de pesca.
«La confianza y la agresividad de Chunk dieron sus frutos, permitiéndole darse un festín de 42 salmones en 10 horas», dice. «Su éxito físico es evidente en su voluminosa figura».
Los machos adultos de oso pardo suelen pesar entre 270 y 410 kilos a mediados de verano. Cuando están listos para hibernar después de darse un festín de salmones migratorios y de desove —cada uno come hasta 30 peces al día— los machos grandes pueden pesar más de 454 kilos. Las hembras son un tercio más pequeñas.
El concurso anual, que obtuvo más de 1.3 millones de votos el año pasado, es una forma de celebrar la resistencia de los 2200 osos pardos que viven en la reserva de la península de Alaska, que se extiende desde el extremo suroeste del estado hacia las islas Aleutianas.
Además de las cámaras en directo, Katmai se convirtió en un destino turístico de primera categoría y se construyeron puestos de observación en el río para que las personas pueda ver a los osos pardos pescar salmones.
Por Mark Thiessen
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