Científicos que pasteurizaron leche con gripe aviar altamente patógena, descubrieron restos de cantidades detectables de la gripe tras aplicar el tratamiento térmico, según un estudio publicado el 14 de junio.
Vincent Munster, científico del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas (NIAID), y otros investigadores afirmaron que los resultados apuntan a la necesidad de seguir investigando sobre la gripe, también conocida como gripe aviar o H5N1, y la leche.
El grupo tomó H5N1 y lo diluyó en leche de vaca cruda y sin pasteurizar. A continuación, trataron térmicamente la leche a 145 grados Fahrenheit y 161 grados Fahrenheit. La leche comercial debe pasteurizarse a una de estas tres temperaturas: 145 grados durante 30 minutos, 161 grados durante 15 segundos o 191 grados durante un segundo.
Las pruebas indicaron que el nivel más bajo de pasteurización sería suficiente debido al tiempo que requiere ese nivel, pero los científicos encontraron cantidades detectables del virus en la leche tratada a 161 grados tras 20 segundos de tratamiento térmico.
«Este hallazgo indica la posibilidad de que una cantidad relativamente pequeña pero detectable del virus H5N1 siga siendo infecciosa en la leche después de 15 segundos a 72℃ si los niveles iniciales del virus son suficientemente altos», escribieron el Sr. Munster y los demás autores.
El artículo fue publicado por la revista New England Journal of Medicine. En los formularios de divulgación figuraban los empleos de dos autores en organismos ajenos al NIAID como conflictos de intereses.
Entre las limitaciones se incluye el uso de muestras de leche cruda con el virus, ya que la leche cruda de vacas infectadas con el virus H5N1 podría tener una composición diferente.
El trabajo, financiado por el gobierno, puede no ser aplicable a la leche comercial porque se realizó en el laboratorio, subrayaron los investigadores. Afirmaron que los resultados ponen de manifiesto la necesidad de seguir investigando.
«Es necesario replicar estos hallazgos y ampliarlos a otros productos lácteos, incluido el estudio de la leche de vacas lecheras infectadas con equipos comerciales de pasteurización, porque las condiciones de tratamiento pueden alterar la eficacia de la inactivación por calor», señalaron los investigadores.
Un portavoz de la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. (FDA) dijo a The Epoch Times en un correo electrónico que el estudio «refleja condiciones experimentales, y no debe utilizarse para sacar conclusiones sobre la seguridad del suministro de leche de EE.UU.».
Las pruebas realizadas por la FDA a las muestras de leche tomadas en las tiendas de comestibles revelaron previamente que aproximadamente una de cada cinco muestras daba positivo para la gripe aviar, pero las pruebas adicionales realizadas a muestras positivas demostraron que ninguna contenía el virus vivo.
La FDA y el Departamento de Agricultura de EE.UU. llevan a cabo estudios de pasteurización que incluyen pruebas de uso de homogeneizadores.
El Departamento de Agricultura declaró a principios de año que ninguna de las muestras de carne picada recogidas de los minoristas obtuvo resultado positivo para H5N1, pero que se habían detectado partículas de H5N1 en una de las 109 muestras de tejido muscular recogido de vacas condenadas al sacrificio. La agencia informó que durante la inspección post mortem, su personal identificó signos de enfermedad en el animal positivo y evitó que fuera enviado para el suministro alimenticio, como es la norma en el proceso de inspección de alimentos
La agencia también realizó otro estudio, tomando hamburguesas inoculadas con la gripe aviar y cocinándolas a temperaturas equivalentes a crudo, medio y bien cocido. Las hamburguesas cocinadas a termino crudo seguían presentando niveles detectables del virus, mientras que las cocinadas a termino medio o bien cocido, no lo tenían.
Históricamente, la gripe aviar ha circulado principalmente entre las aves, pero en los últimos meses ha saltado al ganado vacuno en Estados Unidos. Hasta el 13 de junio, las pruebas habían dado positivo en 96 rebaños de 12 estados. Tres granjeros, dos en Michigan y uno en Texas, dieron positivo y se cree que contrajeron la enfermedad de las vacas, según las autoridades. Las autoridades recomiendan precaución ante la presencia de animales con casos sospechosos o confirmados de gripe aviar, y que los granjeros que entren en contacto con ellos lleven equipo de protección y vigilen los síntomas.
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