A medida que se acercan las elecciones intermedias, las organizaciones de base están intensificando sus trabajos en relación con la transparencia en las elecciones. El grupo de defensa conservador, Tea Party Patriots Action (TPPA), está capacitando a más de 7500 personas sobre temas relacionados a la integridad electoral en varios estados.
«Lo que hemos estado haciendo durante el último año es capacitar a la gente para crear grupos de trabajo de integridad electoral a nivel local o de condado», dijo Jenny Beth Martin, presidenta honoraria de TPP Action, en una entrevista con NTD. «En este momento en que nos dirigimos a las elecciones, lo más importante para ellos es trabajar en el reclutamiento de observadores electorales y, en los casos en que las localidades están trabajando para seguir contratando gente para trabajar en las elecciones, también trabajan [en lo relacionado a] la contratación de trabajadores electorales».
Cuando se le preguntó por qué hay tanto énfasis en la integridad de las elecciones para las próximas elecciones intermedias de noviembre, Martin señaló que durante la última década se ha generado una desconfianza general en los resultados de las elecciones.
En 2016 y 2018, fueron los demócratas quienes desconfiaron e impugnaron los resultados de las elecciones, mientras que en la carrera presidencial de 2020 hubo una desconfianza sin precedentes en el lado republicano.
“No podemos ser una sociedad en la que simplemente decimos, ‘Oh, sí, las trampas ocurren, no es gran cosa, siempre suceden en todas las elecciones’, o estar de acuerdo con el hecho de que no confiamos en el resultado de una elección”, dijo Jenny.
Para restaurar la fe de la gente en las elecciones, los ciudadanos deben ejercer sus derechos, dijo. Las personas pueden convertirse en observadores electorales y observar las elecciones, asegurarse de que solo las personas registradas para votar en un lugar determinado emitan su voto y ofrecerse como voluntario para ayudar a los trabajadores electorales.
La supervisión de los ciudadanos, como los observadores electorales, es lo que “establece las barandillas” para garantizar que las elecciones en Estados Unidos se desarrollen de manera honesta y transparente, afirmó.
Garantizar la integridad electoral
Aunque los estados han recorrido un largo camino desde 2020 para garantizar la integridad de las elecciones, se necesita hacer más, según Hans von Spakovsky, miembro Senior de la Fundación Heritage y gerente de la iniciativa de reforma a la ley electoral.
En una clasificación de estados basada en la integridad electoral, la Fundación Heritage descubrió que ningún estado obtuvo más de 90 de una puntuación máxima de 100.
“Tennessee es el número 1, pero solo obtuvo 84 de 100”, le dijo Von Spakovsky a The Epoch Times. “Incluso el mejor estado del país necesita hacer mejoras”.
Tennessee fue seguido por Georgia, Alabama y Missouri. Los cuatro estados que obtuvieron peores puntajes en integridad electoral fueron Hawái, Nevada, California y Oregón.
Janel Brandtjen, una asambleísta estatal republicana de Wisconsin, está preocupada porque no se ha hecho lo suficiente para garantizar que las elecciones de mitad de período estén libres de la prevalencia de los problemas de integridad vistos en 2020.
En una entrevista con The Epoch Times, señaló que las personas aún pueden registrarse, obtener una boleta y votar para las elecciones parciales antes de que el Departamento de Transporte de Wisconsin verifique su identidad y dirección, una medida requerida por la ley.
Además, las personas que se acogen a la ley estatal de registro en el mismo día no están sujetas a comprobaciones de identidad instantáneas. «Sigue habiendo oportunidades para que los malos actores se aprovechen de esta y otras vulnerabilidades de seguridad en el proceso de votación», dijo.
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