Grupo de izquierda impulsa «Currículo de alfabetización racial» en mentes jóvenes

Por MATTHEW VADUM
27 de noviembre de 2019 12:02 PM Actualizado: 11 de junio de 2020 12:05 PM

Una organización sin fines de lucro de izquierda está enseñando a los niños estadounidenses a ver la vida a través de la lente de la política racializada y, en el proceso, los críticos dicen, está formando una nueva generación de activistas por la justicia social utilizando el dinero de los contribuyentes.

Los críticos han dicho durante mucho tiempo que el adoctrinamiento izquierdista de los niños tiene lugar en los distritos escolares públicos de todo el país al enseñarles que los blancos en Estados Unidos oprimen a los no blancos, los hombres oprimen a las mujeres, los cristianos oprimen a los no cristianos, los heterosexuales oprimen a los homosexuales, y los ricos oprimen a los pobres.

Dicen que los maestros de las escuelas públicas de todo Estados Unidos se rigen en gran medida por la ideología, no por el deseo de educar, y enseñan a los estudiantes que Estados Unidos, una nación imperfecta en su concepción por el pecado original de la esclavitud, nunca ha experimentado realmente reformas, como si la Guerra Civil y la Era de los Derechos Civiles nunca hubieran ocurrido.

A los niños se les enseña, dicen los críticos, que las corporaciones y los ricos oprimen a la ciudadanía diariamente a la vez que Estados Unidos empuja a los países menos poderosos, especialmente a los países de mayoría musulmana, y que es un país tan fundamentalmente corrupto y malvado, que sólo puede arreglarse por medio de cambios radicales. Los educadores de Seattle recientemente declararon que las matemáticas eran «racistas».

Alentados por grupos radicales como el Southern Poverty Law Center, se insta a los estudiantes a salir de clase para protestar contra la cadena de comida rápida pro-cristiana Chick-fil-A que vende sus productos cerca de las escuelas.

Un grupo similar es Pollyanna Inc, una organización sin fines de lucro de Nueva York que, en sus propias palabras, «promueve el cambio sistémico mediante el desarrollo de comunidades más fuertes», al ofrecer programas de estudio gratuitos a los maestros de todo el país.

El racismo, según el grupo, es «una institución primaria» de Estados Unidos y debe ser combatido.

«Pollyanna trabaja con instituciones académicas y de otros ámbitos para lograr sus objetivos de diversidad, equidad e inclusión. A través de sus modelos únicos de conferencias, plataformas de discusión y currículos de alfabetización racial, Pollyanna aumenta la competencia cultural», según su sitio web.

El «Racial Literacy Curriculum» (Currículo de Alfabetización Racial) de Pollyanna empuja a los estudiantes a convertirse en activistas, escribió Marina Medvin en Townhall.

Sus materiales educativos, «Historias de activismo –Cómo una sola voz puede cambiar una comunidad», enseñan a los jóvenes estudiantes «cómo podemos ser agentes de cambio comunitario, social, político y ambiental».

En un resumen del curso, Pollyanna insta a los maestros de cuarto grado a que proporcionen a sus alumnos «la capacidad de criticar y disipar las perspectivas eurocéntricas que favorecen una apariencia miope de la raza».

A los maestros de octavo grado se les enseña a «establecer compromisos para rectificar los males sociales actuales, tales como aprender y planificar cómo llevar a cabo el activismo antirracista y/o la defensa social en sus comunidades y/o mejorar sus vidas cotidianas».

Pollyanna está ganando aceptación entre los educadores.

El grupo se jacta de haber recibido a 35 personas de 15 escuelas de seis estados el 1 de junio en Nueva York como parte de su taller «K-8 Racial Literacy Curriculum» (K-8 Currículo de Alfabetización Racial), y muchos más talleres están programados para los próximos meses.

Pollyanna anunció que cuatro nuevas escuelas se convirtieron en «escuelas anfitrionas» y que la primera escuela canadiense del grupo, St. Clement’s en Toronto, planea organizar una conferencia más adelante en el año escolar.

Los esfuerzos de The Epoch Times para llegar a Pollyanna con el fin de recabar comentarios no tuvieron éxito.

Pollyanna es solo uno de los muchos grupos de izquierda que trabajan para llevar a cabo lo que los críticos describen como adoctrinamiento antiestadounidense de extrema izquierda.

El Southern Poverty Law Center (SPLC), por ejemplo, ofrece a los maestros planes de estudio gratuitos como parte de su programa «Teaching Tolerance» (Enseñando tolerancia). El SPLC impulsa la idea de que hay algo llamado «el efecto Trump» que se apoderó de la sociedad después de que Donald Trump se convirtiera en presidente y es responsable de la violencia política y otros males sociales.

Como reportó The Epoch Times en julio, los padres preocupados que pertenecen a un grupo llamado Fair Education Santa Barbara (Educación Justa Santa Bárbara) están demandando al Distrito Escolar Unificado de Santa Bárbara en la corte estatal de California por la instrucción de «sesgo implícito» financiada por los contribuyentes.

Los padres reclaman que Just Communities Central Coast, que está bajo contrato con el distrito escolar, retrata falsamente a Estados Unidos como un país cruel, opresivo y racista. En su denuncia legal, describen al grupo como una «organización anticaucásica, anticristiana» que, junto con el distrito escolar, lleva a cabo «acciones y enseñanzas discriminatorias» que «discriminan ilegalmente por motivos de raza, etnia, sexo y religión».

En ciudades como Edina, Minnesota, los críticos dicen que la izquierda ha transformado las escuelas K-12 en fábricas de adoctrinamiento con el propósito general de entrenar a los estudiantes para que sean reflexivamente racistas y antiamericanos.

Los alumnos de primaria leyeron un libro de A-B-C titulado «A es para Activista». Entre las viñetas están:

«A es de Activista. ¿Eres un activista?»

«C es de…. Contador creativo de buitres corporativos».

«F es por Feminista».

«T es de Trans».

«X es para Malcolm como en Malcolm X».

En Tennessee y en otros lugares, los grupos de izquierda han estado promoviendo el islam en las escuelas públicas.

El Consejo de Relaciones Estadounidenses-Islámicas, vinculado al terrorismo, ha estado exigiendo que se les enseñe a los estudiantes de las escuelas públicas en áreas abrumadoramente cristianas que el profeta islámico Mahoma es el único y verdadero mensajero de Dios.

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